Palermo y Sampdoria se veían las caras en el Estadio Luigi Ferraris con motivo de la decimoséptima jornada de la Serie A 2015/16. El conjunto local afrontaba este choque tras sacar un punto ante un equipo como el Lazio, que está en buena forma en este tramo de la temporada, además de la eliminación en Coppa Italia ante el Milan, que fue superior.

El Palermo, por su parte, parecía haber salido del pozo en el que vive permanentemente esta temporada, ya que la pasada jornada logró vencer por cuatro goles a uno al Frosinone. Sin embargo, ha quedado demostrado que aquella victoria no fue más que un oasis en el desierto de la incertidumbre a la que nos tiene acostumbrados el equipo de Sicilia.

Montella-Ballardini, duelo de pizarras con pocas novedades

Con respecto al partido de Coppa, Montella repitió prácticamente la alineación que aquel día se enfrentó al Milan en la ronda de octavos. Con Viviano en la portería como viene siendo habitual, la misión ofensiva recaía en Soriano, Cassano y Carbonero. El veterano delantero italiano no había sido titular ante el Milan en Coppa, por lo que tenía las pilas cargadas ante el Palermo.

Davide Ballardini, en su caso, repitió el once que venció al Frosinone con comodidad. La única variación fue la de Alberto Gilardino en detrimento de Djurdjevic. Tras haberle sentado en el banquillo la semana pasada, el delantero italiano salió al campo y marcó, por lo que Ballardini no se atrevió a dejarle fuera en el partido de hoy. El resto, los habituales: Lazaar, González, Struna, Chochev, Jajalo, Hiljemark, Vázquez… e incluso Trajkovski, que parece ya asentado en las formaciones palermitanas.

De más a menos y de menos a más

El partido estuvo lejos de ser emocionante. El dominio en los primeros compases era alterno, sin apenas ocasiones y con ambos equipos queriendo dominar el balón.

El Palermo parecía más cómodo en el campo, y hasta que se diluyó por completo pudo marcar incluso algún gol. Trajkovski tuvo la primera oportunidad tras un disparo lejano que puso a prueba a Viviano. Eran los mejores minutos del Palermo, que hasta el minuto 25 gozó de ocasiones con Gilardino y el ‘Mudo’ Vázquez muy activos por la zona de ataque.

A partir de aquí la ‘Samp’ comenzó a robarles la posesión a los visitantes, que se fueron apagando poco a poco. Fernando pudo marcar el primero, poniendo a Sorrentino a prueba en un par de ocasiones.

El propio Fernando tendría la ocasión más clara de la primera mitad: una falta al borde del área botada por el jugador brasileño que se dirigía a la escuadra derecha de la portería de Sorrentino, que se lució con una gran ‘palomita’.

Monopolio local en la segunda mitad

Tras el descanso, el dominio de la Sampdoria fue mayor, y el Palermo únicamente confiaba en poder salir al contragolpe en alguna jugada aislada.

En la primera clara que tuvieron, anotaron el 1-0. Antonio Cassano, como no podía ser de otra manera, le puso en bandeja el gol a Roberto Soriano, y el alemán naturalizado italiano no perdonó. Sorrentino no pudo hacer nada y el balón se coló por su derecha.

El Palermo no espabiló pese a los cambios. Quaison y Djurdjevic entraron para tratar de aportar más que los sustituidos Chochev y Gilardino. Ni siquiera estas modificaciones de Davide Ballardini pudieron superar tácticamente a la Sampdoria, que esperaba que la inercia del partido le permitiese poder marcar el segundo gol más pronto que tarde.

Y así fue. Una mala salida de Sorrentino, cuya fiabilidad hasta ahora en la temporada había sido de sobresaliente, provocó el 2-0 en el marcador por parte de David Ivan, que batió al capitán palermitano con una vaselina perfecta.

En los diez minutos restantes no solo el Palermo no reaccionó, sino que a punto estuvo de encajar el tercer tanto en un disparo de De Silvestri que detuvo, ahora sí, Sorrentino.

Adiós a la Serie A en 2015

Así se fraguó una dura derrota del Palermo, una vez más, decepcionante para sus seguidores. La varita de Franco Vázquez no parece suficiente para salvar el honor de un equipo que da tres de cal y una de arena esta temporada. 2015 se va, ya no hay más Serie A hasta el año que viene, y ahora solo toca pensar en cómo remontar el rumbo de un equipo que marcha decimosexto, y que tiene a la Fiorentina a la vuelta de la esquina como primer oponente en 2016.

La Sampdoria, por su parte, tampoco está mucho mejor, ya que solo está dos puntos y otros tantos puestos por encima del Palermo. Su debut en 2016 se producirá ante el Genoa, con ese ‘Derby della Lanterna’ para estrenar el nuevo año.