En un partido con un ritmo decayente, Lazio y Sparta Praga empataron a uno, lo que provoca que ambos conjuntos deban meter una marcha más en el partido de vuelta en Roma dentro de una semana. Una plaza de los cuartos de final de la Europa League –palabras mayores al ver, por ejemplo, que estarán conjuntos del nivel del Liverpool, el Manchester United, el Dortmund o el Athletic– está en juego.

Para ello, ambos conjuntos deberán ofrecer más de lo que se pudo ver ayer en el partido del Generali Arena, donde el Lazio no desplegó por completo el potencial ofensivo que define a este equipo, ya que el  conjunto de Stefano Pioli comenzó perdiendo por el golazo de Frýdek a los 13 minutos y tuvo que meter una marcha más a su juego para lograr empatar casi al filo del descanso gracias a Parolo.

Los cambios no se transformaron en desequilibrio

En la segunda parte la Lazio quería tímidamente la victoria, pero el Sparta demostró por qué aún no ha perdido en la presente edición de esta competición continental. Los cambios de los entrenadores pretendían modificar el resultado y la actitud del equipo, pero tampoco pudieron influir en el marcador. Estos se realizaron casi por completo al comienzo de la segunda parte. Destaca la mala suerte de Dusan Basta, que apenas duró veinte minutos sobre el terreno de juego a causa de una recaída, lo que provocó la entrada de Maurício. El otro cambio de Pioli fue Lulic, mientras que Scasný confió en Fatai y Julis para tratar de revertir la situación.

El partido de vuelta se prevé apasionante, o al menos más interesante que este. El Sparta de Praga, al menos, deberá salir a marcar para contrarrestar el valor doble del tanto anotado por Parolo. El último equipo italiano que sigue vivo en la Europa League no debe confiarse ante los checos. Son la esperanza del ‘Calcio’.