Portland Timbers y Vancouver Whitecaps empataron en un partido en el que la igualdad fue máxima. La defensa de ambos equipos estuvo muy bien posicionada, por lo que en la primera parte sólo los locales pudieron adelantarse en el marcador, con el único fallo de los canadienses. En la segunda mitad fueron los visitantes los que consiguieron anotar, y a partir de ese momento el partido enloqueció, convirtiéndose en un correcalles.
Igualdad en casi todos los sentidos
El partido tuvo un inicio muy igualado en el que las llegadas a áreas contrarias se alternaban, pero sin lograr una ocasión de peligro con un disparo o acercamiento. Pese esta alternancia, el juego de ambos equipos podía ser fácilmente reconocible, con los locales buscando un juego más elaborado y combinativo, mientras que los visitantes trataban de robar el balón lo más cerca posible de la portería contraria para poder salir en velocidad.
La primera jugada de peligro llegó para el Timbers, ya que, tras una larga jugada, llegó el balón a los pies del capitán Johnson al borde del área. Realizó un gran disparo que pasó a escasos centímetros de la portería defendida por el recién nombrado All Star, David Ousted. Pero los visitantes no se quedarían parados, y en la siguiente juagada, Manneh tuvo un mano a mano con el portero, pero este consiguió desviar el disparo.
En los primeros minutos, ambos equipos tuvieron una ocasión para adelantarse en el partido
Mediada la primera parte, el partido seguía sin tener un claro dominador, y las ocasiones de peligro llegaban con cuentagotas. Una de ellas volvió a ser para Manneh, que encaró de nuevo a Kwarasey, con un regate lo consiguió sobrepasar, disparó a portería y el balón se introducía de manera clara hacia la red. Pero por ahí apareció el central Borchers para cruzarse en la trayectoria del balón, y salvar un gol que parecía claro.
A la medio hora de partido, los locales lograron adelantarse en el marcador gracias a un error de la defensa canadiense. Fanendo Adi robó un balón en el círculo central, cuando el equipo contrario estaba saliendo con el balón, provocando que se produjera un cuatro para dos. El delantero nigeriano abrió a la banda donde se encontraba Valeri, que, tras pisar área, disparó a portería, consiguiendo el primer gol.
Los últimos minutos de esta primera mitad fueron de mayor peligro para los visitantes, que gracias a la movilidad de Adi, conseguía provocar muchas situaciones de peligro, pero la puntería en el partido no estaba de su lado.
Vancouver consigue su premio
La segunda mitad tuvo un inicio diferente a como acabó la primera, con los visitantes conscientes de que se encontraban por debajo en el marcador y teniendo la necesidad de empatar el partido.Pero el juego veloz que tantos puntos le había dado a Vancouver no acababa por llegar. Parte de ello era culpa del buen sistema defensivo que habían planteado los locales, juntando dos líneas de cuatro defensores a pocos metros del borde del área.
Hasta que en el minuto 57, Matias Laba recibió un balón muy lejos del área, avanzó unos metros, y como ningún defensor salía a taparle espacios, disparó a portería desde muy lejos. El balón pasó entre varios jugadores, lo que hizo que Kwarasey se despistara, y no pudiera reaccionar a tiempo para detener el balón. A partir de ese momento, quedaban 30 minutos en el que los dos equipos tratarían de lograr el tanto que les diera los tres puntos, y les ayudara también en la disputa por la Cascadia Cup.
Los dos equipos comenzaron hacer sustituciones, buscando conseguir ideas diferentes a la hora de encarar la meta contraria. Los minutos pasaban, y con ellos desaparecía el juego elaborado de la primera mitad. Los dos equipos declinaron la opción de tener el balón y buscar la portería rival con una circulación que provocara espacios en las defensas rivales, y sin embargo abusaban del desplazamiento en largo hacia los delantero, que lo único que hacía era facilitar el trabajo a las defensas contrarias.
A cinco minutos del final, una jugada entre Urruti, y el Gata Fernández, que habían salido en esta segunda mitad, a punto estuvo de dar la victoria a su equipo, pero el disparo del último se fue ligeramente por encima del larguero.
En los últimos minutos del partido, un balón dividido entre Harvey y Valeri acabó con el primero realizando una entrada peligrosa con la planta de los pies por delante, lo que provocó que el colegiado del encuentro dejara a los Vancouver Whitecaps con un jugador menos para el tiempo de descuento. El partido llegó al final de los 90 más el tiempo de prolongación con el resultado de empate, en un duelo que estuvo muy igualado. Ambos equipos dispusieron de pocas ocasiones, gracias al buen planteamiento defensivo que presentaron.