Pese a que hay algunos nombres que se quedan fuera de este decálogo, no dejan de ser menos importantes, sino que su rendimiento ha sido igual en los últimos meses que ahora, no ha habido evolución. Aquí hay diez claves que han hecho al Liverpool pasar de un equipo anodino a uno que compite por sus objetivos.

1. Simon Mignolet

Empezando desde atrás, Mignolet. Antes de que el técnico decidiese sentarle durante tres jornadas coincidiendo con los encuentros ante Manchester United, Arsenal y Burnley -y fue en el duelo ante estos últimos en el que recuperó la titularidad dada la desafortunada lesión de Brad Jones-, el belga había encajado veinte tantos en quince jornadas, firmando actuaciones muy pobres y consiguiendo dejar la portería a cero en tan solo cuatro encuentros.

Desde el choque en Turf Moor, la situación se ha revertido y se ve un Mignolet mucho más seguro bajo palos. Les han marcado únicamente cinco goles en nueve partidos. Ha terminado sin encajar goles en seis de dichos duelos, lo cual deja patente su mejoría. Mide las salidas con más precisión, se hace grande ante los delanteros y transmite seguridad a su defensa, lo cual es fundamental en un guardameta.

2. Mamadou Sakho

El francés se ha erigido por sorpresa como el jefe de la defensa. El Liverpool pagó cerca de veinte millones de libras para hacer de Lovren el eje sobre el que girase todo en la zaga, pero el pobre rendimiento del croata propició la entrada en el once de Sakho. Desde que la defensa de tres se hizo una constante en el esquema del entrenador, ocupa el puesto de central izquierdo y lo hace con muy pocos fallos. Fue baja en Southampton y se notó en muchos momentos. Empezó el curso futbolístico relegado al banquillo, pero ha convencido al técnico con sus buenas actuaciones, hasta el punto de estar por encima del mencionado Lovren y de Kolo Touré, que también estaba por delante de Sakho en la rotación hace unos meses.

Pese a que como defensa su evolución ha sido innegable con el paso de los partidos, cuando quiere sacar el balón jugado todos los aficionados tienen un nudo en la garganta. Tiene que mejorar con el esférico en los pies. A pesar de ello, se ha ganado el cariño de los liverpudlians por su implicación en la labor comunitaria.

3. Emre Can

Juventud y potencia se mezclan en el alemán procedente del Bayer Leverkusen, que ha pasado de no contar para el entrenador en el primer tercio de temporada a ser una pieza fundamental. A base de contundencia, se ha erigido como un pilar necesario en la defensa, donde aporta fuerza a raudales. No se amilana ante ningún rival, tenga el peso que tenga dentro de la liga. Aparte, quiere sacar el balón jugado, no es amigo del pelotazo. Rodgers le probó en un par de partidos en las labores de contención del centro del campo, y también rindió de perlas. Ahora mismo, es insustituible.

4. Alberto Moreno

Llegado en verano, ha pasado de ser un lateral discutido a un buen carrilero. Tras ser muy criticado por la nula aportación defensiva que empañaba sus buenas presencias ofensivas, Rodgers le ha liberado en cierta manera de las labores de contención y puede explotar mejor sus llegadas al área rival. Sigue ayudando a la zaga, pero en menor medida.

5. Jordan Henderson

El segundo capitán del equipo liverpudlian lleva 24 partidos consecutivos jugados como titular. La marcha de Gerrard es una realidad a la que cada vez queda menos tiempo para llevarse a cabo, y él está empezando a adquirir la garra y el carácter necesarios para quedarse como líder del vestuario. La baja de Lucas Leiva le ha hecho tener que bajar más a recibir el balón e intentar subirlo combinando con los extremos, y sus ayudas en la defensa son fundamentales. Su visión de juego se incrementa con el paso de los años. Centrocampista de presente y de mucho futuro.

