El Beşiktaş dio la campanada en su visita al estadio del Nápoles al vencer por dos goles a tres al conjunto dirigido por Maurizio Sarri. El cuadro turco nunca fue por detrás en el marcador e hizo un trabajo excepcional para llevarse los tres puntos del feudo partenopeo, sobre todo gracias a un gran Aboubakar.

El Nápoles juega, pero el Beşiktaş responde con gol

Maurizio Sarri sorprendía dejando fuera del once titular a Manolo Gabbiadini y salía con Callejón, Mertens e Insigne en punta de ataque. El entrenador italiano decidía no tener ninguna referencia fija en la zona ofensiva y daba así libertad de movimientos a los tres futbolistas. Por su parte, el equipo turco acudía a San Paolo con varios conocidos de la liga española como Ricardo Quaresma, Fabricio o Adriano.

El Nápoles comenzó el encuentro con buen pie, ya que Mertens pudo anotar el 1-0 apenas transcurridos cinco minutos de juego, pero el disparo del belga se marchaba desviado. A partir de ese momento, el encuentro se abrió por completo. Las dos escuadras se atacaban la una a la otra, con sus dos estilos bien diferenciados. Los de Maurizio Sarri intentaban elaborar sus jugadas con pausa mientras que los otomanos optaban por buscar la velocidad de Aboubakar y de Ricardo Quaresma.

Adriano celebra su gol | Foto: Beşiktaş JK
Adriano celebra su gol | Foto: Beşiktaş JK

Sin embargo, el Beşiktaş quería demostrar que no había viajado hasta Italia para pasar el rato y a los doce minutos de encuentro daba un golpe en la mesa. Arslan sacaba a relucir su clase para dar un pase excepcional a Quaresma, que raseaba el balón para que Adriano marcase a portería vacía.

Mertens afina la puntería

Una victoria de los italianos podía clasificarlos virtualmente, pero el Nápoles debía ir a remolque prácticamente todo el partido. A pesar de ello, los partenopeos dieron un paso adelante y pocos minutos después empezó el vendaval ofensivo hacia la portería de Fabricio. Con los tres del ataque totalmente inspirados, sobre todo Mertens, el Nápoles puso en serios apuros al cuadro turco. De hecho, el futbolista belga tuvo dos ocasiones bastante claras prácticamente consecutivas.

Así pues, a la tercera llegó la vencida. Hamšík se inventó un pase espectacular a la espalda de la defensa turca para Callejón, que llegaba a línea de fondo y centraba la pelota a Mertens, quien aparecía desde atrás y lograba empatar a uno el encuentro. Pero la alegría no duraría mucho al conjunto napolitano, puesto que ocho minutos después los turcos se volvían a adelantar en el marcador. Maggio intentaba pasar atrás el balón a Reina, pero Aboubakar se percataba de ello y robaba el pase para quedarse solo ante el guardameta español y batirlo con un tiro raso.

Mertens dispara el balón en un lance del encuentro | Foto: UEFA
Mertens dispara el balón en un lance del encuentro | Foto: UEFA

El Beşiktaş volvía a adelantarse en el marcador y San Paolo comenzaba a impacientarse. A pesar de que el juego de los de Maurizio Sarri estaba siendo bueno, los errores defensivos estaban condenando a los partenopeos ante los turcos. El encuentro llegaba al descanso con un Nápoles que debía mejorar sus prestaciones en defensa si quería sacar algo positivo del enfrentamiento. Por su parte, los de Şenol Güneş estaban haciendo lo que debían para dar la sorpresa en San Paolo.

Insigne lo falla, Gabbiadini no

El Nápoles volvería con otra cara totalmente diferente a la segunda mitad, puesto que cinco minutos después de la reanudación Fabricio derribaba a Mertens y el árbitro señalaba penalti. Sin embargo, Lorenzo Insigne, el encargado de lanzar la pena máxima, veía cómo el portero del cuadro turco conseguía repeler su disparo desde los once metros.

Arslan sacaba a relucir su clase para dar un pase excepcional a Quaresma, que raseaba el balón para que Adriano marcase a portería vacíaEl Nápoles estaba obligado a ir a por el partido y el Beşiktaş le estaba comiendo el terreno poco a poco. Así pues, Sarri decidió mover el banquillo e introducir en el campo a Manolo Gabbiadini en detrimento de Lorenzo Insigne, algo que pareció espolear a los napolitanos. A pesar de ello, los turcos no se echaron atrás y aguantaron la incipiente superioridad de los italianos.

El Nápoles comenzó a llegar con asiduidad al área defendida por Patricio. Preso de su ansiedad por perder ante su público, los de Sarri no estaban demasiado precisos en el último pase y no conseguían sorprender a la defensa turca. Sin embargo, un balón aparentemente inofensivo acababa con otro penalti a favor del Nápoles. Caner Erkin, cedido en el Beşiktaş por el Inter, agarraba inexplicablemente a Mertens y el trencilla volvá a señalar el punto de penalti. Con Insigne ya fuera del terreno de juego, Manolo Gabbiadini era el encargado de lanzar la pena máxima. El atacante italiano engañaba a Fabricio y anotaba el empate a dos.

Aboubakar sentencia y mantiene invicto a los turcos

Aunque el empate no parecía contentar al Nápoles, Sarri decidió meter en el campo a Allan en sustitución de Zieliński para dar más aplomo a su centro del campo. No obstante, la jugada le sería contraproducente. El Beşiktaş no estaba dominando el encuentro y el gol de los italianos parecía más cerca que el de los turcos. Pero todo cambiaría en apenas una jugada.

Aboubakar y Quaresma desbordan alegría tras el gol del camerunés | Foto: Beşiktaş JK
Aboubakar y Quaresma desbordan alegría tras el gol del camerunés | Foto: Beşiktaş JK

Allan cometía una falta algo ingenua en el lateral del centro del campo. Quaresma centraba de manera espectacular al área y Aboubakar se adelantaba a su marcador para cabecear la pelota al fondo de la red. Los turcos anotaban el tercero a falta de cinco minutos para el término del encuentro. Un marcador que finalmente no se movería más.

El Nápoles pierde en competición europea en San Paolo diecinueve partidos después, ya que no lo hacía desde la temporada 2012-2013. A pesar de esta derrota, el cuadro italiano se mantiene en primera posición del grupo B, por delante del Beşiktaş, con cinco puntos, y del Benfica, con cuatro.