Pocos pueden presumir de conocer al Heerenveen tanto como Foppe de Haan. El frisón fue anunciado como entrenador del SC Heerenveen el 20 de octubre de 2015, comenzando así su tercer mandato en el club (1985-1988, 1992-2004), tras una serie de malos resultados que culminaron con el despido de Dwight Lodeweges. De Haan era el soplo de aire fresco que venía necesitando el club de Frisia (que solo había ganado un partido en la temporada de Eredivisie, contra De Graafschap en la primera jornada), llevándoles en tan solo cuatro partidos desde la decimoquinta plaza de la tabla hasta la onceava. Foppe siempre ha reconocido estar muy unido con el club, e incluso rompió a llorar en la rueda de prensa posterior al partido contra el Roda, en el que su equipo se hizo con la victoria por tres goles a cero. De Haan es sin duda uno de los entrenadores más carismáticos de Holanda, pero Frank de Boer también lo es. 

El Ajax de Frank de Boer (como entrenador) dista mucho de ser el mejor Ajax de la historia, pero lucha, convence, gusta, y sobre todo asusta a sus rivales. El tridente ofensivo formado por Fischer, Milik y Younes es garantía casi segura para un Ajax que lleva primero en la tabla desde la primera jornada.

Un Ajax - Heerenveen nunca es un partido más, haya o no haya algo importante en juego; es un duelo entre titanes de Eredivisie, y como tal, pocas veces defrauda. Esta vez tampoco hubo excepción. Los locales se adueñaron del balón desde el primer momento, y lograron adelantarse en el minuto 12 tras una gran jugada perpetrada por Younes, Klaassen y por último Fischer. A partir de ese momento, el partido se convirtió aún más en un espectáculo para el Ajax, que no se conforma solo con ganar, sino que siempre busca lucirse. 

Al gol de Fischer se le añadió en el minuto 23 el tanto de Arkadiusz Milik, que casi sin pretenderlo mandó el balón al fondo de la portería visitante. El polaco buscaba centrar el balón para Klaassen, pero al no poder ponerlo con la intensidad deseada decidió sorprender a Mulder y colar el balón por su izquierda. El Ajax además puede presumir de jamás haber perdido un partido en el que Milik hubiese marcado. 

El tercer gol del equipo local llegó gracias a Amin Younes, el último jugador de la delantera que faltaba por marcar. Su tanto en el minuto 28 vino de una colosal jugada individual del alemán en el área grande. El extremo consiguió irse de hasta cinco defensas antes de cruzar el balón frente a Mulder, que no pudo hacer nada sino recriminar a su defensa por no haber despejado el balón. El partido del Ajax estaba rozando la perfección. Los de Foppe de Haan solo habían rematado a puerta tres veces frente a seis del Ajax. Mucho tenía que cambiar para que los locales no se hiciesen con los tres puntos. 

Los visitantes ya tenían asimilado incluso desde antes del partido que poner contra las cuerdas al Ajax era misión casi imposible, y si a eso le sumaban que iban a ir perdiendo 3-0 al descanso el asunto se volvía más turbio aún. Pero el ex-feyenoorder te Vrede logró acortar distancias al inicio de la segunda mitad, después de recibir un pase largo proveniente de Slagveer y marcharse de Veltman, para acabar pasando el balón entre las piernas de Cillessen. Sin embargo, el Ajax seguía dominando el partido, y volvió a incrementar su ventaja gracias a Fischer, que marcaba su segundo gol del partido y a Klaassen, que volvía a asistirle. Los ajacieds tuvieron además una gran ocasión para marcar el quinto gol (que significaría el tercer partido consecutivo como local en Eredivisie marcando al menos cinco goles), después de que pitaran penalti sobre Milik, quien también lanzó el balón, pero por encima de la portería de Mulder.

El quinto gol para los locales no llegaría hasta el minuto 73, por una jugada llevada a cabo por Milik, que esta vez sí logró centrar el balón para Klaassen, que no perdonó. Como consuelo para los frisones, Mitchell te Vrede logró añadir otro gol para su equipo y para su cuenta particular tras un error garrafal de Jasper Cillessen, quien dejó su portería vacía tratando de evitar un córner. 

La última vez que el Heerenveen logró salir victorioso frente al Ajax fue en enero de 2009. Casi siete años después, el conjunto de Frisia aún no ha podido demostrar su valía frente al conjunto de Ámsterdam. El siguiente partido del Heerenveen será contra el Excelsior, un partido importantísimo para ambos, que empatan a 17 puntos en la parte media de la clasificación, mientras que el Ajax jugará contra el Utrecht como visitante, un partido que se antoja algo complicado, pero del que esperan sacar los tres puntos.