Otro partido complicado para el Stoke City. Al comienzo parecieron tomar el control del partido con un gran gol de Diouf a saque de falta de la nueva incorporación, Shaqiri. Pero el empate del Norwich City cambió la deriva del partido hacia una superioridad de ocasiones del equipo local pero la figura de Jack Butland impidió más goles. El conjunto potter fue incapaz de lidiar con las constantes llegadas de Dorrans, Jerome, Howson, Redmond o Hoolahan, aunque también tuvieron sus oportunidades en la segunda mitad.

Mark Hughes afirmó que las condiciones meteorológicas tuvieron algo que ver con el rendimiento de su conjunto, sobre todo en el final del partido. No obstante, este cree que jugaron bien en la primera mitad: "Controlamos el partido y fuimos capaces de hacer mucho daño". Añadió que les dejaron muy pocas oportunidades de marcar gol pero no supieron aprovechar las que tuvieron.

El problema para el técnico inglés llegó con el gol: "No supimos lidiar con el rebote y tuvimos un disparo a puerta, así que el empate en la primera mitad fue probablemente injusto para nosotros". El equipo fue el dominador de la posesión en el partido, pero no supieron aprovecharla para crear peligros en la última zona del campo, pero "las condiciones meteorológicas afectaron a los dos equipos".

Hughes se mostró muy agradecido a Jack Butland por el gran número de paradas que realizó: "Realmente jugó con un dedo rotó que se fracturó en un entrenamiento". Esto le ocasionó una pérdida de movilidad pero su determinación fue clave para colocarlo en el césped. Según éste, es una "prueba real de su carácter", pero el problema es que soportará ese dolor un par de semanas. "Hizó paradas espectaculares, así que imaginad lo bueno que será cuando no tenga ningún dedo roto", finalizó con sorna Mark Hughes.

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Sobre el autor
Pedro M. Peralta
Periodismo. Gran aficionado al deporte de motor y al fútbol.