Son días de ilusión y de esperanza para Jonathan Silva. El lateral argentino del Sporting de Portugal ha pasado de ser de un promesa en la sombra a poder ver la luz al final del túnel. El de La Plata no estaba teniendo la continuidad que deseaba en el equipo lisboeta y a sus 21 tiene una excelente oportunidad de seguir creciendo como futbolista. Su posición en el lateral zurdo está bastante ocupada con las buenas actuaciones que está realizando Jefferson, intocable para Jorge Jesus. Es por ello que el Sporting ha decidido cederlo hasta final de temporada a Boca Juniors. Un histórico de su país natal para acumular experiencia y minutos y volver a Lisboa con la intención de hacerse con la titularidad.
Los motivos que han precipitado esta decisión son bien claros para el bueno de Jonathan Silva: "La falta de continuidad fue el principal motivo que me llevó a pedir a los dirigentes del equipo que me buscaran otro club para tener más regularidad", explicaba el argentino en unas declaraciones al diario portugués O Jogo. Y razones no le faltan al jugador. 10 partidos ha disputado entre las cinco competiciones en las que ha participado el Sporting esta temporada. Cerca de 750 minutos que parecen insuficientes para un jugador de su talla y proyección.
Eso sí, Silva deja la puerta abierta al optimismo. Quiere triunfar en el Sporting de Portugal y ayudar al equipo de Alvalade a recuperar el terreno que ha perdido estos últimos años respecto a Benfica y Porto. Tras su cesión en Boca, el argentino regresará y lo hará con la mayor motivación posible: "Voy a acumular experiencia para regresar a Europa con más cabeza y con mucha más madurez", afirmaba convencido.
Criado y formado en el Estudiantes argentino, Jonathan Silva llegó a Lisboa el 9 de agosto de 2014 por poco más de dos millones y medio de euros. Desde entonces, no ha hecho más que progresar y mirar hacia adelante. Sus esfuerzos se vieron recompensados con su primera convocatoria con la selección albiceleste absoluta, en noviembre del pasado año. Participó en la victoria de Argentina sobre Croacia y en la derrota del equipo ante Portugal, ambos por la mínima.