Esta temporada, al igual que todas las temporadas en el Arsenal, se iniciará con altas expectativas. Los gunners, que han terminado entre los cuatro primeros las últimas 20 temporadas consecutivas, finalizaron esta última campaña como subcampeones, lo que fue visto como otra decepción. El Arsenal gana, con razón, elogios por su consistencia y su larga racha entre los cuatro mejores de liga, pero el club se quedó corto en la carrera por la Premier la temporada pasada, terminando segundo. ¿Qué se necesita para ganar el título para apaciguar el ánimo de los fans?
Ivan Gazidis, director ejecutivo del Arsenal, asegura que tienen que ganar los títulos más importantes, y por eso hay una sensación de decepción y frustración entre los gunners por acabar en segunda posición la temporada pasada. Además, Gazidis cree en el club lo están haciendo bien dando oportunidades a los jugadores más jóvenes y jugando a un fútbol agresivo y atractivo, pero los fans solo se quedan con los títulos.
A pesar de poner fin a una sequía de trofeos con la consecución de la FA Cup en 2014 y 2015, Arsène Wenger siente una gran tristeza por no lograr el título que todo el mundo quiere, la Premier League. Desde el club nunca se ha dudado de su capacida competitiva. Él permanece masivamente comprometida. El francés continúa pensando no sólo en el desarrollo a corto plazo del club, sino también a largo plazo.
Este año el Arsenal ha invertido más de 20 millones de libras en el desarrollo de sus instalaciones: un campo de entrenamiento para los jugadores jóvenes y de la academia y el terreno principal de entrenamiento. Esas son las inversiones que se están realizando para el futuro a largo plazo del club, para los próximos 10, 15 o 20 años.
Ivan Gazidis asegura que el Arsenal no tendría éxito si simplemente fuera al mercado de fichajes y trataran de cerrar 5 o 6 fichajes caros. El Arsenal funciona de una manera auto-sostenible. Eso significa que el club no puede permitirse cometer errores en el mercado de fichajes. No pueden darse el lujo de competir con otros clubes que tienen mucho más dinero para gastar.
La realidad es que el fútbol actual está cambiando, pero sobre todo la Premier League, ya que los ingresos de televisión crecen de manera espectacular, y son repartidos por igual entre los clubes. En el pasado, los grandes clubes podían financieramente intimidar a los clubes más pequeños, pues hace unos años sería impensable que un club más pequeño fuera capaz de aferrarse a su mejor jugador, si el Manchester United, el Arsenal, el Chelsea o el Manchester City llegaran a llamar a la puerta. Esa dinámica está cambiando.
Este verano no se espera que se repita lo de hace unos años, cuando se firmó a Mesut Özil y Alexis Sánchez por una gran cantidad de dinero, aunque ya se haya fichado a Granit Xhaka. Aunque el Arsenal todavía está activo en el mercado, al igual que la mayoría de los otros clubes, y si encuentra oportunidades que se consideren que pueden mejorar la plantilla y añadir algo a ella, se realizará, no se espera que hay ninguna gran incorporación.