Inter Movistar salió a la cancha del pabellón Caja Madrid con las ideas claras ante el farolillo rojo de la categoría, querían solucionar el partido cuanto antes y la 'Máquina Verde' no dio opción a su rival, que se limitó a ver jugar a los pupilos de Jesús Velasco, porque ni disfrutar del partido les dejó el Inter.

Conjunto del Colegio Arenas Gran Canarias.

Destacar en el conjunto interista los debuts de Jesús Herrero como portero titular y Murga en la segunda mitad.

Desde el inicio fue claro el dominio verde.

Intentaba salir de su área el ala-cierre Celino Alves.

La estirada del cancerbero Dani Cabezón evito el primer tanto en el inicio.

No les dejaba salir con claridad los pupilos de Jesús Velasco, que agobiaban al Arenas Gran Canarias en su campo.

Carlos Ortiz, que sigue en estado de gracia de cara a la portería, consiguió el primer tanto en el minuto 1.

Los canarios lo intentaban a la contra con las salidas rápidas de Celino Alves, pero sin fortuna.

Aquí fue Yoni el que lo intentaba pero se encontraba con el muro infranqueable de Jesús Herrero.

En varias ocasiones a lo largo del partido Ricardinho puso en pie el pabellón Caja Madrid con su magia.

Así llegó el 3-0 obra de Roberto Tobe, con una celebración de especial dedicatoria hacia un familiar, en el minuto 11.

Pese a la goleada en la primera mitad, Dani Cabezón evitó un daño mayor gracias a sus paradas, pero nada podría hacer ante la apisonadora del conjunto alcalaíno y su floja defensa.

Entre pases inverosímiles de Ricardinho y acciones de precisión ofensiva apareció Borja para hacer doblete antes del descanso. 4-0, minuto 16 y 5-0, minuto 17.

Ya en la segunda mitad llegó el debut esperado por el joven jugador Murga.

Una ruleta de Rivillos, y gol de Borja colocando en el marcador el sexto de la noche y el hat-trick particular del jugador madrileño.

El Ala Campoy y las rápidas subidas de Celino Alves, quien consiguió marcar, fueron las acciones a destacar por parte del conjunto canario.

Ricardinho levantó el pabellón con esta acción de espaldas a portería, un intento de vaselina de espaldas, por algo le llaman 'O Mágico'.

Se lamentaba Pola por las ocasiones fallidas de cara a puerta.