El Chelsea venció por 4-0 al Maccabi de Tel Aviv en la primera jornada de la UEFA Champions League. Los goles de Willian, Óscar, Diego Costa y Cesc Fábregas valieron para que el conjunto dirigido por José Mourinho se estrenara en la máxima competición continental con victoria, y sobre todo con un gran juego.

Dominio blue de principio a fin

El Chelsea demostró haber dado un paso adelante respecto a las jornadas precedentes, sobre todo en la organización del equipo y en la determinación y en la actitud. El conjunto londinense salió más motivado que nunca, sabiendo que una derrota sentaría las bases de la primera gran crisis del año en septiembre, y es que el equipo dirigido por Mourinho solo ha conseguido una victoria, la conseguida ante el West Bromwich en la tercera jornada de liga. Sin embargo, en la primera jornada de la fase de grupos de la Champions, apareció la mejor cara del Chelsea. La superioridad futbolística de los locales era evidente, ante un Maccabi que apenas inquietó la portería defendida por Begovic.

Tras la contundente derrota (3-1) encajada el pasado fin de semana en el campo del Everton, el técnico del Chelsea no dudó en revolucionar el once inicial, que presentó hasta seis novedades con relación al equipo que cayó en Goodison Park.

Comenzó en modo apisonadora el conjunto blue, que en el minuto cinco de partido dispuso de una ocasión única de ponerse por delante en el marcador, y es que Eden Hazard iba a fallar un penalti que mandó directamente a las nubes. Llegaban los fantasmas a Stanford Bridge, viendo la poca puntería que tenía el equipo en estos últimos partidos.

Diez minutos más tarde, concretamente en el 15, Willian iba a poner por delante al Chelsea con una gran falta lanzada y en la que el guardameta israelí podía haber hecho algo más.

Una sobresaliente actuación que se vio frenada de golpe por una inoportuna lesión, que obligó a William a abandonar el terreno de juego a los 23 minutos, sustituido por el hispanobrasileño Diego Costa, que tomó el relevo de William como máximo protagonista del encuentro.

Cuando parecía que el partido se iba a ir al descanso con el gol de Willian, una gran internada de Diego Costa iba a ser sancionada por el colegiado como nuevo penalti. Esta vez fue Oscar el encargado de lanzarlo, y no lo desaprovechó y colocó el 2-0 en el descuento.

Protagonismo hispano en la segunda mitad

Respaldado por una multitud ruidosa que se había desplazado a Stanford Bridge para animar a su equipo, el Maccabi Tel Aviv comenzó con otra cara la segunda mitad. La introducción de Radonjic en lugar de Rikan tuvo el efecto deseado, con la mejora de los visitantes. En la segunda mitad el equipo israelí tuvo numerosas ocasiones para recortar distancias en el marcador, pero la puntería en el día de hoy estaba totalmente perdida.

Diego Costa anota uno de los goles de la jornada

Un marcador que el propio Diego Costa se encargó de ampliar para los londinenses (3-0) a los 58 minutos, tras resolver con una espectacular volea en el interior del área israelí un medido pase de su compatriota Cesc Fàbregas. Sin duda uno de los goles de la jornada.

El conjunto londinense volvía a tener esa puntería que tenía perdida en estos últimos meses. El centrocampista internacional español, Cesc Fábregas, fue precisamente el encargado de cerrar la cuenta local, al firmar a los 78 minutos el definitivo 4-0, tras aprovechar un rechace del meta visitante Rajkovic a un disparo del francés Loic Remy.

Con esta victoria el Chelsea se ubica en la primera plaza de la tabla, justo por delante de Oporto y Dynamo de Kiev que empataron 2-2 en su partido. El Maccabi de Tel Aviv cierra la clasificación con cero puntos.

Foto: Kirsty Wigglesworth (AP)