El primer título de la temporada en Inglaterra se jugaba en el mítico estadio de Wembley enfrentando a Leicester City, campeón la pasada temporada de la Barclays Premier League, y al Manchester United, que logró la anterior edición de la FA Cup en el mismo estadio donde se disputaba el encuentro de hoy. Ambos equipos habían realizado buenos partidos en la International Champions Cup frente a rivales de nivel como el Borussia Dortmund o el FC Barcelona, entre otros conjuntos.

El once inicial del Leicester City se parecía mucho al de la temporada anterior, pero con una baja muy importante, la falta de N'Golo Kanté que se fue traspasado al Chelsea en el mes de julio, todo lo demás eran jugadores de la mejor temporada del conjunto dirigido por Claudio Ranieri. Por su parte el Manchester United salía con dos nuevas incorporaciones en su once titular, una de ellas el defensa central Eric Bailly, y la otra novedad era Zlatan Ibrahimovic que sería fundamental en la trascendencia final del partido.

Eficacia mejor que oportunidades

Un encuentro marcado por la velocidad y la precisión en los pases dominarían los primeros minutos del partido, que se desequilibraba a favor de los foxes ya que dispusieron de más ocasiones, sobre todo gracias al japonés Shinji Okazaki que en una jugada muy clara se impuso a los defensas por alto y mandó un cabezazo al larguero de la portería defendida por el guardameta español David De Gea que si ese remate hubiera ido entre los tres palos no podría haber hecho nada por la violencia del cabezazo del jugador del Leicester City.

Los jugadores del Manchester United celebran el gol de Lingard | Manchester United
Los jugadores del Manchester United celebran el gol de Lingard | MUFC

Pero en el fútbol importa más la eficacia que las oportunidades, en el minuto 31 y tras una impresionante jugada personal de Jesse Lingard que se marchó de tres defensores del Leicester City, se plantaba cara a cara ante Kasper Schmeichel para batirle por bajo, aunque el guardameta rozó la pelota con su bota no pudo evitar que los red devils se adelantaran en el marcador pasado el ecuador de la primera mitad poniendo en el luminoso de Wembley el 0-1.

Poco más hubo en la primera mitad después del tanto del Manchester United, un par de ocasiones para ambos equipo, pero sin gran peligro, además de una tarjeta amarilla para Danny Simpson por una entrada peligrosa a Wayne Rooney. Con ventaja para el campeón de la FA Cup llegaríamos al descanso del partido.

Cambios foxes y error garrafal

Antes de comenzar la segunda mitad, el entrenador italiano realizaría dos cambios, dando entrada al terreno de juego a Demarai Gray y Musa en lugar de Albrighton y Okazaki. A los pocos minutos de comenzar este periodo, Fellaini cometería el peor error del choque, un pase atrás provocado por la alta presión de Jamie Vardy que se quedaba corto y no llegaba a los pies de De Gea que aprovecharía el delantero inglés para driblar al guardameta y a puerta vacía lograr el empata en el minuto 52.

Vardy marcando el empate | LCFC
Vardy marcando el empate | LCFC

Con el paso de los minutos, tanto Claudio Ranieri como José Mourinho fueron dando entrada a sus suplentes, para refrescar el juego de sus equipos e intentar lograr el gol que pusiera a su equipo por delante en el marcador. Esto estuvo a punto de lograrlo el Leicester en un potente saque de banda del defensor español Luis Hernández que colgaba la pelota al área, para que Huth prolongase de cabeza, pero Musa remataba de cabeza ligeramente por arriba del larguero. Esta jugada fue muy protestada por el entrenador portugués desde la banda por la pasividad defensiva.

Y llegó Ibra...

La siguiente jugada marcaría los minutos finales del partido. Antonio Valencia se hizo con el esférico cerca del área del Leicester City, se marchó en velocidad del lateral foxes y mandó un gran centro al área para que el sueco Zlatan Ibrahimovic, un por adelantado a la defensa, rematara al fondo de las mallas, haciendo imposible la estirada de Schmeichel, y logrando así el definitivo 1-2 que acabó en el marcador del estadio de Wembley.

Momento del remate de Ibrahimovic
Momento del remate de Ibrahimovic | MUFC

Varios cambios más y una ocasión para el Leicester que supo atajar bien por alto David De Gea ante las acometidas de los foxes que no pudieron hacer nada tras el mazazo del gol de Ibrahimovic. Con el marcador de 1-2 se llegaría al final del encuentro haciendo campeón de su vigésima primera Community Shield al Manchester United de José Mourinho y de Zlatan Ibrahimovic.

El primer título de la temporada se decidió a favor de los campeones de la FA Cup, mostrando un gran fútbol por parte de ambos equipos, pero se nota que aún estamos en verano y que los jugadores no se encuentran al 100 por 100 futbolísticamente. La semana que viene comienza de nuevo la Premier League dando inicio a una temporada apasionante en Inglaterra.