Los pupilos de Julio Velázquez parecían tener aún las esperanzas puestas en terminar la liga en puestos europeos, pero para ello deberían de empezar a encadenar una racha de puntos que los saque de la media tabla y los aleje del descenso, posiciones que llevan ocupando prácticamente durante todo lo que va de campeonato. Ambos técnicos, conscientes de la exigencia del partido que iban a disputar, alinearon sus onces de gala, saliendo con todos sus efectivos para poder conseguir la suma de los tres puntos.

Restelo recibía, en su tarde soleada, a equipos que mirando los enfrentamientos oficiales (127), los pasteles se llevaban la mayoría de victorias (59), frente a la minoría del cuadro visitante (37), casi igualado con los empates (31).

La primera parte Belenenses la comenzó siendo superior, aprovechando el factor campo, buscando ya las ocasiones desde el primer minuto. Por su parte, Guimarães no había ingresado del todo en el terreno de juego, cosa que les pasó factura y que llevó al cuadro doméstico a adelantarse en el marcador con un gol de Miguel Rosa de cabeza a centro de Batic, que hizo inútil cualquier estirada de João Miguel. Los azules no se daban por vencidos, aprovecharon su superioridad y así pues, en el minuto 25, Carlos Martins, en una contra, pone un centro al debutante Bakic que fulmina al guardameta y pone el 2-0 en el electrónico. El conjunto doméstico ya se desinflaba y veía como Guimarães se les echaba cada vez más encima, hasta que consiguieron recortar distancias con un disparo de Otavinho que golpea a Saré y consigue anotar y meter a su equipo en el partido. En los últimos compases de la primera parte, Filipe Ferreira, quien estaba haciendo un buen partido, erra en el pase y se marca un auto-gol que ponía de nuevo las tablas en el marcador.

La segunda mitad, como era previsible, Belenenses intensificó su presión para buscar un tanto que les haga volver a ponerse por delante y en los primeros minutos cerca estuvo de conseguirlo, Miguel Rosa con un tremendo disparo que con habilidad consiguió atajar João Miguel. Fue bien entrada la segunda parte, en el minuto 63, cuando el español Juanto, quien estuvo atento al fallo de blocaje del portero, pudo también hacer pie en su debut en Restelo y adelantaba a su equipo estableciendo el marcador a 3-2.

Como era de esperar, Belenenses se echó atrás a defender el resultado, cosa que sólo les fue a mal, puesto que 10 minutos después de haber anotado, reciben gol de la mano de Henry Oro con un zarpazo desde el balcón del área, que no dio tiempo de reacción a Ventura, volvía a poner el empate. Los visitantes, viniéndose arriba, insistieron y trataron de ponerse por delante en el marcador por primera vez en este partido creando ocasiones de gran peligro, primero Otavinho desde falta que golpea al palo, pero que Cafú no sabe aprovechar el rebote y la manda por arriba del arco. Posteriormente, Alexandre Silva ponía un centro que remataba Henry Oro pero la mandaba larga. Ya en los últimos minutos de partido, de nuevo Oro, no sabe definir un cara a cara ante Ventura, a quien se le veía la cara de alivio tras el fallo del delantero rival.

Finalmente, Belenenses sacó un punto valioso pero que no les servía para salir de la media tabla, no de la misma forma lo veía Vitória Guimarães, quien perdió la oportunidad de adelantar a Paços de Ferreira, ya que éstos habían perdido ante Sporting CP y meterse así en puestos europeos.

El defensa vimaranense Dalbert protagonizaba la jugada polémica cuando en el minuto 60, un tiro de Miguel Rosa dentro del área le golpea en la mano. Los locales, con gran impotencia, protestaron el penalti y la expulsión del central, ya que había visto la cartulina amarilla minutos antes, pero Rui Manuel Gomes no vio nada antirreglamentario y continuó el partido sin detenerlo.