Nueva victoria del conjunto dirigido por Claudio Ranieri frente a uno de los únicos dos equipos que ha logrado batirles, el Liverpool. Dos goles del delantero internacional británico, Jamie Vardy, acabaron con las esperanzas reds de poder sumar algún punto que les acercase un poco más al objetivo europeo de Klopp.
Tras una primera mitad abierta, con ataques de un lado y de otro, la segunda mitad parecía sonreírle más al cuadro visitante. Durante los primeros compases, el Liverpool amenazó bastante el área defendida por Schmeichel mientras que los foxes trataban de aprovecharse de una de sus mejores armas ofensivas, el contragolpe.
Precisamente aprovechando una buena jugada a la contra llegaría el primer gol de la noche, obra de Vardy. Tremenda media volea del inglés para destrozar la meta de Mignolet y abrir el marcador.
Minutos después Okazaki es derribado dentro del área en lo que parecía ser un claro penal. No obstante Marriner no observó nada punible en la acción sobre el nipón.
En otra gran jugada colectiva del Leicester llegaría el segundo tanto de Vardy. El delantero de moda en Inglaterra recibiría un rechace de un zaguero red tras un golpeo previo de Okazaki que aquél no fallaría.
El segundo gol de los de Ranieri acabaría por destrozar al Liverpool, un equipo que a pesar de llegar al encuentro después de marcarle cinco al Norwich en el último partido de liga, hoy se mostró inoperante cerca del área rival.
Un bloque casi perfecto
Hace unos meses nadie hubiese imaginado que hoy el Leicester City ya sumaría 50 puntos en su haber. Tras el partido de hoy podemos decir que los foxes son uno de los mejores equipos de la Premier League y que tienen muchas posibilidades de lograr el titulo a final de temporada. En todo ello tiene mucha culpa el técnico italiano, que ha construido un bloque casi perfecto. Además de haber retenido posibles salidas en este mercado invernal (y no han faltado ofertas), ver al Leicester jugar es ver a un equipo con su propia personalidad, sin grandes jugadores pero siendo un bloque muy bien formado en el que absolutamente todos sus jugadores brillan en cada partido. Desde Schmeichel bajo palos hasta Vardy en la punta de ataque.
Benteke, irreconocible
De todos es sabido que el belga nunca ha entrado en los planes de Klopp, no obstante el rendimiento que está ofreciendo está muy por debajo de lo que se espera de él. Hoy disfrutó de más de 25 minutos de juego en el que no entró apenas en contacto con el balón. Estuvo lejos del área y los pocos balones que llegaba a controlar los perdía en pases imprecisos. El Liverpool ha decidido quedarse con él durante lo que resta de temporada pero si su rendimiento no mejora, la entidad red deberá buscarle una salida en verano.
Vardy, ¿dónde está el techo?
El delantero de Sheffield no deja de sorprendernos. Hoy lo ha vuelto a hacer con un golazo desde fuera del área, un zapatazo que destrozó literalmente a los de Klopp. Sin duda, un gol que se recordará mucho dentro de esta temporada para enmarcar tanto para él como para su equipo. Vardy ha atravesado algunas semanas complicadas después de su lesión muscular pero con el de la semana pasada frente al Stoke y los dos de hoy, ya acumula nada menos que 18 goles en liga.
El mejor del partido - Shinji Okazaki
No es el mejor jugador del equipo y mucho menos es el jugador más técnico dentro de la plantilla, sin embargo el nipón representa el espíritu de un club humilde que se encuentra en lo más alto de la clasificación. Su lucha, su entrega y su perseverancia han posibilitado que otros compañeros como Mahrez o el propio Vardy se erijan como unos de los mejores jugadores de Inglaterra. Frente al Liverpool ha vuelto a cuajar una actuación que, aunque parezca menor por los goles de Vardy, deleita a cualquier amante de este deporte.