Los aficionados jiennenses levitan al pasear por las aceras de la ciudad. El estado de optimismo es tal que no se concibe salir de La Salobreja sin una sonrisa incrustada en el rostro. Aunque se sufra. Santiago Futsal apretó el pabellón andaluz hasta casi rozar el resquebrajo de sus cimientos, pero Jaén Paraíso Interior supo encontrar una mínima brecha en la serena plantilla gallega para guardar una ajustada (ajustadísima) victoria en su cancha, la tercera de esta temporada en cuatro partidos, y encajar únicamente dos goles en 160 minutos. Con la armadura abollada por el empuje norteño, los jiennenses duermen líderes más cerca de las nubes que del asfalto.

Hubo optimismo antes de empezar el encuentro, cuando se avecinaba un choque aguerrido e intenso. Rápidamente se le cortó la digestión a La Salobreja cuando en apenas unos segundos Iván Rumbo saludaría a Prieto y le mostraría la primera de las muchas cualidades del coruñés, que la pasada temporada militó, inexplicablemente, en la Segunda División B (Cidade de Narón FS). En esa oportunidad, Jaén Paraíso Interior permutó mal las marcas y dejó a Rumbo prácticamente sin compañía, pero no consiguió acertar. En los primeros minutos, Santiago inquietó bastante el área jiennense, que se defendía de los saques de equina en contra que se producían, uno tras otro, y que apelaban a reducir espacios.

Santiago presionaba individualmente durante la construcción del ataque jiennense, pero los amarillos salían limpiamente de la presión y obligaban a que su rival redujera el ímpetu. Poco a poco, Jaén hundía a Santiago, aunque no de forma continuada, y comenzaba a coger el calco de anteriores partidos: posesión de la pelota en busca de espacios, que podían encontrarse en banda, con Chino, Campoy o Cuco en el regate, o pases interiores para los desmarques de Dani Martín, con origen en Fabián o el propio Campoy. Las paralelas de Carlinhos eran otra opción, pero los visitantes conseguían contener con entereza las acometidas andaluzas. Sobre la pista quedaba patente que ambos eran planteles con empaque y estudiantes del rival.

Una de las arengas que más motivan a este Jaén Paraíso Interior es la atención que se le presta al robo y al corte, con una efectividad inmensa, pues activan tanto al equipo como a la grada. Hasta en dos ocasiones consecutivas lo hizo Campoy; en una provocó peligro él mismo y, en otra, se la cedió a Chino para que disparara sin suerte. En cambio, los gallegos buscaban dañar con continuas diagonales y juego de pívot, de nuevo con Rumbo, cuya menudez no le imposibilitó ser el mejor santiagués en la primera parte. Técnico, veloz y con un aguante de pelota excepcional, rasgó a José López y Fabián en varias ocasiones, porque luchó cada pelota con una ambición envidiable. Le faltó, de nuevo, definición.

Al llegar a los 10 minutos, Santiago se secó y encontró respiro en balones parados, como la falta de su Chino o toques rápidos en busca de huecos que se abrieran. Santiago se sentía cómodo con el marcador equilibrado, pese a que estuviera dominado, porque son un equipo estructurado para eso: aguantar y salir. Reaparecía Quintela tras un mes de lesión, pero apenas tuvo incidencia en el juego. En el caso de Jaén, los de Dani Rodríguez cubrían los espacios con suficiencia. Los roles están marcados en los jiennenses, siendo Fabián el eje principal para la construcción de las jugadas, con un Emilio que debe oxigenar y aguantar la pelota en los momentos de aceleración adversaria. Al final de la primera parte hubo picos con ocasiones de Dani Martín y Cuco, que fueron acompañadas por el uy de las gradas, que simboliza ilusión. Rumbo, no obstante, en su empeño por seguir brillando, paralizó a la afición con una tijera que casi modifica el luminoso. El uy fue ay por unas décimas.

Pero el gol local llegaría tras una triangulación exquisita, medida milimétricamente (lo justo para que Santi no llegara a rozar la pelota y desviar el pase) entre Cuco y José López, con finalización del primero para inaugurar el marcador. Resoplaba de alivio La Salobreja y veía cómo su equipo forzaba pérdidas de Santiago Futsal antes del descanso, con los gallegos algo desorientados. A la vuelta, Cuco prosiguió con su ímpetu, aglutinó responsabilidades —potenciado por el gol— y fue el protagonista de la primera ocasión jiennense, apenas cuando el árbitro había señalado el inicio de la segunda mitad. Emilio quiso contribuir a tal despliegue y comenzó a presionar y robar balones como si le persiguiera la quilla del Titanic: con la desesperación previa al desfallecimiento.

