Sporting Kanas City y Seattle Sounders emaptaron a cero en un partido en el que ninguno de los dos equipos tuvieron ocasiones claras de adelantarse en el marcador. Por parte de los visitantes, su buen planteamiento defensivo fue el culpable de mantener su portería a cero. Sin embargo en ataque no estuvieron muy acertados, lo que facilitó el trabajo defensivo de los rivales.

Sin peligro

El partido comenzó con ambos conjuntos tanteándose, pero siendo los locales los dominadores del balón. Pese a este control les costaba ljegar a posiciones cercanas al área, debido a que la defensa de Sporting Kansas City se posicionaba muy adelantada, y juntando líneas, hacía muy difícil que los Sunders lograsen superarla.

Los visitantes en estos primeros minutos consiguieron llegar a la portería de Frei en dos acciones aisladas pero que no supusieron un peligro para los rivales. Les costaba salir con el balón desde la zona de inicio debido a que la presión de su rival estaba muy adelantada, pero aún así, en alguna ocasión lograban elaborar y salir sin necesidad de un desplazamiento en largo.

Pero al igual que la semana anterior, la primera jugada de peligro de Seattle Sounders llegó con un desplazamiento en largo a la espalda de la defensa, para que Barrett aprovechara su velocidad, pero esta vez el portero estuvo más atento.

Mediada la primera parte los locales consiguieron llegar poco a poco a la portería rival cuando se dieron cuenta que el mayor peligro lo crearían atacando por las bandas, ya que por esa zona había menos cantidad de defensas.

El principal problema de los visitantes a la hora de atacar era que no lo hacían con los suficientes jugadores, ya que la gran mayoría del equipo estaba en posiciones de defensa. Además se le sumaba la gran diferencia entre la línea de centrocampistas y de delanteros, que dificultaba el juego.

Los últimos minutos de esta mitad fueron de un control absoluto e incontestable de los locales que lograron encerrar a su rival en campo propio, teniendo varias ocasiones de adelantarse en el marcador (las más claras hasta el momento). Los locales no lograron tener más ocasiones sobre la portería de Frei, lo que hizo que el encuentro llegara la descanso con el marcador de 0-0.

Delanteros sin gol

La segunda mitad comenzó con una ocasión clara para los locales en un 1 para 1 contra el portero, pero Barrett disparo demasiado cruzado, y el balón se fue por la línea de fondo. Seattle Sounders era el equipo que llevaba el peso del juego con largas posesiones, tratando de aprovechar algún espacio que apareciera en la defensa rival, pero los de Kansas estuvieron muy bien posicionados en este sentido.

En cuanto a los visitantes, sus ataques se limitaban a los robos de balón que lograban hacer en el centro del campo, y trataban de salir en contraataque. Aunque estas acciones tenían escasa efectividad sobre la potería contraria. En el minuto 55 tuvieron una muy buena oportunidad, pero el disparo de Medranda se escapó fuera por escasos metros.

Kansas City cambió a un 1-4-1-4-1

Lo minutos pasaban, se llegaba al ecuador de la segunda parte y el partido parecía que se había estancado. Las llegadas aparecían por cuenta gotas y el juego en el centro del campo era el que se había impuesto. Los visitantes realizaron un cambio de sistema y ahora se situaban con un 1-4-1-4-1, lo que facilitaba la acumulación de jugadores cuando el rival atacara.

Ambos entrenadores comenzaron a realizar cambios que lograran cambiar la sintonía del partido. Estos cambios parecieron beneficiar a los visitantes que eran los que estaban consiguiendo llegar en estos minutos a la portería rival con más peligro. Los locales no conseguían sobrepasar las líneas de presión de Kansas City, seguían insistiendo en atacar por el carril central, y esto facilitaba el trabajo de la defensa.

En los últimos minutos apareció la figura del rookie Roldan, que con su velocidad y habilidad se estaba convirtiendo en un peligro para el lateral contrario. Los visitantes consiguieron hacerse con el balón y lo que trataban era mantenerlo, buscando que pasaran los minutos y que su rival no tuviera la oportunidad de marcar.