No hay que saber mucho de la Premier League para darse cuenta de que este partido, correspondiente a la 35ª jornada de la competición doméstica inglesa, enfrenta a dos polos opuestos. El Chelsea, equipo multimillonario, visita al Bournemouth, equipo humilde, posiblemente con la plantilla de menor nivel de toda la liga. Sólo con esos dos datos podemos sorprendernos al mirar a la clasificación y ver que, a falta de cuatro partidos (cinco para el Chelsea, que ha jugado un partido menos por sus anteriores compromisos de copa), esta temporada 2015/16 ha sido histórica para ambos por dos razones muy distintas. Para los locales, por lo bueno: ha sido, sin duda alguna, la mejor temporada de sus 117 años de historia. Nunca habían estado en el primer escalafón del fútbol inglés. Y en su primer año, pueden acabar en mitad de la tabla. Lo mismo para el Chelsea, que también está en el 'ecuador' de la clasificación. Aunque para los Blues, posiblemente esta haya sido su peor temporada en lo que llevamos de siglo XXI. Y es que, aunque gane todo lo que le queda, esta será la peor campaña de un vigente campeón desde el Leeds de la 1992-93.

Dos derrotas seguidas han hecho que el Chelsea no pueda aspirar a más en el tramo final de la temporada. Lo cierto es que Guus Hiddink aportó firmeza al equipo tras su llegada. Así, con confianza y consistencia, los londinenses consiguieron no perder ni un partido en liga durante cuatro meses. El equipo consiguió salir de los puestos bajos de la clasificación, donde les había dejado Mourinho, y tras muchos empates y un buen puñado de victorias importantes, ascendieron hasta mitad de tabla. El objetivo de clasificarse para Europa no era tan difícil. Pero el Swansea rompió sus aspiraciones hace dos semanas, rompiendo la racha de imbatibilidad. Para rematar, el City visitó Stamford Bridge el sábado pasado y se llevó a casa los tres puntos. Europa sigue sin ser matemáticamente imposible, pero la posibilidad es prácticamente mínima.

Mientras, el Bournemoth ha encadenado varios resultados negativos en los últimos partidos, con tres derrotas en cuarto partidos, pero antes de los últimos cuatro partidos, ganó tres seguidos. La temporada de los de Eddie Howe está siendo grandiosa, pero lo más llamativo de todo es que no han sufrido demasiado para llegar a esa posición. Han perdido quince partidos, muchos de forma clara, pero solo han empatado ocho, por lo que llevan once victorias, las mismas que sus rivales londinenses. Con una plantilla de bajo nivel pero bien armada, han conseguido hacerse con 41 puntos, tres menos que el Chelsea. La mejor racha de los de Bournemouth fueron seis partidos sin perder en noviembre y diciembre. Llevan toda la temporada encadenando derrotas claras con victorias épicas, sobre todo fuera de casa, donde son mejores que en su campo.

Además, no son solo cifras lo que está en juego. Como el mánager de los locales ha dicho en rueda de prensa, ''acabar en el top-10 de la liga no era un objetivo'', pero por lo que parece, puede serlo. Y superar al Chelsea en los dos enfrentamientos de su primera temporada en la Premier sería un logro. No olvidemos que este Chelsea es el vigente campeón. Temporada histórica, por todos los sentidos. Que no solo sea por el mágico Leicester.

Posibles alineaciones

Los locales cuentan con la gran mayoría de sus jugadores. Arter, Smith y Mings son baja, mientras que Afobe es duda para el partido. El máximo goleador del equipo es Joshua King, con seis tantos. Una cifra algo baja, pero que es contrarrestada por el resto de sus compañeros. Eso sí, los de Eddie Howe tienen una diferencia de goles negativa, con el quinto peor equipo de la liga en eso (41-57).

En el Chelsea hay varias bajas notorias. La primera, la de Thibaut Courtois, sancionado con dos partidos por su roja directa ante el Manchester City el pasado sábado. Begovic lo sustituirá. En la lista de bajas figuran Rémy, Zouma y Terry. El capitán volverá justito para los últimos choques de la temporada. Además, Eden Hazard es duda.

El partido se disputará a las 16:00 hora española (una hora antes en las islas británicas) en el estadio del Bournemouth, Dean Court, o también denominado como Vitality Stadium por razones de patrocinio. El colegiado encargado del encuentro será Roger East.