El futbolista del Manchester City David Silva se incorporó este martes a los entrenamientos junto al resto de sus compañeros después del codazo que recibió del senegalés Cheikhou Kouyaté en la segunda parte del partido de la Premier League ante el West Ham United (2-0) y del que fue retirado en camilla y con oxígeno.

"Muchas gracias a todos por los mensajes de apoyo. Todas las pruebas han salido bien y ya me encuentro en casa. Lo más importante los tres puntos", escribió el domingo el jugador canario en su perfil de una conocida red social una vez fue sometido a las distintas pruebas médicas.

Dos días más tarde, Silva ha vuelto a ejercitarse aunque tantos los servicios médicos del club como el técnico citizen, Manuel Pellegrini, analizarán su evolución en los próximos días para determinar si puede jugar el sábado (18:30 horas) frente al Aston Villa en la cita correspondiente a la trigésimo cuarta jornada de la Premier League.