Nueva temporada, nuevas ilusiones y pilas recargadas. Así inició la nueva pretemporada el Arsenal 2015/16. Una temporada en la que todos los aficionados de los gunners tienen puestas muchas expectativas. Los ingleses, con dos FA Cup consecutivas, están recortando muchas distancias con los principales equipos del torneo (Chelsea y Manchester City, principalmente). Así, tras un genial 2015, los de Wenger quedaron en la tercera plaza. La pretemporada de los gunners estuvo dividida en dos continentes -Asia y Europa- y dos torneos veraniegos -Premier League Asia Trophy y Emirates Cup-. La Community Shield ante el Chelsea sería el último partido antes del arranque de la Premier League.
En primer lugar, el Arsenal viajó a Singapur para disputar un torneo de cuatro equipos donde tres de esos cuatro fueron de la Premier: Stoke, Everton y el propio Arsenal. El cuarto semifinalista fue un combinado de jugadores del propio país.
Arsenal - Singapur XI
Partido de trámite para los ingleses, que jugaron ante un combinado del país. El Arsenal llevaba pocos días de entrenamiento, pero ya se pudo ver, aunque no estaban convocados para este partido, a los Petr Cech, Mesut Özil, Santi Cazorla o Theo Walcott. Wenger alineó el siguiente once, y en la segunda parte aparecieron jugadores como Zelalem, Crowley, o el español Toral.
El partido dejó dos actuaciones que hay que destacar: Chuba Akpom y Jack Wilshere. El '10' del Arsenal, siendo el mediapunta del equipo, se sintió muy cómodo y fue el organizador de su equipo. El joven delantero inglés demostró que puede tener carrera en el primer equipo con un hat-trick. Poco más hubo que destacar de ese primer test, ya que tampoco fue el mejor rival para analizar a los de Wenger. Con esta victoria, los ingleses pasaban a la final.
Arsenal - Everton
La final de la Premier League Asia Trophy enfrentó al Arsenal y al Everton, que eliminó al Stoke por penaltis. Para este partido, Wenger pudo contar, a excepción de Alexis, con el que posiblemente va a ser su once habitual durante buena parte de la temporada. Al ser una final y un rival de identidad, Wenger quiso testear a sus titulares.
El partido de los jugones, ese fue el resumen de la final. El Arsenal, alineó un once muy ofensivo, con un doble pivote formado por Cazorla y Ramsey. Özil -que parece que por fin se le ve feliz e integrado- en la mediapunta. Walcott picando al espacio desde la izquierda y Wilshere dejando la banda para Bellerín. Giroud fijó a los centrales y descargó para la segunda línea.
Tres apuntes en forma de tres actuaciones muy destacadas: Petr Cech, Santi Cazorla y, como ha quedado recalcado antes, Mesut Özil. El checo debutó y dejó ya muestras del potencial que tiene. Está en el top-3 de porteros cuando juega regularmente, por el Emirates no había algo parecido desde hace más de diez años. El asturiano fue, para mí, el MVP del partido más allá del gol. Demostró que su final de liga del año pasado no fue casualidad. De mediocentro organizador, Cazorla es el líder del juego de este equipo. Lo mismo se puede decir de Mesut. Acabó muy bien el año pasado, y Wenger parece que le ha encontrado su posición, la mediapunta. Intervino mucho y se le vio muy bien.
Con estas dos victorias, el Arsenal se alzaba con el primer título de la temporada. Por supuesto, el valor de este título es el que es, un torneo veraniego. Pero no es destacable eso, sino el juego desplegado por los ingleses durante el torneo. Dejando de lado el primer partido, ante el combinado de jugadores de Singapur, los de Wenger demostraron todo su potencial ante el Everton. Con Ramsey, Wilshere, Cazorla y Özil en la media, los gunners movieron, pausaron y dejaron a los pupilos de Roberto Martínez sin el balón. Ciertamente, el Everton fue mucho menos de lo que será durante la temporada.
Arsenal - Lyon
Primer partido para el Arsenal en esta Emirates Cup ante una de las revelaciones de la pasada temporada: el Lyon de Fournier y Lacazette. Los ingleses venían de conseguir la Asia Trophy con bastante superioridad.
Comenzó el partido con un ritmo bastante bajo, lento y con un Olympique llevando el peso del partido. Pero la bestia estaba dormida, descansando y esperando el momento para atacar y despedazar a su rival. Tras un envío precioso de Özil, Giroud conectó un cabezazo marca de la casa para hacer el primero. Fue el inicio de una fiesta. A los tres minutos, una transición llevada a cabo por medio Arsenal, pasando por Giroud -que tuvo la pausa necesaria cuando el cuerpo le pedía otra cosa-, acabó con un disparo seco de Oxlade. La siguiente jugada, con un error en la salida de Gonalons, permitió al joven Iwobi en firmar su tanto. Cerró la primera mitad Ramsey cuando Özil, con una acción que solo puede hacer él, le cedió el gol al galés.
La segunda mitad siguió el mismo guion: un Lyon espeso en ataque y falto de ideas desde la media, donde no conseguía fabricar nada de peligro. Özil, el mejor, conectó una volea desde el pico del área a la que Anthony Lopes no pudo llegar. Fue Santi Cazorla, que entró en la segunda mitad, el que cerró la goleada. Lo hizo de una forma que pocos pueden: golpeando una falta con su pierna mala, la zurda.
