Los estadounidenses consiguieron una sencilla victoria frente a un rival que solo le puso en complicaciones en los primeros cinco minutos del partido. En estos primeros instantes, los caribeños lograron adelantarse en el marcador y meter el miedo en el cuerpo de los estadounidenses, pero rápidamente estos dieron la vuelta al marcador, logrando tres goles en la primera mitad. En la segunda parte el dominio ya se hizo más evidente, lo que se vio reforzado con otros tres goles que dejaron el marcador final en una goleada. Reseñar también que en este partido debutaron los dos jugadores que Klinsmann había convocado, Darlington Nagbe y Matt Miazga.

Susto inicial

Desde el pitido inicial, los USMNT se hicieron con la posesión del balón, y con un juego muy elaborado, buscaban espacios en la poblada defensa de su rival, que mantenía a sus 11 jugadores en campo propio. En las escasas ocasiones en las que el balón llegaba a los pies de los caribeños, estos buscaban siempre un balón en largo que sorprendiera a la defensa rival en una contra.

Y fue en una de estas acciones en las que los isleños lograron llevar la sorpresa al Busch Stadium, cuando el jugador de los Seattle 2, Oalex Anderson, adelantó a su selección, gracias a un contraataque que cogió mal posicionada a la defensa estadounidense.

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Pero este gol no puso nerviosa a la selección estadounidense que continuó con el mismo juego, a sabiendas que tarde o temprano lograrían anotar el empate. Y ese llegó a los pocos minutos, gracias a una buena jugada elaborada por la banda derecha de los USMNT entre Yedlin y Wood, que el delantero logró rematar de forma poco estética, pero que colocó la igualada en el marcador.

Los estadounidenses continuaron con su dominio del juego, y a los pocos minutos de empatar estuvieron a punto de lograr el gol en una pase que Bradley le dio a Wood, que le dejó solo frente a McDowall. El delantero del Union Berlin disparó ante la salida del portero, pero este se le marchó cruzado.

Mediada la primera parte el conjunto dirigido por Jürgen Klinsmann tuvo otras dos oportunidades en los pies de Altidore y Zardes pero los delanteros no estaban acertados de cara a gol.

Cuando penas se había cumplido la primera media hora, Fabian Johnson logró adelantar a los estadounidenses con un gol de falta directa, que contó con el apoyo de la barrera. El portero se lanzó al lado correcto al que el balón se dirigía, pero el rechace en la barrera lo desvió, introduciendo el balón en la portería.

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Pero apenas un minuto después, los Estados Unidos lograron distanciarse en el marcador gracias a un gol de Altidore, tras un fallo en la marca de su rival. Jermaine Jones prolongó de cabeza en el primer palo un saque de esquina de Bradley y Altidore apareció libre de marca en el segundo para rematar de cabeza y colocar el tercero en el marcador.

Pero el marcador ya no se movería mas hasta el descanso pese a que la selección de las ‘barras y estrellas’ tuvo alguna ocasión más que sumar a la larga lista. Los caribeños sin embargo, ya no consiguieron superar ni tan siquiera la zona del centro del campo, quedándose todo el tiempo encerrados en campo propio.

Muchas ocasiones para tan pocos goles

La selección de Klinsmann no disminuyó el ritmo de juego en la segunda parte, pese a que la distancia en el marcador hacía presagiar que no sufrirían para conseguir la victoria. Y con ello, en los primeros cinco minutos tuvieron un par de claras ocasiones de aumentar el marcador, pero hoy no parecía ser el día de los delanteros.

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Y en un saque de esquina cuando apenas se había cumplido el minuto 50 del partido, el central Cameron remató de cabeza a gol, libre de toda marca, tras una serie de movimientos que le dejaron solo.

Los estadounidenses continuaron con el asedio sobre la portería granadina, y cuando el partido llegó a la hora, lograron anotar el quinto gol de la noche. La defensa de San Vicente parecía estar ya fuera del partido, visto el vendaval que les estaba llegando. Esto facilitó que Altidore pudiera poner un balón a la espalda de la defensa para que Zardes lo recibiera y batiera a portero con un disparo cruzado.

Con un marcador tan abultado que daba casi por seguro la victoria local, ambos entrenadores comenzaron a realizar las primeras sustituciones. En donde sobresalieron las que realizó el preparador de los estadounidenses, dando entrada a Darlington Nagbe y Matt Miazga, que debutaban así con las ‘barras y estrellas’.

Los Estados Unidos disminuyeron el ritmo y la intensidad del juego cuando la segunda parte alcanzó su ecuador, lo que dio más libertad a la selección de Sn Vicente y las Granadinas. Aunque pese a ello, les resultaba difícil tener algún acercamiento sobre la portería de Guzan, que se había convertido en un espectador más del encuentro.

Cuando apenas quedaban 15 minutos para el final del encuentro, Altidore recibió un balón dentro del área y a espaldas de la portería. Con un gran movimiento logró deshacerse de su marcador y golpear el balón a la escuadra, poniendo el sexto gol en el marcador.

Con el resultado tan abultado los estadounidenses pasaron a disminuir un poco más la intensidad del juego para que el partido llegara lo más rápido posible al final, sin arriesgar nada que pudiera perjudicarles.

Un juego muy elaborado y con poca profundidad fue lo que se vio en los minutos finales hasta que el árbitro señalo el final del encuentro, en el que los estadounidenses lograron una victoria muy cómoda frente a un rival que apenas le opuso resistencia.