Saltó la sorpresa en Zierbena, una pequeña localidad de Vizcaya. Allí, tras un partido donde ambos cuadros acabaron exhaustos y que se decidió desde el lanzamiento de una tanda de penaltis, el conjunto de Íñigo Martínez se clasificó para los octavos de final de la Copa del Rey, como único representante de la Segunda División B, apeando de la misma al Peñiscola FS, de Primera División.

Robert responde a Contreras

El encuentro empezó con dominio visitante, con un quinteto inicial de los castellonenses muy activos y que gozaron de diferentes oportunidades para adelantarse en el marcador. Sin embargo, Jose Mari se encargó de mantener la puerta a cero, hasta que entró en escena Contreras. El veterano jugador, poco acostumbrado a ser protagonista, adelantó al Peñíscola FS poco antes del ecuador del primer acto.

El Zierbana, pese a la teórica inferioridad de categoría, sacó fuerzas de flaqueza y por medio de Robert, tras una jugada desafortunada para los intereses de los valencianos, logró igualar a 1 al cazar un rechace y situar el segundo en el electrónico, a falta de 36 segundos para el descanso, fruto de la vorágine descontrolada en la que se había convertido en el enfrentamiento, con contragolpes constantes.

Tras la reanudación, el conjunto de Ricardo Íñiguez lo intentó, sin suerte, y se vació en la búsqueda del 2-2, que llegó, de nuevo, obra de Contreras. El cierre, a falta de 7 minutos para el final, embocó a gol una jugada de estrategia hilada por Juan Carlos. Justicia relativa en el marcador, que ya no se decantó en los 40 minutos reglamentarios, pese a que ambos equipos calcaran el plan de ruta establecido en los últimos instantes del primer tiempo.

La ilusión mueve montañas En la prórroga, Diego Blanco anotó el 2-3 antes del cambio de campo relativo al final de cinco primeros minutos. La entidad castellonense encaró, el tiempo extra, con cinco faltas en su casillero y lo pagó caro, ya que el Zierbana empató al transformar un doble penalti que mandaría el partido a la lotería de los penaltis. En ella, los locales no fallaron y lograron la clasificación tras el fallo de Gonzalo