6. Philippe Coutinho

La magia personificada. El jugador con más talento de la Premier juega en el Liverpool y se llama Coutinho. Hay una diferencia brutal en el equipo cuando él está y cuando no. Ve pases que nadie más ve, desquicia a los contrarios, mueve a sus compañeros. Ha ido asumiendo más responsabilidades con el paso del tiempo, y ya no se esconde. Desde que Rodgers se ha dado cuenta de que tiene que jugar sí o sí, lleva 20 partidos consecutivos saliendo de inicio, lo cual hace temer que llegue algo justo de fuerzas al tramo final de la temporada.

7. Raheem Sterling

El gran descubrimiento del Liverpool esta temporada. Mantuvo al equipo cuando Sturridge estaba de baja, y si los 'reds' ocupan la posición actual de estar tan cerca de los puestos Champions es en gran medida gracias a él. Velocidad y desparpajo son sus principales virtudes, y aunque la posición en la que mejor rinde es de extremo, se ha sabido adaptar al puesto de delantero centro cuando el técnico así lo ha requerido. Es cierto que el equipo pierde bastante sin un punta especializado, pero él es incansable y siempre presiona la salida de balón del rival. Media Europa anda detrás de hacerse con sus servicios, pero el inglés de origen jamaicano se mantiene concentrado en su labor con el Liverpool. Una pieza imprescindible con un futuro más que brillante y prometedor.

8. Mario Balotelli

No es titular, pero por fin ha empezado a aportar cosas al equipo en los pocos minutos que el técnico le concede. Un gol suyo a falta de cinco minutos hizo que los tres puntos se quedaran en Anfield ante un rival directo por las plazas Champions como el Tottenham. Otro gol suyo en el tramo final dio ventaja a los 'reds' en su eliminatoria de Europa League ante el Besiktas.

Salió en el descanso del encuentro de FA Cup en Selhurst Park y lo revolucionó, permitiendo a su equipo remontar y clasificarse a la siguiente ronda. Su entrada permitió a Sturridge quedar más estático y aprovechar mejor los balones que le llegaban. Al menos ya empiezan poco a poco a justificarse los millones pagados por él.

9. Daniel Sturridge

La clave. Ha estado cuatro meses de baja en los que el equipo ha pecado de falta de gol, de una referencia a la que le llegaran balones e infundiera temor a las defensas rivales. Se mueve de maravilla de un lado al otro del área, es un quebradero de cabeza constante, juega y hace jugar. Reapareció ante el West Ham y marcó, y desde entonces no ha podido parar de tener minutos y causar peligro. Sin él, el Liverpool pierde muchísimo, como se demostró en el primer tercio de campaña. Se fue a Boston, se operó y ahora está mejor que nunca. Sin otro delantero que le reste protagonismo -como lo era Suárez-, 'Stu' demuestra que es uno de los mejores del mundo. Es el tipo de delantero que se asocia a la perfección con Sterling. Se sabe desmarcar cuando toca y parar y darse la vuelta cuando toca. Se le pueden poner pocas pegas.

10. Brendan Rodgers

El artífice del cambio. Desde que llegó, todo cambió. Cogió a un equipo sumido en la mediocridad y sin ambiciones e implantó el estilo que dejó boquiabierto a todo el panorama futbolístico con el Swansea, al que apodaban “Swansealona” por sus similitudes con el Barcelona de Guardiola. Le costó que sus jugadores se adaptasen a lo que él les pedía, pero el año pasado logró algo que parecía imposible a corto plazo: pelear por la Premier hasta la última jornada, y devolver al Liverpool a una Champions League que no jugaba desde hacía un lustro. Se le acusa a menudo de no acertar con los cambios durante los partidos, pero hace un par de meses se arriesgó con la defensa de tres y le ha lavado por completo la cara al equipo.

Además, supo sentar a Mignolet cuando tocaba para hacerle mejorar y no tuvo problema en dar partidos complicados a un portero que apenas ha jugado en cuatro años. Ha levantado a unos jugadores hundidos moralmente. El juego no es brillante, pero tiene claro lo que quiere y cómo lo quiere, e independientemente de que lo logre con mayor o menor brillantez, lo logra. El tiempo le ha dado la razón, y ahora es objeto de culto de la sabia afición liverpudlian.