Por un momento, Jaén FS aprovechó su pívot en el borde del área rival, algo que no suele hacer, y comenzó a ver el partido de cara, con un saco en de símbolo $ en un pie y la mercancía robada en otro. La situación era agradecida para los locales y la inteligencia posicional de Fabián ayudaba a que siguiera saliendo fructíferamente al corte e incluso se sumara al ataque, con oportunidades para él mismo o Cuco. Atravesaba Jaén su mejor momento, con una armonía perfecta de sus componentes al son de los aplausos con cada desembarazo de la presión gallega. Llamaba la atención el rápido repliegue de los jiennenses cada vez que se marraba un contragolpe y el rival salía, pues se posicionaban repentinamente con una solidaridad que indicaba, entre otras cosas, que recibirían puñaladas por el compañero.

Santiago estaba desbordado y Campoy arrancaba con su show semanal, en el que mostró detalles, junto con Emilio, de agilidad en la articulación del tobillo, un arma que convierte las caderas en polvo. Sin embargo, en épocas de algidez, los gallegos, expertos en este clima, empataron el encuentro con una genial maniobra de Borja, quien robó el balón en mediocampo y no permitió que nadie, en su diagonal particular, le arrebatara la bola hasta que la depositó en el palo contrario de Prieto. Silencio y Borja, de rodillas, recolectó las miradas de una afición ajena. En el instante en el que Jaén debía demostrar si de verdad había arribado ala zona noble para quedarse, irrumpió "Gallego" Rodríguez para sembrar pánico en los amarillos. La banda izquierda era del argentino, que pisaba la bola y también se llevaba las miradas de la grada, sumida esta vez en el auténtico pánico.

Dani Martín acabaría encontrando el gol tras un precioso hilvanado con robo de Eloy Rojas (repito: otro robo, ante su exquipo), que cedería a Cuco y, acto seguido, al segundo palo para que el salmantino se quitara la capa de ansiedad que le ahogaba. Después del gol, Santiago prosiguió jugando con el temor jiennense. En varias ocasiones, Gallego dejaba silencio tras su paso, lo que era la principal muestra de que el pavor en el pabellón estaba presente. También hubo una cruceta por parte visitante y varias oportunidades en las que el balón circuló con dudas por la meta de Prieto, sin que deciciera introducirse en ella. Había tensión y se produjeron algunas faltas que evidenciaron la importancia de los puntos. No fue hasta a falta de dos minutos cuando Santi Valladares incluyó el portero-jugador en sus planes, aunque Jaén replegó bien y evitó el empate hasta agotar el tiempo del partido.

De esta forma, Santiago rompe su racha de tres victorias consecutivas y se queda en séptima posición con nueve puntos. Por el contrario, Jaén es líder provisional con 17, sólo 12 goles encajados (el que menos) y 30 marcados (tercero que más). Visto el espectáculo sobre el parqué, no hay dudas sobre que ambos conjuntos, si siguen su ritmo normal, estarán en Ciudad Real el próximo mes de marzo.

Santi Valladares esperaba más de Jaén

El entrenador santiagués comentó el desarrollo del encuentro: "La valoración del partido lo dice el propio resultado, fue un partido muy competido por ambas partes. Los errores que cometimos en los dos goles estaban muy trabajados. Nosotros no podemos conceder ningún tipo de oportunidad a Jaén y menos con Dani Martín, que lo enchufa todo. Esa diagonal estaba muy trabajada y teníamos que haber ajustado de sobra, pero se cometen errores. Fue un partido apretado".

Dejó claro rotundamente que su objetivo es "salvar la categoría", sin otras distracciones, y aseguró que esperaba más del Jaén Paraíso Interior vistos "los resultados que estaba cosechando". "No quiero infravalorar el trabajo de Jaén, pero quizá no lo hicimos del todo mal", finalizó.

