Un gol de Bakary Sako en el minuto 87 de partido le dio los tres puntos al Crystal Palace, en un partido que parecía que tanto el equipo local como el Aston Villa estaban destinados al empate. El resultado no hace justicia a tenor de lo visto en el terreno de juego, pero lo que sí parece claro es que el Aston Villa va a sufrir mucho esta temporada. Mucho tienen que mejorar los de Tim Sherwood, especialmente en el aspecto ofensivo.

Mucha mejora en cuanto juego, pero poco en cuanto a goles

El Aston Villa demostró haber dado un paso adelante respecto a las jornadas precedentes, sobre todo en la organización del equipo y en la determinación, la actitud. Los villanos salieron más motivados que nunca, sabiendo que una derrota sentaría las bases de la primera gran crisis del año en agosto. Sin embargo, de poco sirvieron las ganas porque, a pesar de intentar una y otra vez dar la cara, la superioridad futbolística de los locales era evidente, con un Cabaye que era amo y señor del centro del campo.

El equipo entrenado por Tim Sherwood dominó completamente la primera mitad del partido, dejando al Crystal Palace seco en cuanto a oportunidades de gol se refiere. El portero villano Brad Guzan apenas tuvo trabajo durante los primeros 45 minutos de encuentro.

En el minuto doce de partido, Rudy Gestede tuvo la primera ocasión importante en el partido. El delantero francés fue sin duda junto a Carlos Sánchez de lo mejor del Aston Villa durante la primera mitad. Fue un incordio para los defensas del Crystal Palace, que veían como cada vez que tocaba un balón era signo de peligro importante para la portería.

Carlos Sánchez que volvía a un once titular, tras ser suplentes en los partidos ante el AFC Bournemouth y Manchester United, realizó una gran labor en el centro del campo. En el minuto 25 de partido, el mediocentro colombiano tuvo una gran ocasión, tras robarle el balón a Jason Puncheon y disparar desde la frontal del área. El balón se marchó muy cerca del guardameta del Palace.

El equipo entrenado por Alan Pardew se ponía nervioso, veía que su conjunto apenas creaba peligro, y el centro del campo lo perdía a medida que pasaba los minutos. Idrisaa Gana a punto estuvo de marcar en el minuto 37 de partido, pero su disparo fue detenido por McCarthy, que estaba parando todos los disparos del Aston Villa.

Con el descanso ya cerca, Jack Grealish estuvo cerca de abrir su cuenta personal, pero una vez más se encontró con una gran mano de McCarthy, en un fuerte disparo seco y raso muy cerca del palo.

Segunda parte llena de goles

Respaldado por una multitud ruidosa en el Selhurst Park, el Crystal Palace comenzó con otra cara la segunda mitad. La introducción de Dwight Gayle y Jordan Mutch por Wilfried Zaha y Glenn Murray tuvo el efecto deseado, con la mejora de los locales y Sako pronto desperdiciar una oportunidad de bordes dorados para darle a su equipo la ventaja.

A los 65 minutos de encuentro, Sako volvió a tener el gol en sus botas. Esta vez Joel Ward iba a realizar una gran jugada desde la banda derecha, dejando a Bacuna atrás en velocidad, su centro fue para el delantero del Crystal Palace que disparó de primeras en el primer palo marchándose la pelota cerca de la portería de Guzan.

Luego vino un momento de controversia. James McArthur apareció para ver como Gayle anotaba el segundo gol para su equipo, pero no había duda de que estaba fuera de juego, incluso al principio el árbitro asistente, Peter Kirkup, no levantó su bandera y el gol era válido, sólo para posteriormente ser anulado. Indignado por la injusticia percibida, el Crystal Palace se fue al ataque y Sako debería haber hecho las paces por su fallo en la jugada anterior, pero estrelló su disparo al travesaño después de una buena jugada de McArthur.

No tardaron mucho en ponerse por delante en el marcador, y es que Scott Dann cabeceó a la perfección un saque de esquina sacado por Jason Puncheon.

El Aston Villa estaba obligado a reaccionar, y Tim Sherwood iba a sacar a Adama Traore, el reciente fichaje del Aston Villa. Tardó ocho minutos en darle a los villanos el empate en el marcador, tras una gran jugada por la banda, cuyo centro fue rematado por Pape Souare en propia portería.

Parecía que el partido estaba destinado al empate, por la gran igualdad que hubo durante el partido, pero un error de Amavi en el lateral izquierdo fue aprovechado por Sako para dar el gol de la victoria a su equipo, con un gran disparo con su pierna izquierda que se coló en la portería de Guzan.

Con esta victoria, el Crystal Palace suma su segunda victoria en tres partidos y lo hace situarse en puestos altos de la tabla clasificatoria. El Aston Villa por su parte suma su segunda derrota tras la sufrida la semana pasada ante el Manchester United, pero su imagen está siendo muy buena en lo que va de temporada.

Jed Leicester / BPI