Primera temporada del Bournemouth en Premier League superada con creces. Los cherries aforntaban esta temporada con el objetivo de permaneces un año más en la máxima competición del fútbol inglés, y su temporada ha superado las espectativas de un club que vio como a mediados de abril, el sueño de la permanencia, ya se había logrado.
Nadie daba un duro por ellos, al principio de la temporada, las apuestas daban por descendido al conjunto del sur de Inglaterra, ya que era la primera vez que pisaba la Premier League y no tenían experiencia, pero en muchas ocasiones, las ganas, el esfuerzo y la lucha es más que suficiente para conseguir los objetivos y la experiencia, no es más que un plus.
Irregular comienzo
Los comienzos no fueron fáciles para los cherries, la temporada no ccomenzó del todo bien para los de Eddie Howe. Sus dos primeras jornadas se saldaron con derrota -ante Aston Villa y Liverpool-, pero a la tercLa primera victoria para los cherries se saldó con hat-trick de Wilsonera fue la vencida y en la siguiente jornada consiguieron la primera victoria en la era Premier del club del sur de Inglaterra, fue ante el West Ham, donde los cherries se impusieron por 3-4, con hat-trick de Wilson, uno de los protagonistas de la temporada del Bournemouth, donde, a pesar de estar gran parte de la temporada lesionado.
Las jornadas iban pasando, y los cherries no lograban la regularidad necesaria para no complicarse en los puestos bajos de la tabla, sin embargo, victorias exporádicas le hacían alejarse del peligro del descenso. A finales de octubre llegaron dos derrotas consecutivas duras, la primera fue ante el Manchester City (1-5), y la segunda ante el Tottenham, también por el mismo resultado.
Buena racha y dos victorias de prestigio
El tiempo pasaba y llegó la mejor racha de la temporada para los cherries, seis partidos consecutivos sin perder, entre los que se eLograron dos victorias de prestigio consecutivas: ante United y Chelseancontraron dos victorias consecutivas de prestigio, ante el Manchester United, por 2-1 y ante el Chelsea, donde los de Eddie Howe vencieron por 1-0. Más allá de la victoria ante el Manchester United, ese partido, fue uno de los más emotivos de la temporada para los cherries, ya que, tan sólo unas horas antes, Harry Arter, jugador del Bournemouth, perdió a su hija en el parto. Sus compañeros no dudaron en dedicarle la victoria, además, el centrocampista cherrie se empeñó en jugar ese partido para "evadirse de lo sucedido", algo que deja ver el gran compañerismo de este vestuario. Esos seis partidos dejaron bastante claro que este equipo iba en serio a por la permanencia y cada vez, el objetivo, estaba más cerca.
Tras estos seis partidos consecutivos que acercabana los cherries un poco más al objetivo, llegó enero, y con ello, volvió la irregularidad: empate ante el Leicester, derrota ante el West Ham, victoria ante el Norwich... se iban sucediendo las jornadas y, poco a poco, a pesar de esa irregularidad, el Bournemouth iba dando pasos de gigante hacia la permanencia.
Objetivos cumplidos también en FA Cup y Capital One
A pesar de no llegar muy lejos en ambas competiciones, los de Eddie Howe hicieron los deberes. En FA Cup, los cherries cayeron en octavos, donde perdieron 0-2 ante el Everton en un partido bastante disputado.
En la Capital One Cup, también cayeron en octavos y también ante un equipo de la ciudad de los Beatles, el Liverpool.
La salvación, en la mano
Los meses pasaban, y el equipo de Eddie Howe no veía peligrar la categoría, varios empates y tres victorias consecutivas ante Southampton, Newcastle y Swansea en el mes de marzo y dejaban a las claras que una ecatombe tenía que pasar para ver al BourA pesar de estar desde la jornada 31 hasta la 38 sin ganar, nunca vieron peligrar la permanencianemouth en Championship, eran 13ª a falta de pocas jornadas. Los cherries ya estaban virtualmente salvados y flojearon, hasta tal punto que a partir de la jornada 30, donde vencieron al Swansea, y hasta la conclusión de la Premier League, los de Eddie Howe únicamente lograron una sóla victoria, y acabaron la temporada en 16ª posición, con 42 puntos, a cinco puntos del Newcastle, último equipo descendido.
Este dato es bastante significativo ya que deja ver que el Bournemouth consiguió el objetivo mucho antes de la última jornada. A pesar de la racha de 7 partidos consecutivos sin ganar, los de Eddie Howe respiraban tranquilos. La permanencia estaba en el bolsillo y consiguieron, gracias a su esfuerzo, trabajo y coraje, jugar, la próxima temporada, en la Premier League por segunda vez en su historia.