Cual montaña rusa, la temporada del Nacional de Madeira ha estado cargada de contínuas subidas y bajadas. El equipo dirigido por Manuel Machado no llegó a encontrar la regularidad que necesitaba para triunfar tanto en las competiciones tanto nacionales como internacionales, y pese a empezar con mal pie en el primer tramo de la temporada, encuadraron las siete últimas jornadas perdiendo un solo partido, que le valieron para tener opciones hasta la última jornada.

Duro revés en agosto

En un principio, la temporada para los isleños no pintaba nada mal. Tras lograr la gesta de clasificarse para la ronda previa de la Europa League, el equipo disputó hasta seis encuentros de preparación sin encontrar resistencia, y hasta preparó a conciencia la eliminatoria europea tras vencer a rivales de nivel incluso superior que su rival, como el Sunderland inglés (0-1).

Sin embargo la eliminatoria frente al Dinamo de Minsk no sería ni mucho menos como quisiera el equipo. El 2-0 en la capital bielorrusa hacía soñar con una épica remontada en Choupana, pero un duro revés en forma de 2-3 decantó la balanza para los nórdicos, dejaban al equipo muy tocado, y este estrepitoso fracaso les haría perder una gran cantidad de partidos ligueros a principio de temporada.

Jugadores del Dinamo celebrando la clasificación. Foto: UEFA.com
Jugadores del Dinamo celebrando la clasificación. Foto: UEFA.com

Moreirense, Belenenses, Estoril o Vitória Setúbal, pero tan sólo una victoria en las primeras siete jornadas del campeonato liguero (1-0 ante Arouca) hacían saltar las alarmas en Choupana. Muchos eran los señalados: en primer lugar, el entrenador, Manuel Machado, por no haber enfocado la temporada correctamente; luego la presidenta de la entidad, Margarida Camacho, por no haber sabido fichar con inteligencia y por poner el cartel de 'vendido' a jugadores como el venezolano Mario Rondón.

Para colmo de todos los males, ni siquiera el propio calendario ayudaba al equipo, y en dos jornadas consecutivas tenían que verse las caras con Benfica y Oporto. Todo estaba cuesta arriba hasta que empezó a fraguarse el milagro a través de otra competición, la Taça de Portugal. Un título menor, sí, pero que dio alas a los de Madeira para afrontar con el máximo optimismo posible lo que restaba de temporada.

Primero Alcananense, después Ribeirão y más tarde Santa María, hasta que llegó el punto de inflexión en los cuartos de final. En frente el eterno rival, el Marítimo de Funchal y ambos equipos en busca de la supremacía en Madeira. Con la victoria en los penaltis, el equipo cogía poco a poco rodaje y tomaba velocidad de crucero.

Los resultados no se hicieron esperar. Cuatro victorias en seis partidos hacían soñar al aficionado isleño con una épica remontada justo antes de comenzar la segunda vuelta. Gottardi salvaba a los suyos en la portería, Zainadine y Marçal al fin ganaban seguridad en defensa, la dupla egipcia de Aly Ghazal y Gomaa funcionaba y Marco Matias ponía el gol junto a Lucas João.

Puede que la eliminación en semifinales de la Taça de Portugal a manos del Sporting pudiera haber hecho mella en el equipo, pero las sensaciones siguieron siendo positivas en Choupana. 2-2 en tierras isleñas, que decidiría Ewerton a falta de cinco minutos para el final en el choque de vuelta, hacía ver a Manuel Machado que el equipo era capaz de plantar cara a los grandes, y aquella idea se plasmó en el 1-1 frente al Oporto de Julen Lopetegui.

Llegaban al fin las siete últimas jornadas ligueras. Los rivales, cuatro partidos de gran exigencia: Sporting, derbi en Funchal, Vitória de Guimarães y una última jornada decisiva frente a Paços de Ferreira. Salvo contra los de Marco Silva, los compromisos se saldaron con buena nota, sacando dos importantes empates en el derbi y en Alfonso Henriques (ambos 1-1).

Con todo ello se llegó a la última y definitiva jornada en Choupana. Prácticamente lleno absoluto en el Estádio da Madeira para presenciar el duelo entre los isleños y el Paços de Ferreira, que antes del pitido final era el equipo que ocupaba la última plaza de la Europa League. El reto no era nada sencillo: había que ganar a los pacenses y esperar a que Belenenses no derrotara a Gil Vicente Barcelos.

