Las crónicas anteriores decían que la Lazio fuera de casa no se parecía en mucho a la del Olímpico. Y aunque los últimos encuentros jugados lejos de Roma habían dejado buenas sensaciones para los de Pioli (empate en Ucrania ante el Dnipro y victoria en Verona ante el Hellas); frente al Sassuolo se ha vuelto a demostrar que, no es que la Lazio salga diferente a los partidos lejos de su estadio, sino que el control del encuentro no es ni mucho menos claro. En cuatro partidos fuera de casa, los romanos han perdido tres y ganado uno, con tan solo tres goles a favor y nada menos que 11 en contra. El Sassuolo, tras dos jornadas sin ganar, logró de nuevo la victoria, confirmándose como la revelación de la temporada por el momento. Un equipo sólido que aprovechó casi todo lo que tuvo y no dejó a los rivales crear demasiado peligro, aunque, por ocasiones, la Lazio mereció, como mínimo, el empate.

Penalti, cruceta y descanso

En Sassuolo no fue diferente a otros partidos fuera de casa del conjunto capitolino. La Lazio comenzó titubeante el encuentro y lo pagó con un penalti infantil cometido por Lulic sobre Cannavaro, sacando la pierna cuando el jugador local le recortaba hacia fuera, sin un peligro tan claro de gol. Berardi transformó el penalti lanzando fuerte al centro mientras que Marchetti se lanzó a su izquierda, poniendo el 1-0 en el marcador (min. 7).

Klose vuelve tras dos meses lesionado. Foto: SS Lazio

Tras el gol en contra, la Lazio reaccionó y estuvo muy cerca de empatar el encuentro con ocasiones de Klose, que volvía tras dos meses de lesión, con un cabezazo al larguero tras un centro de Candreva, un fuerte disparo de Milinkovic-Savic o un chut de Candreva desde la frontal que bien pudo ser el gol de la jornada. Merecieron más los laziali, sin embargo, el resultado con el que se llegó al descanso fue el de 1-0 para los neroverdi.

Segundo gol local y reacción biancoazzurra

La segunda mitad empezó como terminó la primera, con la Lazio buscando el gol. Pioli metió a Keita, siempre eléctrico cuando sale de refuerzo. Bien lo hizo Keita y bien lo hizo la Lazio; pero el premio llegó de nuevo para los locales en una contra que, tras un rebote en un defensa lazial, le cayó a Missiroli, que anotó el 2-0 para su equipo (min. 60).

Y bien pudo el Sassuolo dejar sentenciado el encuentro tres minutos después del segundo. En una nueva contra de los locales, Falcinelli la tuvo pero erró su disparó además de no ver cómo entraba su compañero por banda izquierda. Y la Lazio reaccionó: una jugada lenta, al trote, de los visitantes, terminó en un pase bien filtrado por Keita para que Felipe Anderson acortara distancias (min. 67). 2-1 y más de 20 minutos por delante.

Y la Lazio lo siguió intentando. Entró Matri por el recién recuperado Klose, necesita la Lazio a sus delanteros tras la lesión de Djordevic, y el equipo visitante siguió buscando el gol que le diera al menos el empate. Pero se enfrentó al problema que les asoló durante todo el partido, la falta de organización en el medio campo: ni Onazi y Cataldi en el primer tiempo, ni el italiano con Sergej en la segunda mitad supieron llevar la batuta del equipo, teniendo que venir Felipe Anderson en muchas ocasiones a organizar el juego. Se notó el virus FIFA en la Lazio que echó en falta a Biglia y a Parolo, ambos lesionados por lo menos tres semanas.

El partido no tuvo muchas más ocasiones claras, salvo una de Sergej dos minutos antes de finalizar el partido: un rechace en el área local no lo pudo aprovechar el joven y prometedor mediocampista serbio. Cataldi fue expulsado durante el tiempo añadido y; finalmente, los neroverdi se llevaron unos trabajados tres puntos. Ambos equipos quedan en puestos europeos, con el Sassuolo por delante de los romanos, ambos con 15 puntos. Los de Pioli necesitan mejorar su diferencia de goles, que es de un gol negativo.

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Sobre el autor
Javier Díez Colino
Coordinador General de Fútbol Internacional. Redactor en las secciones de Inglaterra, Italia y Portugal. Fútbol es fútbol.