El partido comenzó con un dominio alterno de la pelota en terreno del Feyenoord, y con el 1-0 de Sebastian Haller que batió a Vermeer tras aprovechar un disparo de van de Maarel de media distancia. Tras el gol, el equipo local siguió dominando el encuentro y teniendo el balón ante un equipo que no conseguía superar el centro del campo con la pelota controlada, y que hacía aguas en la zona defensiva. Después de un tiempo, el Utrecht disminuyó la presión, y los de Gio empezaron a pisar campo contrario con más frecuencia, aunque no estaban consiguiendo crear ocasiones pues estaban abusando del juego por dentro entre líneas, y los locales estaban acumulando muchos efectivos.

Dominio local ante un Feyenoord que despertó con el paso de los minutos

El 1-1 llegó por medio de Vilhena que aprovechó una recuperación de balón de Kramer que le puso un centro raso al área, que este remató de interior batiendo al portero local desde el punto de penalti. El ritmo de juego estaba siendo algo lento, y el Feyenoord que había visto la luz, empezó a dominar jugando con mucha más fluidez, y realizando buenas combinaciones entre líneas, aunque eso no le eximía de dejar espacios en defensa y de seguir recibiendo ocasiones de gol. Después de unos minutos, el combinado dirigido por Gio van Bronchkorst perdió continuidad en el dominio ante un conjunto local que mantenía las líneas a buena altura, y que no dudaba en salir al contraataque con la pelota jugada.

En los últimos minutos del primer tiempo, el ritmo de intensidad descendió mucho, y el Utrecht tuvo una fase de dominio en el que realizó muchas posesiones largas, y circuló el balón con bastante lentitud. Pero a pesar de ello, seguía llegando a la portería del contrincante con bastante facilidad, mientras que el Feyenoord optó por replegarse más en su campo, y retiró bastantes efectivos de la zona de ataque. Pese a ello logró marcar el 1-2 por medio de Kuyt que remató un centro de Vilhena desde la línea de fondo libre de marca en el centro del área, después de que Kramer la dejara pasar. Después del gol apenas quedó tiempo para más que unas posesiones largas.

Dominio claro feyenoorder con 1-2

El segundo tiempo comenzó con dominio de balón del Utrecht, aunque era el conjunto visitante el que tenía la situación controlada bajo un buen ritmo de intensidad, en un encuentro con muchas alternativas, y con ocasiones por parte de ambos equipos. Aunque a pesar de ello, era el Feyenoord el que estaba llevando el peso del juego de ataque en el encuentro, a pesar de que iba ganando 1-2. Mientras tanto, el conjunto local estaba teniendo más dificultad para tener el cuero en campo rival, y para atacar con regularidad. Pese a ello, lo poco que estaba consiguiendo aguantar la pelota en campo rival era cuando buscaba en largo a alguno de sus delanteros que la mantenía de espaldas a la portería.

Después de los primeros minutos de juego, el conjunto local siguió dominando la redonda, mientras que era el Feyenoord el que se dedicaba a salir en transición rápida con hombres veloces como Ejeiro Elia que estaba desbordando por la banda izquierda. Las circulaciones de balón estaban siendo lentas. A pesar de que era el Utrecht el que estaba controlando el partido, el equipo dirigido por Gio van Bronchkorst estaba llevando más peligro en sus acciones, mientras que los locales llegaban al área aunque no estaban consiguiendo crear el mayor desequilibrio por dentro entre líneas. Cuando el enfrentamiento llegó a la media hora de juego, fueron los visitantes los que recuperaron el dominio del esférico, y los que ejercieron un amplio control en el juego.

En los últimos minutos de juego, el conjunto feyenoorder mantuvo su dominio del balón a base de presionar arriba a su rival que no podía salir de su terreno de juego con el cuero, y gozó de ocasiones bastante claras de gol. En los últimos segundos, el partido se abrió más, y los dos equipos tuvieron ocasiones claras de gol saliendo al contraataque. Fue más el Utrecht, el que dominó en los últimos minutos asediando el área rival, aunque el Feyenoord encontró espacios saliendo en transición rápida por el costado izquierdo con un Kuyt que resultó ser una gran alternativa a la hora de sacar la pelota jugada.