La gesta no pudo empezar mejor para el equipo. Fábio Cardoso anotaba en su propia portería el primer tanto del partido y, antes de llegar al descanso, Marco Matias ponía en pie Chouoana con el 2-0. Belenenses no pasaba del empate a cero cuando se llegó al descanso, el milagro estaba al alcance y Nacional pasó los quince minutos en los vestuarios siendo equipo de la Europa League.

Sin embargo, las caras cambiarían radicalmente para el equipo de Madeira. Fabio Nunes adelantaba a los de Restelo ante Gil Vicente al poco de la reanudación, de nada servía ya la victoria a los de Manuel Machado. Tiago Rodrigues puso a los pocos minutos el 3-0 y finiquitaba el partido, pero los ojos ya estaban puestos en Barcelos. Con el gol de la sentencia de Tiago Caeiro a instantes del tiempo del comienzo, el sueño de Europa se esfumaba. Nacional moría en la orilla.

Ahora, sin competiciones europeas a la vista pero con las sensaciones recuperadas, Nacional afronta con optimismo la próxima temporada. El primer paso tiene que estar dado, el de las renovaciones. Parece casi imposible retener a jugadores como Marco Matías, el artífice de la remontada liguera, pero con la enorme cantera que aporta el fútbol egipcio, Margarida Machado podría pescar en el Nilo su enésima perla después de los triunfos de Aly Ghazal y Gomaa.

El objetivo es volver a las competiciones europeas y, sobre todo, cuajar una temporada regular, con más alegrías que disgustos. Manuel Machado tiene una nueva oportunidad para llevar a Nacional a lo más alto, el tiempo dirá si finalmente lo consigue. De momento, el futuro no pinta nada mal.

Posición Puntos Participación Goles a favor Goles en contra
Liga Portuguesa 47 - 45 46
Taça de Portugal - - Semifinales 13 6
Taça da Liga 4º (grupo) 1 3ª fase 1 3
Europa League - - Previa 2 5

Los tres mejores jugadores de la temporada

Eduardo Gottardi. Sin duda uno de los mejores guardametas de la temporada en la Liga NOS. El brasileño, con pasaporte italiano resultó decisivo en el último tramo de la temporada, pese a que en las primeras jornadas y con los resultados negativos del equipo, el portero fuera duramente señalado. Su gran juego con los pies, sus felinas paradas y sus intervenciones clave en los encuentros más importantes le han valido para ser de los más destacados en el equipo isleño y una de las revelaciones del campeonato. 37 partidos de titular, donde ha jugado más de 3300 minutos y ha encajado poco más de 1,23 goles de media por partido.

Zainadine Júnior. Quizás haya sido de las mejores temporadas en la carrera del jugador. El defensa, de 26 años, vive un momento dulce en Madeira y sus actuaciones le han servido para convertirse en imprescindible para los planes de Manuel Machado. Más de 40 encuentros en toda la temporada y más de 3500 minutos, el jugador que más participación ha tenido en todo el año. El de Mozambique sigue demostrando su gran proyección, y con contrato hasta 2017, promete seguir siendo uno de los intocables para el técnico isleño.

Zainadine ante Académica. Fotografía: maisfutebol.pt
Zainadine ante Académica. Fotografía: maisfutebol.pt

Marco Matías. Sin duda el jugador más determinante de la temporada para Nacional. A sus 26, el jugador ha firmado su registro más goleador. Con 21 tantos en todas la competiciones, el jugador ha conseguido quedar en cuarta posición en la clasificación de los máximos goleadores de la Liga NOS, sólo por detrás de Jackson Martínez, Jonas y Lima. Sus tantos, decisivos en los momentos claves, han servido para que el equipo cogiera terreno poco a poco a sus rivales en la lucha por Europa. De hecho, marcó uno de los tres goles en la victoria final ante Paços de Ferreira, aunque de nada serviría para la clasificación para la Europa League. Costará mucho a los de Manuel Machado retenerlo en Choupana.

Once tipo de la temporada

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Sobre el autor
Nehemías Dorta
Periodismo en la ULL. Coordinador adjunto de las redacciones de la UD Las Palmas y Portugal. El fútbol portugués como gran pasión. Aprender haciendo lo que más quieres, eso no tiene precio. ¡Nos leemos!