Podria haber sido una goleada, pero ha terminado con un corto 2-0. Este podría ser el resumen del partido jugado entre el FC Porto y el Vitória de Setúbal. El equipo sadino de Quim Machado entró al terreno de juego con un once de más contención que el usual, con Ruca en el lugar del congolés Arnold. Por su parte, en el lado local se vio el regreso del argelino Yacine Brahimi al once, que dejó a André André en el banquillo. El equipo local volvió a su estructura más familiar, el 4-3-3, con la que afronta el 90% de los partidos de liga y abandonó el sistema de los centrocampistas con el que viene afrontando los partidos de Champions League.
Tan solo un matiz, no de menor relevo: Yacine ocupaba el lado derecho del ataque y Cristian Tello volvía a la banda que mas ocupó en su etapa culé. El experimento no salió del todo bien, pues Brahimi en la derecha no puede encarar con la misma facilidad el lateral rival y el regate le sale hacia fuera, así que las jugadas terminaban con un centro al área. Esa no es desde luego la jugada ganadora del africano. Por el lado de Tello, la banda izquierda sería como anillo al dedo. Pero en Oporto su rendimiento está siendo mejor en la banda derecha. Eso debió verlo también Julen Lopetegui, que en el minuto 20 de juego los cambió a sus posiciones normales. El efecto fue casi inmediato: el argelino penetró en el área y dejó un balón franco al extremo catalán, que con su pie menos fuerte lo mandó arriba.
El partido fue un constante asedio por parte de los dragones al área visitante, que en la primera parte se tradujeron en al menos cuatro ocasiones clarísimas de gol. Aquí un apunte a Vicent Aboubakar, quien parece estar bastante impreciso en este parte de la temporada de cara a portería, pues como ya se vio en el choque de Israel, el delantero "tripeiro" está siendo bastante negado de cara a porteria. Se pudo contar un balón al travesaño en el minuto 7', un cabezazo en línea de gol en el 26', un remate que lo blocó el portero Reader a la media hora y un tiro de fuera del área que se fue fuera cinco minutos después.
Después del descanso, Julen Lopetegui sacó a Rúben Neves del campo, que ya había sido amonestado con la cartulina amarilla, y lanzó al más dinámico André. Las ocasiones se siguieron sucediendo, pero el gol no aparecía. Pero en el minuto 70, en una jugada que ya viene siendo recurrente, Miguel Layún puso un centro muy preciso para el corazón del área pequeña y ahí apareció el delantero de Camerún que, de un cabezazo, enterró a los fantasmas del gol.
Con la lata abierta, los espacios surgieron en la defensa visitate y en la enésima internada por la banda derecha del Porto, un centro retrasado del uruguayo Maxi Pereira le llegó a Layún, que con disparo colocado batió al germano Lukas Raeder y puso el definitivo 2-0. Mención aparte merece Miguel Layún, quien está jugando a un nivel muy alto en este inicio de temporada, tanto a nivel defensivo como en el ofensivo con buenas asistencias y ya anotado dos goles.
El Porto sigue su registro imbatido en el Dragão desde 14 de diciembre de 2014, o que viene a ser lo mismo, desde la derrota con el Benfica la temporada pasada. No ha encajado un solo gol de local en los ultimo quince partidos. Pese a ello, sigue encontrando algunas dificultades para batir a los equipos que se encierran sobre su portería. En este partido han podido cantar una muy justa victoria.
Sobre el Vitória de Setúbal se puede decir que este equipo puso en más apuros a la defensa portista, un rival que añora el regreso del capitán Maicon, que el Sporting de Braga dos semanas antes. Se nota la buena mano de Quim Machado en este equipo que antes de empezar la jornada estaba en un meritorio 6º puesto y que cuenta con muchísimos jugadores que están haciendo su primera temporada en la Liga NOS. Son también una de las buenas noticias de esta temporada las del equipo sadino.