El Milan venció por la mínima a la Juventus en San Siro gracias al golazo de Manuel Locatelli. Los rossoneri supieron esperar su oportunidad y la aprovecharon ante una Vecchia Signora que echó demasiado en falta a Paulo Dybala, que se tuvo que marchar lesionado en la primera parte.
Montella volvía a dar la alternativa a Manuel Locatelli debido a la grave lesión de Montolivo y Bacca recuperaba la titularidad en detrimento de Lapadula. Por otro parte, Allegri salía con su mejor once disponible, con Benatia junto a Bonucci y Barzagli en el centro de la zaga y Dybala e Higuaín en punta de ataque.
Poco juego, pocas ocasiones
Los bianconeri comenzaron el encuentro de manera fulgurante y embotellaron al Milan en los primeros diez minutos de juego. Sin embargo, los de Montella se sacudieron la presión y a punto estuvieron de sorprender a la Juventus gracias a la velocidad de sus atacantes. De hecho, la primera parada del encuentro llevaría la firma de Buffon, que despejaba un tiro cruzado de Suso.
A partir de ese momento, el partido se igualó. Pero la Juventus seguía demostrando su superioridad gracias a la calidad de sus jugadores. Además, los turineses estaban robando la posesión de balón al Milan, algo no demasiado común esta temporada con Vincenzo Montella en el banquillo de la escuadra rossonera.
La Juventus pierde a Dybala
La Vecchia Signora estaba a gusto sobre el campo, pero parecía que todo se iba a torcer pasada la media hora de partido. Dybala se lesionaba en su pierna derecha y tenía que ser sustituido por Cuadrado, autor del único gol del club bianconero en su último partido de Champions League. Sin embargo, la mejor ocasión de la Juventus llegaría pocos minutos después de la lesión del delantero argentino. Pjanić lanzaba una falta lateral que se envenababa y acababa en gol, pero el árbitro finalmente anulaba el tanto del centrocampista bosnio, que veía la tarjeta amarilla por protestar.
Donnarumma volaba para repeler el magnífico disparo de KhediraEl segundo tiempo tendría otro ritmo totalmente diferente. La Juventus seguiría siendo ligeramente superior a los rossoneri, pero los de Vincenzo Montella se encontraban cada vez más a gusto sobre el terreno de juego. El partido parecía que tomaba la senda del empate sin goles dadas las pocas ocasiones que ambos equipos habían creado.
Locatelli enloquece a San Siro
No obstante, todo cambiaría en el minuto 65. Suso subía por la banda derecha y pasaba atrás, hacia la esquina de la frontal del área. Ahí recibía el balón Manuel Locatelli, que se sacaba un tremendo disparo a la escuadra izquierda de la portería. El canterano milanista anotaba el primer y, a la postre, último tanto del partido.
A partir de ahí, el Milan se echó para atrás y la Juventus intentó de todas las maneras posible meter el gol del empate. Montella fortalecía el centro del campo con la entrada de Poli en sustitución de Niang y Allegri hacía justamente lo contrario: Benatia se marchaba del terreno de juego para que Mario Mandžukić entrase en su lugar. Los rossoneri se encerraron en su campo para defender el 1-0 y poder salir en algún contragolpe gracias a la velocidad de Bacca. Los chicos de Massimiliano Allegri lo intentaron una y otra vez, pero la defensa del Milan parecía un muro inexpugnable.
Donnarumma evita el empate en el último suspiro
La victoria parecía predestinada al Milan. Sin embargo, la Juventus tuvo una ocasión de oro en el último segundo del encuentro. La joya de la cantera rossonera, Gianluigi Donnarumma, volaba para repeler el magnífico disparo de Khedira, que, de no ser por el cancerbero italiano, se colaba por la escuadra derecha de la portería.
Este triunfo devuelve al Milan a los puestos nobles de la clasificación y le deja a tan solo dos puntos de la Juventus. La Vecchia Signora, por su parte, seguirá como líder una jornada más a pesar de la derrota en San Siro, la segunda de la temporada.