El Tottenham consiguió puntuar con los tres puntos por primera vez en esta edición de la Premier League. Hasta día de hoy, había conseguido cosechar solo tres empates y una derrota. El equipo de Pochettino, poco o nada tiene que ver con el de la campaña pasada. Durante las jornadas anteriores, desperdiciaron oportunidades claras para volver a casa con un resultado a favor, dejaron escapar muchos puntos. Parte del problema, reside en la punta de lanza del equipo, que no consigue ver puerta de manera eficaz.

El Sunderland tampoco corre la misma suerte. Desde el año 2011, el equipo ha ido descendiendo progresivamente en la clasificación general y es hoy un claro favorito para ocupar los puestos de descenso que en el mes de mayo, enviarán a tres equipos a la segunda división. A pesar de haber conseguido el galón de equipo 'mitico' de la Premier League, la llama de los 'black cats' comienza a apagarse.

Dado el amplio apartado de lesiones que possen los dos equipos, era el turno de los nuevos fichajes. Su oportunidad. La joven pomesa surcoreana de 23 años Son Heung-min intentó cumplir el rol que normalmente pertenece a Dembelé dentro del equipo. Y por parte de los locales, Fabio Borini, un viejo conocido de la Premier League, que debutó en 2009 con el Chelsea y ha ido rotando por equipos de primera categoría como Liverpool, Roma o Swansea.

Las ideas no tan claras

Durante la primera mitad, el encuentro fue digno de dos equipos con problemas. Muy tímidos en ataque, que es donde residen sus principales problemas. La ocasión más clara llegó por parte de los locales en el minuto 25 por obra y gracia de Defoe, que envió un balón al poste tras aprovechar un pase maestro de Lens y ganar la posición a los centrales gracias a su punta de velocidad.

Tímida. Muy tímida primera mitad de ambos conjuntos. Ambos con muchas ocasiones, pero pocas eran claras. Mejor el equipo de Dick Advocaat. Los londinenses no terminaban de encontrarse cómodos en el terreno de juego. 

Ambos equipos no consiguieron sentirse comodos durante la primera parte

Durante la segunda mitad, se atisvó por primera vez en todo el encuentro, cuales eran y son las ideas que Mauricio Pochettino tiene para este Tottenham. Algo parecido a lo que ya conocemos de su etapa en el Southampton y por su puesto de la campaña pasada. Comenzaron a jugar mejor, que, honestamente,  vista la primera parte, no es difícil. Corrijo, comenzaron a jugar mejor que el Sunderland, que ya había gastado gran parte de sus fuerzas, lo que terminaría por causar continuos errores y finalmente decantaría la balanza en favor de los de White Hart Line. 

Con el paso de los minutos, el centro del campo 'spur', tomó los mandos del partido, la pelota era suya. Es lo que Pochettino quiere. Comenzaron a originarse jugadas y combinaciones que tarde o temprano crearían algún contratiempo en la defensa local. Con esto, no queremos decir que el Tottenham haya jugado bien, si no que ha jugado mejor. Harry Kane, que anotó 31 goles la pasada campaña, aún no ha visto puerta y esto el equipo lo nota. Fue uno de los grandes desaparecidos del encuentro.

Con un Sunderland mermado por el cansancio y en el minuto 82, llegó el tanto de la victoria. Mason, el encargado de dar los 3 puntos a los de Londres, finalizó una gran jugada tras convinar con Kane y Lamela (que había sustituido a Alli en el 72), dejando al Stadium of Light sin esperanza. Los 'black cats' no podían remontar, sus piernas lo impedían. 

Finaliza por tanto el encuentro y los tres puntos cogen rumbo Londres. El Tottenham tiene mucho que mejorar. Harry Kane marcará, la incógnita es cuando. Esta semana próxima les toca debutar en la Europa League. No es el mejor momento. El equipo no está bien y añadir una competición más a la lista de tareas puede convertirse en un agravante. A pesar de todo, los tres puntos ya son suyos, un nuevo camino comienza para ellos, el objetivo es claro. Hay que estar arriba. El próximo obstaculo en liga es el Crystal Palace, uno de los equipos más en forma de toda la competición y donde seguro deberán dar su mejor version para conseguir sumar puntos de nuevo.