Normalidad ante la falta de repercusión:

Quique Sánchez Flores no sorprendió a la hora de escoger a sus 11 hombres para comenzar el encuentro, el técnico español presentó su clásico 4-2-2-2 con el veterano Gomes bajo palos, Paredes, Cathcart, Britos y Anya en la zaga, Watson y Suárez como pivotes defensivos, Abdi y José Jurado fueron los encargados de crear juego y arriba la dupla Ighalo y Deeney.

Eric Black tampoco varió mucho el esquema habitual de su equipo luciendo un característico 4-3-3 con Bunn en portería, Hutton, Clark, Lescott y Cissokho en la zaga, Toner, Gueye y Westwood en el centro del campo y arriba el tridente formado por Ayew, Bacuna y Gestede, que fue el encargado de suplir al polémico Agbonlahor.

El que perdona lo paga

El encuentro comenzó con una declaración de intenciones por parte de los hornets, que a pesar de tener todo hecho en esta Premier League habiendo logrado de esta manera la permanencia en la jornada 34 frente al West Bromwich Albion tras vencer por 0-1, salieron marcando un alto ritmo de juego que les llevó a dominar el partido durante los primeros 20 minutos, donde con un buen juego colectivo capitaneado por una circulación fluida del balón crearon peligrosas ocasiones que por suerte para los visitantes no terminaron en gol.

Watson disputando la posesión con Gestede. Fuente: Mail
Watson disputando la posesión con Gestede. Fuente: Mail

Fue en el minuto 24, cuando uno de los hombres más activos del Watford en los últimos partidos, Ben Watson, el cuál ha declarado estar muy satisfecho con el trabajo realizado por Sánchez Flores, gozó de la mejor ocasión del partido para las avispas hasta el momento ya que un balón muerto cayó en las botas del pelirrojo y este con mucha potencia y seguridad mandó el cuero al larguero desde larga distancia.

Pero gracias a este disparo, el Aston Villa reaccionó y a partir del minuto 26 provocaron una bateria de ocasiones que posteriormente les llevaría a poner el 0-1 en el electrónico. Primero, Jordan Ayew intentó muy perspicazmente un disparo con la intención de sorprender a Gomes, pero una falta de imprecisión por parte del delantero le llevó a mandar el esférico por arriba del larguero. Más tarde, el agresivo juego defensivo del Watford dejó que los ya descendidos disfrutaran de una jugada a balón parado que tuvo que despejar a córner Heurelho Gomes. Y gracias a ese saque de esquina llegó el gol, Westwood puso un centro medido para que Ciaran Clark mandase el balón al fondo de las mallas gracias a un tremendo cabezazo que puso el 0-1 en el luminoso.

Tras el gol, los colistas supieron mantener la calma, frenando así la ofensiva rival y llegando a generar ocasiones con mucho peligro, como fue un cabezazo del joven Ayew que sacudió el poste izquierdo de la portería rival. Justo después de esta gran ocasión, los de las afueras de Londres lograron el gol que igualaba momentáneamente este apasionante choque, gracias al suizo Almen Abdi que mandó el balón fuera del alacance del portero rival anotando de esta manera su segundo gol en la competición.

Abdi celebrando su gol. Fuente: Mail
Abdi celebrando su gol. Fuente: Mail

Segundo tiempo de ensueño

Los visitantes salieron motivados, pensando ya en el exigente nivel al que se verán sometidos la siguiente temporada para intentar volver a la máxima cateogría del fútbol inglés, algo que les permitió crear otro gol en el minuto 48, cuando Rudy Gestede mandó el cuero al borde del área para que Jordan Ayew, que estaba buscando por activa y por pasiva su gol, diseñase un gran disparo para mandar el esférico a la esquina inferior izquierda batiendo de esta manera a Gomes y volviendo a poner a su equipo por delante.

A partir de este momento, el conjunto dirigido por Quique Sánchez Flores se vino arriba y presionó al rival generando mucha tensión en la zaga del Aston Villa, que no provocó muchas ocasiones pero sí fallos de concentración que facilitaron el trabajo a una de los equipos revelaciones en esta temporada. Las contínuas internadas por ambas bandas hicieron que en el minuto 74, Aly Cissokho realizase una fatal entrada siendo expulsado inmediatamente. Pero por si esto fuera poco, en el minuto 83 Idrissa Gueye sufrió un tremendo golpe que le llevó a ser sustituido minutos después.

El tridente ofensivo celebra el gol de Ayew. Fuente: Mail
El tridente ofensivo celebra el gol de Ayew. Fuente: Mail

Mucha gente dice que lo bueno se hace esperar, y en este caso así fue para los aficionados de Vicarage Road que saltaron de alegría al ver como Steven Berghuis envió un bonito centro bombeado dentro del área para que Troy Deeney saltase rematando de cabeza batiendo de esta manera a Bunn y poniendo el empate en el marcador. Pero la guinda del pastel llegó en el minuto 93, gracias de nuevo al mismo protagonista, que esta vez llegó oportunamente a un rebote dentro del área y disparó directo y raso a la cepa del poste para poner el definitivo y sorprendente 3-2 en el marcador.

Deeney ha marcado 3 goles en los últimos 2 encuentrosTras una gran primera vuelta, el delantero de 27 parecía haber desaparecido pero tal y como hacen los grandes, uno de los estandártes de este equipo está sacando a pasear su mejor versión en el último tramo de temporada, lo que le ha llevado a cosechar 3 tantos en los últimos 2 partidos, recuperando el fabuloso nivel del que presumía a principios de temporada.

Deeney tras marcar el gol del empate. Fuente: Mail
Deeney tras marcar el gol del empate. Fuente: Mail