El cuadro visitante entró con más fuerza en el juego, buscando la portería rival mediante su nueva incorporación, el suizo Xherdan Shaqiri. No obstante, el Norwich fue capaz de encontrar peligro en estos primeros minutos a través de una contra que acabó en nada ante una inferioridad numérica frente a la defensa del rival.

Pero, a pesar de ello, conforme pasaron los minutos el Norwich City se asentó mejor en el campo y empezó a dominar el encuentro. Pero esto no sirvió de nada, al menos por ahora. Un libre directo colgado al área de forma fenómenal por Shaqiri encontró la cabeza de Diouf en el área pequeña que solo tuvo que dirigir el disparo para atravesar la meta defendida por Ruddy.

El encuentro volvió a cambiar las tornas. Los canarios se aceleraron en la búsqueda del empate mientras el Stoke City buscaba dominar el partido con la pelota aunque apenas eran capaces de hilar tres pases seguidos sin buscar profundizar. Y, sin embargo, un buen pase en profundidad de Dorrans encontró a Redmond pero este no pudo superar la embestida horizontal de Butland.

Y las tornas volvieron a su sitio. El Norwich empezó a jugar con la pelota mientras el Stoke aprovechaba su ventaja para asentar perfectamente a su defensa y sus dos líneas de presión en campo propio cuando los locales poseen la pelota. Aunque generaron mucho más peligro con balones en profundidad que buscando el desmarque de ruptura o la circulación de balón, puesto que es lenta y descoordinada.

Shaqiri ya ha conseguido su primera asistencia. Fotografía: Stoke City.

Juego de ida y vuelta

Y el canario se la devolvió al potter. El saque de falta de Bassong hacia Redmond lo detuvo Butland y la defensa lo repelió pero un incesante devenir de cabezazos acabó en una espléndida ocasión para Martin de poner la pelota por debajo del arco que forman las piernas de Butland y anotar su segundo gol en esta Premier League. La constancia dio sus frutos.

A pesar de este control de la pelota, la defensa hacia aguas cada vez que Arnautovic buscaba desbordar o Van Ginkel buscaba el balón en profundidad nacía una ocasión. Shaqiri tuvo el placer de gozar de una en la que nada pudo hacer porque la defensa lo detuvo hasta en tres ocasiones, hasta que el balón se marchó lejos de la órbita de sus piernas. Pero su influencia no acababa ahí. Era el jugador más peligroso del conjunto potter, aunque carecía de apoyo hacia adelante pero le faltó saber dar la vuelta y volver a comenzar.

Y el balón parado volvía a ser esencial en el juego del Norwich. Una inexistente falta sobre Hoolahan a cinco metros del área dejaba un libre directo espectacular. Brady sería el encargado de golpear la pelota ante la mirada de Redmond, pero su disparo se marcharía cerca del palo izquierdo. Y con poco más, el partido se dirigió hacia los vestuarios con el punto y seguido del partido.

Martin fue el encargado del gol del empate. Fotografía: Norwich City.

Un vendaval verde y amarillo

El partido retornó como se fue con un jugador del Norwich City amonestado. Entonces fue Martin, esta vez fue Bassong. Una renta muy peligrosa para la pareja de centrales. Pero esta nota negativa devinó en otra positiva con el espectacular pase de Howson en profundidad ante Muniesa y Cameron, pero Jerome no supo como batir a Butland. Y enseguida llegó otra con el centro de Brady que Hoolahan no dirigió correctamente a la meta visitante.

Dorrans también la tuvo al llevarse el balón que se disputaban Pieters y Redmond con un disparo raso, fuerte y seco que desvió ligeramente Butland para que se marchase a córner. La defensa potter apenas daba a basto para frenar las acometidas de Whittaker, Jerome y compañía. Aunque llegó calma con una contra que Glen Johnson en el área no se atrevió a definir hasta que perdió el balón.

Mark Hughes buscaba más el control y la posesión de la pelota. Para ello, sacó del campo a Afellay, que apenas intervinó, y dio entrada a Ireland, el héroe de la pasada jornada. También retiró a Arnautovic que había realizado un buen partido para dar entrada a Joselu, alguien con quien conectar mejor con Diouf. Aunque siguió llegando peligro. En un forcejeo tras un córner, Redmond se llevó la pelota pero una magistral parada de Butland acabó el peligro.

El partido fue una dura pugna. Fotografía: Norwich City.

El partido se rompió. Los dos equipos se basaron en la falta de apoyo de los jugadores más adelantados conforme el calor hacía estragos. El Stoke City tuvo una doble ocasión entre Shaqiri, Ireland y Diouf. El último intento una chilena pero Ruddy se le adelantó mientras que el segundo le golpeó de volea pero el balón se marchó muy por encima de la meta del portero inglés.

Pero los errores empezaron a aparecer más que nunca. El Norwich City vislumbró su primer fuera de juego mientras el Stoke City gozó de una gran oportunidad de falta directa pero la falta de puntería de Charlie Adam destrozó una gran jugada a balón parado que hubiese llegado solo a Ireland. No obstante, el equipo que más llevaba el balón hacia el campo contrario seguía siendo el verde-amarillo.

Butland se convirtió en el ángel de la guardia de su equipo. Ya tuviese que ir por bajo a un lado, por alto a por otro lado o dejarse el físico para sacar un balón a bocajarro. Los locales no sabían como batir al internacional inglés. En cambio, los visitantes no sabían como frenar tanta ocasión de peligro ni como llegar a la meta contraria. Y, con una última ocasión de saque de esquina, se llegó al final del partido donde el conjunto visitante pudo ser goleado pero se marchó con una empate.