La Copa de la Liga. Trofeo que, debido a la pronta finalización del mismo en el calendario, muchos equipos importantes de la Premier se toman a cachondeo en las primeras rondas en las que participan y acaban sorprendidos por rivales, a priori, asequibles. Le ha pasado al Manchester, que perdió con el Middlesbrough en la tanda de penaltis en octavos; le ha pasado al Arsenal, que sucumbió goleado ante el Sheffield Wednesday de la Championship, y ha estado a punto de pasarle al Liverpool.

Los de Merseyside se vieron las caras en la tercera ronda con el Carlisle United, de cuarta división. Tras los minutos reglamentarios, se llegó a la tanda de penaltis y Anfield (no tan lleno como en los partidos de la Premier) contuvo la respiración. Pero en la lotería de los once metros, tres atajadas del joven Adam Bogdan salvaron a los reds de una eliminación bochornosa en casa. Dos meses después de aquel frenético partido, el Liverpool sigue en la competición, jugándose un puesto en semifinales con el Southampton, equipo que querrá aprovechar esta competición para alejar los fantasmas de inconsistencia que muestra en liga.

Buenas sensaciones pese a los resultados en liga

El equipo de Ronald Koeman está luchando contra viento y marea para encontrar una buena racha de resultados que consiga sacarles de la zona baja de la tabla en la Premier. Parece que tras un inicio desastroso, los resultados van llegando. A cuentagotas, pero llegando. Dos victorias, dos empates y dos derrotas es la marca de los saints en sus últimos seis partidos oficiales. Sin embargo en la Copa de la Liga, la cosa cambia radicalmente.

En la primera ronda a la que accedieron al torneo, la tercera, golearon por 6-0 al MK Dons de la Championship, equipo que la temporada pasada infligió al Manchester United una de sus derrotas más dolorosas en los últimos tiempos al ganarles por 4-0. Posteriormente, en octavos, se vieron las caras con el Aston Villa, al que doblegaron agónicamente por dos goles a uno. Ahora, ya en cuartos de final se enfrentan a un grande de la competición, ansioso por ofrecer títulos a su afición.

El último partido del Southampton fue el que perdió contra el Manchester City en la Premier League. Las críticas por parte de afición y entendidos se sucedieron hacia Ronald Koeman por descartar del once inicial al lateral portugués Cédric Soares. Su sustituto Maya Yoshida, tuvo una noche muy desacertada en el Etihad Stadium de Manchester. El holandés decidió apostar por la solidez del japonés antes que por el dinamismo del exlateral del Sporting de Portugal. Pero la jugada le salió mal.

Gran parte del éxito de los saints desde que Koeman asumió la labor de dirigirlos se cimenta en la hermética defensa que ha construido con el paso de los partidos. Este encuentro será una buena oportunidad para comprobar si el preparador tulipán tiene pensado seguir haciendo experimentos con lo que ya funciona.

El Liverpool, en línea ascendente

Por su parte, en el Liverpool las cosas andan más calmadas. Desde que Jürgen Klopp fue nombrado entrenador del equipo de Merseyside, el equipo no ha hecho más que aumentar su rendimiento conforme van pasando los partidos. Este torneo representa para el entrenador alemán la oportunidad de empezar con el pie derecho la primera temporada al frente de los reds, más aún cuando equipos como Chelsea, Arsenal o Manchester United están ya noqueados de la competición.

Tres victorias consecutivas entre Premier y Europa League permiten ver las cosas desde otro modo en Liverpool. Además, las estrellas del equipo se están reincorporando al día a día de entrenamientos y partidos. Daniel Sturridge y Jordan Henderson regresaron al terreno de juego en la victoria contra el Swansea, ambos desde el banquillo, lo que podría allanar el camino para que fueran titulares en esta competición. Coutinho, por su parte, no jugó el último partido por una lesión muscular, pero Klopp ha dicho que tiene confianza en que el brasileño podrá disputar unos minutos.

A su vez, cabe destacar la vuelta de Gerrard a su equipo de siempre. O al menos, en los entrenamientos del equipo. Tras el parón de la Major League Soccer americana, el eterno capitán ha decidido que no hay mejor sitio que Melwood para seguir manteniendo la forma durante el invierno. “He hablado con Steven, ha sido cuestión de una llamada y unos pocos mensajes”, comentaba Klopp sobre la gestión para el retorno de Stevie a los entrenamientos del Liverpool. El alemán remató su maratón de elogios hacia el inglés: “Las puertas van a estar siempre abiertas para él, hasta yo podré aprender de él durante el tiempo que esté con nosotros”.

Árbitro y antecedentes

El árbitro del partido es Robert Madley. El colegiado, de tan solo 30 de edad, puede presumir de estar desde los 27 en la máxima categoría del fútbol inglés, la Premier League. Y desde 2012 actúa como árbitro FIFA en encuentros internacionales, eso sí, todavía no como primer árbitro, de momento se encarga de enseñar el cartelón luminoso.

77 partidos han jugado Southampton y Liverpool desde la primera vez que se vieron las caras en 1966, de los cuales 20 han sido victorias para los santos y 38 para los rojos. Este año 2015, los equipos se han enfrentado en un par de ocasiones, llevándose los tres puntos el Liverpool de Southampton en febrero y empatando en Anfield hace poco más de un mes en la Premier. En aquel partido, los visitantes empataron el encuentro a falta de cinco minutos para el final por medio Sadio Mané, cuya torpeza minutos después (se expulsó con doble tarjeta amarilla en dos minutos) no logró ensombrecer el valioso punto que el Southampton consiguió en el último suspiro.

Dos equipos en rachas distintas se miden en el partido de la jornada para dilucidar el cuarto semifinalista de la Copa de la Liga. Los dos ven en esta competición una oportunidad de oro para recordar esta temporada durante años, pero solo uno saldrá del estadio de Santa María con ese esperanzador billete hacia la penúltima estación del trayecto.

Posibles alineaciones

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