“La pelota no se mancha”, dijo alguna vez Diego Armando Maradona. La frase del legendario argentino quedó tan grabada en la historia como “la mano de Dios” o el “gol del siglo”; no obstante, la noche del viernes 13 de noviembre pasado, la sombra de los ataques terroristas que sacudieron a “La Ciudad Luz” llegó hasta el Stade de France y estuvo a nada de convertir la casa del “juego maravilloso” (para citar a otro sudamericano) en una sucursal del infierno.
Al mismo tiempo que Inglaterra caía ante España en Alicante, Francia hacía los honores al combinado alemán campeón del mundo en la catedral del fútbol galo. En un buen partido, los locales derrotarían a los monarcas del orbe con un contundente 2-0 pero, a la luz de los acontecimientos que se desarrollaban en los alrededores del estadio, lo que menos se recordará de ese partido será el marcador.
Mientras bleus y teutones se enfrentaban, se escucharon tres explosiones cerca del estadio, una de ellas en una de las puertas del estadio que causó la muerte a una persona. El juego continuó como si nada por órdenes del presidente francés y, cuando finalizó el juego, el sonido local pidió a los aficionados que no dejaran el coloso de St. Dennis. Fue entonces que seguidores y futbolistas entendieron que algo andaba mal.
Pasaron horas antes de que los hinchas, entonando “La Marsellesa”, fueran desalojados; mientras que ambas selecciones pasaron la noche en el estadio, los alemanes por temor a algún ataque (una amenaza de bomba los obligó a salir de su hotel antes de lo planeado previo al partido) y los franceses en una muestra de solidaridad hacia sus invitados.
Seguir después del horror
Cuando lo peor de los atentados, que dejaron más de 120 muertos, había pasado, circuló información de que el próximo partido de los galos, contra Inglaterra en Wembley, sería suspendido. Pero, un día después, ambas federaciones confirmaron que no sería así; que el show, como la vida, debía continuar.
Greg Dyke, presidente de la FA, declaró: “En nombre de la FA, quiero expresar nuestro pesar y enviar nuestro más sentido pésame a la familia y amigos de aquellos que han perdido la vida. Después de consultar con la Federación Francesa de Fútbol y el gobierno británico, hemos decidido juntos que el partido entre los dos países en Wembley el martes por la noche debe seguir adelante. Vamos a aprovechar la oportunidad para rendir homenaje a todos los afectados y también para expresar nuestra solidaridad con el pueblo de Francia”.
Posteriormente su homónimo francés, Nöel Le Graet, confirmó en la página de internet de la FFF que el choque se llevará a cabo según lo planeado, a pesar de que esta resolución habría causado malestar entre algunos de los hombres convocados por Didier Deschamps, cabe mencionar que una prima de Lass Diarra falleció en los ataques y que la hermana de Antoine Griezmann estuvo entre los rehenes de la sala de conciertos Bataclan, aunque afortunadamente resultó ilesa. Habrá que ver cómo afrontan ambos conjuntos un juego cargado de tantas emociones y tanta tensión.
¿Espejismo o realidad?
Con el juego confirmado, Roy Hodgson y Didier Deschamps intentarán sacarle algún provecho a un compromiso que más bien luce desangelado. Será importante, sobre todo, para el cuadro anfitrión luego de la derrota del viernes ante los campeones defensores de Europa.
(Foto: EFE)
Tras la temprana eliminación en la Copa del Mundo de Brasil, el equipo de la Rosa sorprendió al calificar a la Euro del año próximo “caminando”. Los británicos conquistaron la primera plaza del grupo E con 30 puntos, producto de una campaña en la que terminaron invictos con diez partidos ganados por cero empates y/o derrotas. Además registraron una impresionante diferencia de goles: +28, gracias a 31 goles anotados y sólo tres encajados.
Los aficionados ingleses, una vez más, podían soñar con que su selección volvería a los primeros planos de un torneo mayor internacional. El optimismo regresó al campamento de los Tres Leones… hasta que se toparon con España.
Inglaterra deberá dar un golpe de autoridad en su propio feudo para demostrarle a sus seguidores que lo logrado en la eliminatoria no fue producto de una casualidad y que, ahora más que nunca, pueden esperar grandes cosas de su selección en el Europeo de Francia 2016.
El sueño de “Les Bleus” sigue intacto
Luego de que la federación francesa dejara claro que la organización de la Euro 2016 por parte de los galos no está en riesgo. Los seleccionados de Deschamps pueden seguir soñando con levantar la máxima presea europea a nivel de selecciones en casa, pero para lograrlo es necesario una preparación de primer nivel, especialmente al considerar que el conjunto “bleu”, como anfitrión, no disputa eliminatorias, y por lo tanto, no tiene juegos competitivos desde el Mundial.
Francia se ha preparado principalmente con juegos amistosos ante equipos del grupo I de la eliminatoria, el único con sólo cinco selecciones. Los galos suman cinco victorias consecutivas, su última derrota data del 13 de junio de este año, cuando cayeron como visitantes ante Albania por la mínima diferencia.
(Foto: EFE)
A partir de entonces, vencieron fuera de casa a Portugal (0-1), en suelo galo a Serbia (2-1) y Armenia (4-0), a Dinamarca como visitantes (1-2) y a la actual campeona del mundo, Alemania (2-0) el ya tristemente célebre viernes 13 pasado.
Los anfitriones de la Euro 2016 cerrarán su preparación contra Holanda y Rusia, e intentarán aprovechar cada partido al máximo. Incluso el de este martes, en el que buscarán darle una alegría a un país víctima del miedo.
La guerra de los 92 años
Británicos y galos se vieron las caras por primera vez un 10 de mayo de 1923. En aquella ocasión, los ejércitos de Su Majestad derrotaron a los defensores de la República por un abultado 1-4 en territorio galo. Desde entonces, su rivalidad, aunque larga y encarnizada, los ha visto enfrentarse en apenas 29 oportunidades, la mayoría partidos amistosos.
Los de la isla del fútbol llevan mano, pues acumulan 16 victorias, por cinco empates y ocho derrotas. En Eurocopas la tendencia cambia, pues los ingleses nunca han ganado en el máximo escenario continental, se han registrado dos empates y un triunfo francés.
En Copas del Mundo, por otra parte, los ingleses reclaman la supremacía al haber obtenido los tres puntos en las únicas dos veces que chocaron.
Desde las trincheras
La escuadra inglesa sufrió algunas modificaciones para el choque del martes respecto de la que cayó en Alicante. Michael Carrick y Fabian Delph sufrieron lesiones en la derrota del viernes, por lo que Roy Hodgson se vio obligado a reemplazarles con los llamados de Jesse Lingard y Ryan Mason.
Además, el estratega británico reveló que seis jugadores menores de 22 años verán acción como titulares en el duelo ante Francia; Dele Alli, Eric Dier y John Stones parecen llevar la delantera para alinear este martes.
En las filas rivales, Didier Deschamps deberá percibir qué jugadores serán capaces de actuar al 100% tras la perturbadora noche que vivieron en el Stade de France. Lass Diarra hizo el viaje con el resto del equipo, pero se desconoce si participará en el partido luego de que una prima suya perdiera la vida el viernes.
Algunos medios reportaron que había descontento entre los jugadores franceses por la decisión que tomó su federación de jugar ante Inglaterra, por lo que el timonel galo podría realizar algunos cambios al once que derrotó a Alemania.
Posibles alineaciones Inglaterra - Francia
