Ninguna victoria. Ese es el hecho que quiere cambiar Mark Hughes frente al equipo revelación de la temporada comandado por Claudio Ranieri. El Stoke City se encuentra en la zona de descenso en la tabla con tan solo dos puntos, empatado con el Sunderland y Newcastle United.

“No existe aprensión ninguna por el inicio de temporada”, comenzó Hughes su explicación. Su equipo está todavía en construcción para lo que resta de temporada. Y por ello, no obstante, siguen confiando en su “increíble competitividad” y que conseguirán los puntos que quieren. El galés repitió que no está preocupado por el juego de su equipo: “Si hay algo simplemente es frustración por dispararnos en el pie en un par de ocasiones”.

Mark Hughes no desperdició la oportunidad de reseñar el gran inicio de temporada de los foxes. Pero no se quedó ahí. También quiso ahondar en los problemas que tuvieron la temporada pasada tras un inicio parecido y la gran recuperación que hicieron cuando todos le daban por un equipo, de nuevo, de Championship.

El técnico se mostró bastante tosco para reconocer que a nadie le “regalan” la posición pero que eso no “significa que sea un reflejo justo de cómo puede terminar la tabla de clasificación a final de temporada”. Se sabe de sobra, también, que el equipo ha tenido encuentros contra equipos duros como Liverpool, Arsenal o Tottenham Hotspur. “El único que nos afectó realmente fue el partido contra el West Brom”.

Además, añadió, que siempre controlaron el partido y habrían ganado el partido si hubiesen mantenido los once hombres sobre el terreno de juego. “¡Deberíamos haber hecho eso! La clasificación tendría un aspecto diferente”, agregó. Sin embargo, el objetivo queda ahora en mirar hacia el partido de este sábado en el Britannia Stadium. “Esperamos tener un buen rendimiento y conseguir los tres puntos”, finalizó Mark Hughes