Seattle Sounders dejaron escapar tres puntos en los últimos minutos tras realizar una segunda parte muy mala, dejando que su rival les empatara, e incluso a punto estuvieron de remontarles. En la primera mitad, los visitantes tuvieron las ocasiones más peligrosas y gracias a ellas consiguieron anotar un gol. Sporting Kansas City trató de llevar peligro sobre la portería de Frei, pero no fue hasta los últimos diez minutos, cuando saltó al campo Dwyer, cuando tuvieron las oportunidades.
La historia se repite
El encuentro no defraudó desde un principio ya que se trataba de dos equipos que estaban realizando una campaña muy similar, de hecho se encuentran separados por un punto en la clasificación. Ambos equipos disputaban mucho juego en el centro del campo, lo que llevaba a que hubiera muy pocas llegadas sobre la portería.
Pero este juego duró pocos más minutos ya que antes de que se cumpliera el minuto diez, los locales tuvieron dos ocasiones muy claras de adelantarse en el marcador, pero el portero Frei estuvo muy atento en detener ambos balones.
Los Seattle Sounders, ante la adelantada presión que estaban sufriendo de su rival, cambiaron su estilo durante varios minutos a uno más vertical, en el que trataban de aprovechar la velocidad de Martins a la espalda de los defensas. Estas acciones a la contra provocaban que en varias situaciones, el equipo se dividiera, lo que aprovechaban los ‘Wizs’ buscar una acción que cogiera por sorpresa a la defensa rival.
Mediada la primera parte, los Sounders comenzaban a llevar mayor peso en el juego. Conseguían superar esa presión que durante los primeros minutos, no les permitió sacar el balón con facilidad. Pero todas sus acciones siempre finalizaban de la misma manera, con un balón en largo a Martins para que este buscara la acción individual.
Y como suele pasar en la mayoría de los partidos de Seattle, estos consiguieron adelantarse en el marcador con una buena jugada de Martins. El delantero nigeriano realizó un gran desmarque de ruptura apareciendo desde segunda línea, y tras deshacerse en velocidad de su rival, logra batir a Kempin con un disparo cruzado.
Tras el gol, el ritmo de juego disminuyó de nuevo y el balón se estuvo disputando durante muchos momentos en el centro del campo. Sólo en algunas ocasiones los equipos se acercaban a la portería contraria, pero no consiguieron poner en peligro a su rival, por lo que el partido llegó al descanso con la victoria parcial de los Seattle Sounders.
El banquillo iguala
La segunda mitad inicio de similar manera a como terminó la primera, con mucho juego en el centro del campo y pocas ocasiones. Pero con un equipo de Seattle no te puedes fiar, ya que cuando menos te lo esperas te puede sorprender. Y eso es lo que hicieron con un balón en largo a la espalda de la defensa de Scott al venezolano Valdez, que tras superar a su rival en velocidad, puso un centro en el área pequeña por donde apareció Dempsey. El delantero estadounidense empujo el balón a gol, pero el portero Kempin sacó una gran mano para impedir el gol.
Poco a poco los locales volvieron a entrar en la dinámica del encuentro y le disputaban la posesión del balón a su rival. Esto les llevaba a tener algún nuevo acercamiento sobre la portería de su rival, pero aunque fueran avisos, obligaba a su rival a estar pendientes de las tareas defensivas.
Cuando al partido le quedaban 20 minutos se rompió, y la coherencia en el juego dejó paso a constantes y alternas llegadas en una portería y otra. Durante unos minutos con esta locura futbolística, Sigi Schmid dio entrada a dos centrocampistas que buscaran volver a darle pausa al encuentro y facilitar así que las acciones ofensivas fueran más efectivas.
El entrenador de Sporting Kansas City, viendo que los minutos pasaban y los puntos volaban de su estadio, comenzó a dar entrada a jugadores supuestamente titulares en partidos importantes. Uno de los jugadores que entró al campo fue Dwyer, que en el primer balón que tocó, consiguió anotar el empate. Una jugada por banda izquierda de Sporting que aprovechó un desajuste de su rival, continuó con un centro del lateral que se había incorporado al ataque para que le delantero rematara a gol.
Tras el gol, los Seattle Sounders, que se habían dejado llegar durante toda la segunda parte, volvieron a subir la intensidad de su juego, lo que facilitó que tuvieran un par de acercamientos, pero sin peligro claro.
Pero los locales no bajaron los brazos y a cinco minutos del final, Palmer–Brown peinó con la cabeza un saque de falta lejano de Quintillà que a punto estuvo de introducirse en la red, lo que hubiera sido una gran remontada para el conjunto ‘Wiz’.
Los minutos finales del partido fueron de dominio absoluto de los de Kansas, que gracias a Dwyer tuvo sus mejores ocasiones desde que saliera al campo, incluida una acción en la que Frei sacó el balón bajo palos. Pero el marcador no se movió y el partido finalizó con un empate a goles en el los locales pudieron aprovecharse de la ‘caraja’ de su rival en la segunda parte.