El Arsenal conquistó el Emirates con una cómoda victoria ante el Lyon que una semana después se jugaba el primer título de la temporada, la Supercopa ante el PSG. Los de Wenger dejaron tres actuaciones destacadas sobre el resto: Özil, Iwobi y Giroud. El alemán, finísimo en la pretemporada, fue el mejor. El joven Iwobi tiene carrera en el Arsenal, pero todavía es pronto. Necesitará una cesión.
Arsenal - Wolfsburgo
Llegó el último partido de la pretemporada del Arsenal, el último antes de enfrentarse, el día 2 de agosto, al Chelsea en la Community Shield. Al ser el segundo partido en 24 horas, Wenger, de manera razonada, alineó, salvó Özil, un once completamente nuevo. Para esta cita, fue el juvenil Adelaine la principal novedad. Seguía el técnico francés en la línea de alinear un joven.
El primer tiempo, seguramente debido al cansancio y a que el Arsenal tenía prácticamente el título ganado, fue dominado por un buen Wolfsburgo. Los de Hecking llegaron a tener más el balón que los de Wenger, que no completaron unos buenos primeros 45 minutos. De la mano de un De Bruyne que se asoció con Schürrle, llegó buena parte del peligro de los alemanes. Özil, Cazorla, Walcott o Wilshere no aparecieron hasta la media hora de juego. Poco a poco, de la mano de Mesut, los ingleses comenzaron a triangular y a encontrar a Walcott. Acabó la primera parte con un Arsenal que se acercaba al gol pese a la inferioridad sobre el tapete.
La segunda parte tuvo un guion más igualado y más de trámite en cierto modo. Wenger repartió minutos y descanso, y fueron entrando al campo los Ramsey, Giroud, Oxlade o Akpom. El único tanto del partido lo hizo Walcott, tras una buena acción de un chico, Adelaine, que no demostró tener solo 17 años. En la jugada hay que destacar el movimiento del otro joven, Akpom, arrastrando a su marca. El partido murió ahí y no tuvo mucha más historia. El Arsenal no firmó la mejor actuación, pero cumplió el guion de ganar y llevarse su segundo título veraniego. Buena versión del Wolfsburgo, que dará que hablar en la Bundesliga y Champions League.
Arsenal - Chelsea
Primer título en juego para el Arsenal. En frente, el campeón de la última Premier League. El equipo de José Mourinho mantuvo una dictadura prácticamente desde el principio. Capitaneados por Ivanovic, Terry, Fábregas, Hazard y Costa, los londinenses ejercieron un gran juego desde agosto a diciembre. Su 2015 bajó, pero ya daba igual, la ventaja fue suficiente.
Wenger eligió la movilidad de Walcott para el puesto de '9', situó a Cazorla en la izquierda y dejó a Oxlade en la derecha. Su principal plan era buscar ventajas para que el inglés encarara en el uno contra uno. Lo hizo tres veces, de las cuales fabricó el único tanto del partido. En el Chelsea sorprendió la posición tan alejada de la creación de Fábregas y la de un Ramires que no debería de jugar mucho más en el doble pivote, ya que su puesto natural es la banda derecha. Los de Mourinho completaron una pobre primera mitad, incapaces de acercarse al arco defendido por un Cech que iba a tener su momento.
Como se esperaba de Mourinho y su Chelsea, este reaccionó. En la segunda mitad entraron Oscar y Falcao por Ramires y Rémy. Además, Cesc se colocó de mediocentro al lado de Matic y el Chelsea comenzó a fluir. Fueron los peores momentos del Arsenal. Pero el guion tenía un papel para un gigante con casco. Los blues encontraron la espalda de Ramsey-Coquelin, pero apareció el protagonista del partido junto a Oxlade: Petr Cech. Por fin el Arsenal encontró un portero que le va a dar puntos, partidos e inclusos títulos. Los gunners dieron entrada a Giroud, que entró en el momento idóneo, cuando su equipo más lo pedía. El francés tuvo dos o tres buenas ocasiones. Cazorla tuvo otra para dejar el 2-0 definitivo, pero ahí justificó Courtois el por qué Petr está ahora en el Emirates. Fue el Arsenal de Cech.
Llegó el primer título del Arsenal en la temporada y la primera victoria de Wenger ante Mourinho. Fue un partido en el que se vio otro Arsenal, un equipo que parece que ya sabe competir ante equipos grandes y momentos importantes. La impresión que dejaron los gunners es que están cimentando un proyecto ilusionante en el que los títulos están más cercanos que en los últimos tiempos.
Tras acabar una gran pretemporada con hasta tres títulos (Asia Trophy League, Emirates Cup y Community Shield), la Premier arranca. El Arsenal ha competido bien durante el verano, ha tenido la incorporación de un Petr Cech que ya brilla, Özil ha completado su primera pretemporada desde que llegó al equipo y se le nota, y han aparecido varios jóvenes ilusionantes como Iwobi, Akpom o Adelaine. A eso hay que sumarle que, por ahora, la plantilla se encuentra en perfectas condiciones, todos están disponibles y Wenger no ha tenido que lamentar ninguna lesión importante, algo que hay que destacar siendo éste uno de los principales talones de Aquiles de los ingleses en los últimos años.
Ahora comienza la competición que los londinenses están deseando y por la que parece que podrán aspirar seriamente después de varios años. Será la Premier la competición que evaluará si el Arsenal está preparado para competir. Allí espera un Chelsea campeón, un United que ha sido renovado en casi todas sus líneas y un City que, aunque ha tenido una pretemporada muy irregular, cuenta con Sergio Agüero o David Silva, sinónimos ambos de pelea. El futuro dirá.