Lanzar un penalti supone un duelo, no tanto contra el guardameta rival, sino que es un reto psicológico en el que las emociones y el diálogo interno tienen una influencia capital.

Liderazgo, entrenamiento, intuición, calidad, decisión, capacidad para resistir en el alambre y el sentido de la responsabilidad son cuestiones que siempre están en juego.

No es una suerte fácil en ningún caso, de sobra son conocidos fallos míticos, en los que los lanzadores habituales declinaron su responsabilidad, abrumados por la importancia del momento.

Ricardo Pessoa es un caso paradigmático a la hora de hablar de un especialista en penas máximas. Capitán de Portimonense ha lanzado penaltis en partidos decisivos para su equipo a lo largo de cada una de las 8 temporadas en el Algarve.

En la memoria queda el lanzamiento en el minuto 94 en el duelo de la temporada 2009-10, con Varzim que fue el primer paso para ascender a la Liga Zon Sagres y hacer historia.

También en la temporada 2011-12 lanzó una pena máxima al límite, cuando en un duelo contra Santa Clara hizo el empate en a los 95 minutos, tras lo cual nos comentaba que este tipo de situaciones llegan a ser "son un hábito".

Hasta ahora, 30 goles de penalti.

Su serie actual roza el noventa por cierto de efectividad a lo largo de su carrera en Portimonense y Moreirense, tras haber marcado 30 goles en 34 lanzamientos.

Esta efectividad nos lleva a unos números atípicos cuando hablamos de un lateral derecho, ya que al ser también un experto lanzador de faltas, su influencia en el fútbol de ataque es siempre alta, al tener en cuenta también los pases de gol.

La temporada 2011-12 marcó un hito en la carrera de Ricardo Pessoa ya que logró 9 tantos, siendo uno de los máximos goleadores de la Copa de Liga de Portugal además.

Además, por primera vez en su carrera, esta temporada, ha logrado un hattrick, en el empate a tres, a domicilio frente a Leixoes. 

Su record de goles en una temporada está en peligro, ya que la cuenta actual llega hasta los siete tantos, justo cuando Portimonense lucha por los primeros puestos de la Liga Cabovisão. Sin duda, lo que más preocupa a Ricardo Pessoa.