Sin duda, uno de los partidos de la jornada era el que enfrentaba este sábado a las 16:00 al sexto clasificado contra el noveno en el mítico estadio Boleyn Ground de Londres, todo un West Ham - Everton.

Primera parte entretenida pero con todo por decidir

Gran ambiente en el Boleyn Ground mientras sonaba el himno del West Ham y volaban las típicas pompas de jabón en el este estadio. Tanto Bilic como Martínez alineaban a sus onces de gala (salvo Carroll por Sakho y Galloway por Baines, respectivamente).

El ritmo del partido al comenzar fue alto, pues a los tres minutos el West Ham ya dispuso de una ocasión de Moses con un disparo al lateral de la red. Al minuto cinco, Koné puso un centro que a punto estuvo de suponer un susto cuando ni Lukaku ni Adrián llegaron a tocar el balón. A partir de aquí, el ritmo del partido se hizo más lento mientras ambos equipos trataban de tener largas posesiones de balón. Hasta el minuto 15 no se vio ningún disparo a puerta cuando Barkley disparó a las manos de Adrián tras un buen giro. A partir de entonces, se fue marcando un ligero dominio hammer que fue a más, mientras que el Everton perdía presencia en el partido. El West Ham dio el aviso con un tiro de Cresswell desde la frontal que pasó cerca del poste derecho de la meta defendida por Howard.

Entonces, a la media hora del pitido inicial, el West Ham sacó una contra tras un córner del Everton que forzó un activo Deulofeu. Moses llevaba el balón por la banda derecha, recortó hacia adentro y chutó. El balón golpeó en el brazo extendido de McCarthy y en medio de la confusión por el posible penalti y el rechace, un atento Lanzini se hacía con el balón en la frontal y superaba a Howard con un magistral toque de interior con efecto que entró suavemente por la escuadra de la portería visitante.

Lanzini celebra el gol que abría el marcador. Foto: West Ham United.

El gol no sentó nada bien al Everton, que se salió algo del partido mientras el West Ham se hacía con el dominio del cuero. En el minuto 33, McCarthy realizó una escalofriante entrada con ambas piernas sobre Payet, que estaba bastante participativo, pero el árbitro decidió que la entrada solo merecía amarilla. A partir de entonces, el francés quedó mermado y lo mismo le sucedió al juego del West Ham, que fue cediendo espacio al Everton. Los toffees fueron acercándose cada vez más a la meta local sin demasiado peligro, hasta que en el 43 Deulofeu le puso un pase al hueco medido a Lukaku para que el belga regatease a Adrián y marcase a placer el 1-1. La defensa local pedía posición antirreglamentaria, pero la repetición mostró que el '10' del Everton estaba justo en línea con la zaga hammer. Gol psicológico del Everton al empatar antes del descanso, y séptimo de Lukaku en los últimos siete enfrentamientos entre West Ham y Everton.

Lukaku celebra su gol. Foto: Premier League.

Segunda mitad con poco fútbol y ocasiones

Tras el descanso, en el que ni Roberto Martínez ni Slaven Bilic hicieron cambios, el partido siguió su lento ritmo con pocas ocasiones debido a que ambas defensas se mostraban muy firmes. Pasados cinco minutos del ecuador, Bilic se vio obligado a retirar al renqueante Payet para dar entrada a Enner Valencia que volvía tras su larga lesión. La gran mayoría de la siguiente media hora transcurrió con más peligro del West Ham, gracias al siempre eléctrico Lanzini y un luchador Moses, sin embargo apenas gozó de un simple tiro a puerta claro. Durante ese periodo, Coleman evitó una internada de Valencia en el área, pero al quitarle el balón al ecuatoriano éste sufrió una torcedura en el tobillo, y tras varios intentos de seguir, tuvo que abandonar el terreno de juego por Zárate después de 19 minutos en el campo. Por su parte, el Everton dio entrada a Mirallas por Koné.

Valencia fue retirado en camilla. Foto: Reuters.

Los últimos diez minutos fueron más de ida y vuelta, pues ambos equipos trataban de buscar un gol que pudiese darles los tres puntos, pero a la vez tenían el miedo de irse con las manos vacías si encajaban. Lennon por Deulofeu y Jelavic por Carroll fueron los revulsivos que ambos mánagers introdujeron para ganar, pero salvo una ocasión de Lukaku en la que tocó de puntera un centro de Galloway y un par de intentos lejanos de Zárate, ninguno de los dos equipos estuvo cerca de marcar. Merecido reparto de puntos en Boleyn Gorund.

MVP del partido: Manuel Lanzini

Con un gol espectacular, el argentino no paró de luchar y buscar el desborde. Lanzini fue el jugador local que puso en más aprietos a la sólida zaga del Everton.