Era el último partido de la Premier League en esta temporada y el Manchester City aún tenía que pelear por conseguir acabar en una posición que le diera acceso a la Liga de Campeones para el próximo año. Era a lo máximo que podía aspirar en una temporada que, aunque empezó bastante bien, comenzó a torcerse en torno al mes de diciembre.

El 2015-2016 ha sido para los citizens un año con muchos altibajos y numerosas lesiones que iban mermando poco a poco el equipo. Apenas era capaz de encarrilar dos victorias consecutivas, vio cómo se le escapaba la FA Cup tras una contundente derrota frente al Chelsea; conforme pasaban jornadas se escapaban también las posibilidades de ganar la Premier. Pero, no obstante, también ha tenido satisfacciones: Pellegrini se despide del equipo sky blue habiendo conseguido alzarse con la Capital One Cup y llegando hasta las semifinales de la Liga de Campeones (unas semifinales en las que, hay que decirlo, el equipo dejó mucho que desear).

Hoy era su última oportunidad para ganar y dejar en buena posición al equipo. Dependían de lo que hicieran Arsenal y Manchester United (cuyo partido se ha anulado tras encontrar un artefacto explosivo en el interior de Old Trafford) para poder acabar en tercer lugar (el último que da acceso a la Liga de Campeones), mantener la cuarta plaza y jugar la fase previa o descender a la quinta posición y jugar la Europa League la próxima temporada. Sin duda, lo mejor que podían hacer era ganar, aunque el empate conseguido también les vale para acabar la Premier en cuarta posición.

Los jugadores del Swansea protestan un posible fuera de juego en el gol del Manchester City | Foto: Premier League
Los jugadores del Swansea protestan un posible fuera de juego en el gol del Manchester City | Foto: Premier League

Para intentar lograrlo visitaban el Liberty Stadium para medirse al Swansea City, que, situado en la mitad de la tabla, no se jugaba nada más en este encuentro que finalizar la Premier League en uno u otro puesto de la clasificación.

Se sentenció en la primera parte

Ningún equipo ha brillado en el encuentro de hoy, incluso en algunas ocasiones parecía más un partido amistoso en el que nadie se jugaba nada.

El Swansea podría haber ganado de no ser por el gol anulado durante la primera mitadLas primeras llegadas al área se dieron pronto y, de igual forma, el primer gol no tardaría en llegar. Era el minuto 5 cuando Iheanacho solo tuvo que empujar un balón mal despejado por Nordfeldt para poner por encima en a los citizens. Un gol que subió al marcador con polémica porque los jugadores del Swansea aseguraban que el jugador sky blue estaba en fuera de juego, pero Iheanacho estaba totalmente habilitado.

Pronto llegaría la reacción de los locales, que en el 10 pudieron volver a empatar el partido, pero Mike Dean anuló el gol por falta en ataque de Montero sobre Sagna.

Después de esto, los siguientes minutos iban a seguir un guion muy claro: el Manchester City dominaba en el marcador y en las ocasiones, pero era el Swansea el que tenía una mayor posesión del balón. El equipo de Pellegrini empezó a hacerse con el esférico hacia el cuarto de hora de partido, pero la fortuna no estaba de su parte.

Con la ausencia de Silva por lesión, ha sido Navas el que ha tomado el control en el centro del campo en el equipo citizen y hoy lo ha mostrado con creces. El sevillano ha participado prácticamente en todas las ocasiones de los sky blue, pero los balones no acababan de encontrar portería. Los centros que no se iban largos sin encontrar rematador acababan saliendo desviados o despejados por Nordfeldt y ni Iheanacho, ni De Bruyne, ni el Kun Agüero eran capaces de anotar un nuevo tanto que les diera una mayor ventaja en el marcador.

Tras la primera media hora de partido volvió a dominar el balón el Swansea y, aunque no estaba creando demasiado peligro a Joe Hart, ni siquiera en las jugadas a balón parado, al final llegó el empate. Fue en el descuento de la primera parte, cuando Fernando despejó de cabeza el lanzamiento de falta de Ayew llevando el balón hasta el fondo de su propia portería (a pesar de que Fernando fue el último en tocar el balón, la Premier le ha dado el tanto a Ayew).

Fernando remataba ese balón y ponía el 1-1 en el marcador | Foto: Premier League
Fernando remataba ese balón y ponía el 1-1 en el marcador | Foto: Premier League

La intensidad se quedó en el vestuario

Y si la primera parte había sido lenta y con poca intensidad, en la segunda ni siquiera apareció. El Swansea apenas creó peligro a Joe Hart durante los últimos 45 minutos y las llegadas del Manchester City casi se podrían contar con los dedos de una mano.

Parecía que iba a ser diferente cuando, en los primeros minutos de la segunda mitad, Mangala remató de cabeza un pase de De Bruyne que se fue por muy poco por encima del larguero. Pero nada más lejos de la realidad. Después de esta jugada la más clara la protagonizó el autor del único gol citizen. Tras un centro de Navas despejado por Nordfeldt cayó en los pies de Iheanacho, pero la defensa del Swansea fue más rápida y le robó el esférico antes de que el nigeriano pudiera tirar a portería.

Al igual que en la primera parte, los hombres de delante del Manchester City continuaron intentando volver a ponerse por encima en el marcador, pero eran más los balones que salían desviados que los que encontraban portería. En el 72 tuvo una nueva oportunidad Kelechi Iheanacho, pero un resbalón antes de tirar a puerta acabó con la última ocasión clara de los citizens.

A pesar de la falta de ritmo y de intensidad –y a pesar de que el Manchester United no ha jugado su partido frente al Bournemouth, aplazado tras haber encontrado un objeto sospechoso en las gradas de Old Trafford–, el Manchester City acaba la Premier League ocupando el cuarto puesto en la clasificación, posición que le asegura jugar la fase previa de la Liga de Campeones, a la que tendrá que enfrentarse con un nuevo entrenador: Pep Guardiola.