Una nueva temporada comienza para el Chelsea y con ella llegan las discusiones sobre quienes deben ser los titulares, como todas las campañas, esta no será la diferencia. José Mourinho tiene entre manos uno de los dilemas más bonitos que se le pueden presentar a un entrenador de fútbol, el de Setúbal deberá decidir que jugadores serán considerados suplentes, hasta allí todo va normal, pero ¿Qué aporta cada jugador en la zaga al conjunto londinense? .

Empezando desde el punto más retrasado de la defensa, el guardameta. La competencia para esta campaña esta definida: Courtois y Cech se jugarán todo por un lugar titular en la meta blue, el portero checo ha demostrado mil y un veces su valía, también es uno de los hombres de confianza para el entrenador portugués, además de ser uno de los más queridos por la afición.

Por su parte, Thibaut Courtois vuelve al Chelsea tras haber estado los últimos años cedido en el Atlético de Madrid, el meta belga es sin duda alguna uno de los mejores porteros del mundo, a pesar de su corta edad Courtois ha disputado muchos partidos de alta exigencia, en los cuales no ha fallado prácticamente nunca. Thibaut fue pieza fundamental en la consecución de títulos del Atlético de Madrid, especialmente en el impresionante campeonato liguero, se puede decir que él, junto a Diego Costa, fueron los principales artífices del triunfo doméstico del Atlético la campaña pasada.

Las estadísticas de ambos porteros marcan algo muy similar, el porcentaje de atajadas por partido de Petr Cech es de 2,38 salvadas por encuentro, mientras que el de Courtois es de 1,89. Ambos poseen un muy buen juego aéreo, lo cual es fundamental para Mourinho, la principal diferencia llega quizás en el juego de pies, donde Courtois parece ser mucho más ágil y seguro. Este dilema se antoja complicado, ambos guardametas tienen la calidad para ser titulares en cualquier conjunto del mundo, pero acá sólo puede jugar uno.

Courtois se perfila como el guardameta titular ya que José Mourinho ha insistido mucho en su retorno a Londres, además de que el mismo belga ha dicho en reiteradas ocasiones que no aceptará ser suplente, razones futbolísticas le sobran. Cabe recordar que al final de la campaña pasada Petr Cech sufrió una lesión en el codo, lo cual habrá que ver si deja consecuencias que lastren la actuación del guardameta checo que lleva en el club ya 10 años.

Otro de los dilemas que deberá solucionar Mourinho es el de la defensa, se puede prever que la línea de cuatro defensores sería la formada por Ivanovic- Cahill- Terry- Filipe Luis, pero jugadores como Azpilicueta, que fue fundamental la temporada pasada, además de Zouma, Ake, entre otros, quedarían relegados al banquillo. Una de las principales dudas de este nuevo año será ver el nivel en el que se encuentre John Terry, quien a pesar de su destacable campaña pasada, ha mostrado que no tiene la misma velocidad y que puede sufrir mucho a los atacantes veloces, que en un torneo como la Premier League, son abundantes.

La polivalencia de Branislav Ivanovic será también un factor a tomar en cuenta, ya que el serbio puede jugar tanto de lateral como de marcador central, en el caso de que Mourinho decida usarlo junto a Cahill el más beneficiado sería Azpi, ya que su lugar natural, lateral derecho sería un puesto vacante para el español.

El lateral izquierdo parece ser una competencia de un solo hombre tras la salida de Ashley Cole, Filipe Luis aportará solidez defensiva, lo que pide Mourinho principalmente, además de que sus idas al ataque son siempre criteriosas, el brasileño es un puñal constante por su banda, su técnica y rapidez ya le han valido para cumplir funciones de extremo en momentos pasados de su carrera.

La llegada de Kurt Zouma también ofrece nuevas variantes, es un recambio de calidad el cual aportará más profundidad a la zaga londinense, las cartas están echadas, sólo queda esperar por una decisión de Mourinho, aunque lo más importante es que el conjunto londinense se prepara muy bien, con recambios de nivel en prácticamente todas las líneas del terreno de juego.

Los segundos años de Mourinho estadísticamente siempre son los mejores en sus equipos, habrá que esperar y ver, pero este año no hay excusas validas para no luchar por todos los títulos posibles, el objetivo está claro, el aficionado blue considerará como fracaso todo lo que no sea ser campeón.

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