FC Dallas logró el pase a la Final de Conferencia Oeste, después de superar a su rival en un partido que tuvo que llevarse a los penaltis. Los Seattle Sounders partían con ventaja en el marcador, y plantearon un partido serio en defensa en el que no hubiera goles. Los texanos dominaron de principio a fin, y un gol de Marshall en el minuto 90, a punto estuvo de dejarles fuera. Pero entonces apareció el central Zimmerman para mandar el partido a la prórroga con un gol en el tiempo de descuento. La prórroga no dejó nada claro y la eliminatoria se tendría que decidir en los penaltis. El penalti definitivo lo marcó el mismo jugador que consiguió dar esperanza a los FC Dallas, Walker Zimmerman.

Sigi Schmid domina con su planteamiento

Pese a lo que cabía esperar, fueron los Seattle Sounders los que tuvieron las primeras acciones de peligro sobre la portería rival, con un juego muy veloz por banda, que en todas las ocasiones aprovechaba la espalda de los laterales. Los locales aguantaron la presión de estos primeros minutos a sabiendas que tarde o temprano lograrían hacerse con la iniciativa en el juego.

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Y esta no tardo mucho en llegar, y a partir del minuto 10, los visitantes comenzaron a diluirse, entregando la posesión a su rival por completo. Esto fue aprovechado por FC Dallas para marcar el ritmo del juego y con acciones por banda izquierda, lograron tener algún acercamiento sobre la portería de su rival.

Las acciones por banda de Castillo y Barrios se estaban convirtiendo en un verdadero quebradero de cabeza para los defensas de Seattle. Estas jugadas obligaron al conjunto visitante a tener que formar bien posicionados en defensa, con las líneas muy juntas, para que los veloces extremos no pudieran crear espacios.

Pasaban los minutos y la primera media hora de encuentro llegó, a diferencia de las ocasiones. El planteamiento defensivo de los Sounders estaba siendo el principal protagonista del partido, ya que no permitía a los locales realizar su juego con solvencia. A su vez, este planteamiento hacía que las llegadas de los visitantes no tuvieran peligro, ya que muchas de ellas no conseguían pasar del centro del campo.

Poco a poco y con el partido llegando al descanso, los Seattle Sounders empezaron a tener mayor protagonismo en el ataque, pero la mayoría era por medio de acciones a balón parado. En jugada elaborada no lograban crear peligro, ya que trataban de buscar el carril central y los texanos tenían esa zona bien defendida.

En los minutos finales el encuentro pasó a ser algo diferente a lo visto hasta el momento, con los visitantes teniendo a su rival encerrado en campo propio. Incluso en el tiempo de descuento, estos, tuvieron una gran ocasión de marcar con un disparo lejano de Ivanschitz, que Jesse González salvó con una gran parada. Entonces el descanso llegó y la eliminatoria quedó definida para decidirse en los últimos 45 minutos.

Final loco

La segunda parte inició con los dos equipos con clara vocación ofensiva, lo que abría el partido, dando muchas opciones de crear peligro. Una de estas acciones de FC Dallas a punto estuvo de adelantarles en el marcador, con un centro de Barrios que Castillo remató a gol, pero Frei logró repeler el balón con una parada llena de reflejos.

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A los FC Dallas comenzó a apremiarles el tiempo, ya que con el empate inicial se encontraban fuera de la final y comenzó un nuevo asedio sobre la portería rival, creando el mayor peligro con acciones a balón parado. Mientras que los Sounders utilizaban el recurso del contraataque para poner en peligro al portería de Jesse González.

Los visitantes seguían manteniéndose bastante cómodo con este juego tan pausad, que hacía que su rival no le pudiera imponer un ritmo de juego rápido e intenso. Los locales comenzaron a acusar el desgaste físico debido a que ellos no estaban acostumbrados a llevar la iniciativa en el juego. Y a causa de ello, la velocidad en las jugadas de sus extremos, dejaron paso a circulaciones poco efectivas.

Los texanos se deseperaban con el paso de los minutos, ya que vían que cada vez estaban más lejos de la Final de Conferencia. Estos nervios hacían que fallaran muchos pases fáciles, sobre todo aquellos que deberían ser importantes para crear una ocasión clara de peligro.

El entrenador de FC Dallas realizó varios cambios ofensivos en los últimos compases del encuentro, confiando en conseguir un gol que le diera el pase momentáneo a la Final de Conferencia. Y este tanto llegó a cinco minutos del final, cuando Akindele, en apenas 30 segundos en el campo, remató un centro de Watson a la red, llenando de euforia las gradas de Toyota Stadium.

Ahora las prisas eran para los visitantes, que se encontraban fuera de estos PlayOff´s. Por lo que Schmid se vio obligado a dar entrada a Pappa por Fisher, acumulando la mayor cantidad de jugadores ofensivos en campo contrario.

El jugador guatemalteco fue el encargado de poner en juego un saque de esquina que fue rematado en el segundo palo por Marshall, poniendo el empate en el marcador, y dando el pase a la final a su equipo.

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Pero esto no acabó ahí, y en la siguiente jugada, FC Dallas volvió a anotar el tanto que mandaba el partido a la prórroga. Un saque de esquina que Blas Pérez remató, y otro de los jugadores al que el entrenador de Dallas dio entrada en la segunda parte, Zimmerman, peinó el balón para introducirlo en la red.

Con este resultado acabó el tiempo reglamentario con todo por jugarse en la prórroga y si fuera necesario en los penaltis.

Cara o Cruz

Con el inicio de la prórroga, los FC Dallas fueron el equipo que llevó el peso del partido, con jugadas muy elaboradas que siempre finalizaban con un balón en profundidad a Barrios, que en ese momentos se estaba convirtiendo en el jugador más peligroso de su equipo.

Con el paso de los minutos los Seattle Sounders lograron un par de salidas peligrosas, pero el cansancio físico de sus jugadores hacía mella en su juego, quedando demostrado en la ausencia de apoyos, pases defectuosos y ausencia de desmarques.

La segunda parte de la prórroga continuó siendo un monólogo del equipo texano con los visitantes aguantando el resultado y esperando a que finalizaran los 30 minutos para jugarse el pase en los penaltis. Pero las acciones de FC Dallas se estaban multiplicando a cada minuto que pasaba, al igual que su peligrosidad.

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En los minutos finales de la prórroga los Sounders parecieron recobrar fuerzas de flaqueza, y contaron con varias ocasiones que a punto estuvieron de finalizar en gol, pero ninguno entró y el partido se marchó a los penaltis.

Y fue mediante la pena máxima, la manera en la que se decidió el primer finalista de la Conferencia Oeste. Ninguno de los jugadores de FC Dallas fallaron en el lanzamiento, y su portero Jesse González, consiguió detener dos lanzamientos del rival. El encargado de lanzar el penalti definitivo fue el central Walker Zimmerman, dándoles la posibilidad de seguir luchando por la MLS Cup.