El AC Milan ha derrotado por 2-1 ante el Genoa. Los locales suman tres puntos a su casillero gracias a los goles de Bacca y Honda. El encargado de anotar el tanto grifone ha sido Alessio Cercimuy silbado por las gradas de San Siro. Esta victoria prolonga la buena racha de los de Sinisa Mihajlovic y les permite continuar en la pugna por los puestos europeos.

Los onces titulares

Por parte del AC Milan, Sinisa Mihajlovic apostó por los jugadores habituales, aquellos que han cambiado la dinámica del equipo rossonero en la Serie A. El enfrentamiento frente al Genoa era una oportunidad para meter prisión a su máximo rival, el Inter de Milán, y el técnico serbio continuó apostando por el 4-4-2. El joven Donnarumma fue el encargado de defender la meta. Con la baja de Ignazio Abate, De Sciglio formó la línea de cuatro defensas junto a Alex, Romagnoli y Antonelli. El centro del campo estuvo compuesto por cuatro hombres. Los encargados de crear el juego rossoneri fueron: Montolivo y Bertolacci, sirviendo de escuderos a Honda y Bonaventura, que ocuparon las bandas. El ataque lo compusieron Niang y el hombre gol de los de Milanello, Carlos Bacca.

El partido de los 'ex'

El Genoa, en cambio, llegaba a San Siro con bajas notables como la de Pavoletti, Rincón o Ansaldi. Aún así, Gasperini no cambió su estilo de juego y siguió apostando por el 3-4-1-2. La portería la ocupó Perín. La línea de tres centrales estuvo compuesta por Izzo, Burdisso y De Maio. Gabriel Silva y Fiamozzi sirvieron de carrileros, escoltados por Dzemaili y Rigoni en el centro del campo. El español Suso actuó de cerebro y enganche entre la línea de creación y el ataque grifone, hoy ocupado por Laxalt  y Matavz.

Este enfrentamiento ha sido especial para muchos jugadores, cuatro de ellos titulares en sus equipos. En el vestuario visitante se prepararon para el partido Suso y Cerci, cedidos por el AC Milan al Genoa en el pasado mercado de invierno. Bertolacci, Antonelli y Niang, que hoy defendieron la casaca rossanera, llegaron el conjunto lombardo en el periodo de traspasos estival procedentes del equipo genovés.

Gol tempranero

Calavarese hacía sonar su silbato y el esférico comenzaba a rodar en San Siro. Los primeros compases del juego mostraron a un AC Milan dubitativo. Los visitantes presionaban muy arriba la salida del balón y los locales eran incapaces de desplegar su juego ante el notorio enfado de Mihajlovic que quería que sus pupilos estuvieran mucho más arriba. Poco le duraría el enfado al técnico serbio puesto que en el minuto 3 de juego, el colombiano Carlos Bacca adelantaría a los locales después de recoger el cuero que quedaba muerto en el área del Génoa. El ex-delantero del sevilla suma ya 13 goles en la Serie A, erigiéndose como  segundo máximo goleador de la competición, por detrás de Gonzalo Higuaín.

Carlos Bacca dispara a puerta para hacer el 1-0 | Foto: acmilan.com

Sin mostrar su mejor cara, el AC Milan se mantuvo a gusto durante toda la primera parte. El dominio del esférico estaba repartido entre los dos equipos, pero las sensaciones eran favorables a los locales. El Genoa echaba en falta al incombustible Rincón y, sobre todo, a su goleador: Pavoletti. La posesión se inclinaba, de forma ligera, hacía el combinado grifone, pero los atacantes visitantes fueron incapaces de poner en apuros a Donnarumma.

Cerci regresa con 'música de viento'

Tras el paso por vestuarios, Gasperini dio entrada a Alessio Cerci en sustitución de otro ex jugador milanista: Suso. El extremo fue recibido por San Siro con una tremenda pitada, que se repetiría cada vez que el 11 grifone interviniese en el juego. 

En la segunda mitad, el partido continuaría con la tónica de la primera parte, posesión repartida para ambos equipos pero sin claras ocasiones de gol. Esa dinámica la rompería, en el minuto 64, Keisuke Honda con un tremendo zapatazo desde más de treinta metros. El japonés recogía un balón en el centro del campo y sin pensárselo dos veces disparó a la portería defendida por Perin para subir el 2-0 al marcador.

Keisuke Honda anota el 2-0 para el AC Milan | Foto: acmilan.com

Con el 2-0 en el luminoso de San Siro, el AC Milán disputó sus mejores minutos. Corría el minuto 75 de juego cuando Giacomo Bonaventura sacaba un córner a la frontal del área que remataría al palo de volea Riccardo Montolivo. El capitán rossonero puso en pie al estadio en lo que pudo ser uno de los mejores goles de la temporada. Apenas dos minutos después, el respetable milanista brindaría una nueva ovación, esta vez para Ménez. El delantero francés saltaba al terreno de juego, sustituyendo a Niang, y volvía a sentirse futbolista casi nueve meses después.

Con el partido dando sus últimos coletazos, Alessio Cerci se tomaría su pequeña venganza. El italiano recogía un balón mal despejado por Donnarumma para poner el definitivo 2-1.

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