Dani Rodríguez cree que se trata de un hecho "anecdótico"

El técnico del Jaén Paraíso Interior acudió más sonriente de lo habitual a la sala de prensa, donde analizó la situación actual: "Estamos muy contentos, pero sabemos que esto es anecdótico porque, antes o después, tendremos que bajar posiciones, aunque tenemos que disfrutar del momento. Hemos sufrido para sacar el partido adelante, pero lo importante es que cuando pita el árbitro estamos teniendo opciones en todos ellos. Con esa mentalidad tenemos que seguir".

Dani Rodríguez dijo del Santiago Futsal que fue el "rival que más difícil" les ha puesto las cosas, "no sólo en esta temporada, sino también en otras". "Creo que ha hecho una presión que nos ha dificultado el ataque y han estado vivos hasta el final. Se ha visto un buen partido, con intensidad, ya sabíamos cómo era este equipo y lástima que al principio de la segunda parte no hemos finiquitado el partido porque sabíamos que iban a tener las suyas. En la más clara, la han metido y nos han complicado las cosas", aseguró, y añadió algunos aspectos sobre su conjunto: "Nosotros tenemos lo que tenemos, seguimos invictos y con tres puntos más. Sí es verdad que esta semana no hemos estado frescos del todo físicamente y los partido a veces se dan de una manera y otra de otra, pero nosotros sabemos que si queremos ganar tenemos que correr igual o más que el rival. Hoy, el Jaén FS no ha sido menos. Mala suerte haber decepcionado al míster contrario".

El entrenador sabe que, mientras sumen "de tres en tres", la Copa de España está más cerca, aunque no descuida el próximo compromiso: "Cualquier salida es complicada, hasta última hora no se resuelven los partidos, y con Aspil-Vidal Ribera Navarra sabemos que en su pista es dificilísimo y que no va a tener problemas para meterse en los ocho primeros. Sufriremos mucho". Se congratuló, además, de que el pabellón esté lleno. "Que la gente reconozca tu trabajo siempre es bueno. Esperemos que cuando hay altibajos la genta sea comprensible y siga apoyando al equipo", apuntilló. Este año, Jaén Paraíso Interior está sacando provecho de la defensa del portero-jugador, algo que Rodríguez no cree que haya cambiado con respecto a otras temporadas: "Nunca lo he considerado un punto débil. El año pasado se defendía igual que ahora. No es algo que hayamos modificado: quizá más atención, más suerte... En este listón, sabemos que hemos avanzado con mejores jugadores".

En el día de su partido número 100, deseó que "ojalá sean muchos más" y que no hay "mejor celebración" que dormir líderes. "Si me lo hubieran dicho hace tres años estaríamos peleando por estar en los puestos altos, lo hubiésemos llamado loco", concluyó.

Dani Martín se mostró feliz tras marcar

El salmantino puso fin a una racha de tres partidos sin anotar en La Salobrejo y anotó su tercer gol de la temporada: "Al final ha habido suerte y ha sido un trabajo excepcional por parte de todos, con un derroche físico y sacrificio que es de elogiar. Una victoria muy trabajada para seguir soñando. Igual que he tenido otras ocasiones para hacer gol, la del segundo creo que es justo que pida disculpas a mis compañeros, porque en el gol de Santiago es un despiste mío, porque pierdo la marca y quiero agradecer a mis compañeros que sigan confiando en mí". Declaró, además, las sensaciones que le produjo conseguir ese gol: "Se me han venido a la mente muchos meses que lo he pasado mal por la lesión. Quiero agradecer a mis padres que hayan estado ahí, además de que han venido desde Salamanca para apoyarme porque lo estaba pasando mal. Creo que las ocasiones las tenía, pero la pelota no entraba y hoy sí que lo ha hecho y ha valido para ayudar al equipo. Si no marco y seguimos ganando, me voy igual de contento a casa.".

No se pone freno a lo que venga en el futuro porque considera que pueden "seguir soñando y jugar partido a partido con la actitud de puntuar". "Hay una euforia que es imposible de parar. Para la ciudad de Jaén, hay que valorar lo que se está haciendo, que no se lo imaginaba nadie. Somos un equipo que está invicto, se dice pronto, en siete jornadas, jugando con plantillas que van a estar arriba. A base de trabajo y más trabajo, los resultados ahí están. Lo bonito de este equipo es que entre quien entre nos sacrificamos por él, por eso creo que las cosas están yendo como están yendo", afirmó.

También tuvo palabras de su relación con el entrenador rival: "Con Santi [Valladares] siempre ha habido afecto porque se ha interesado por mi lesión, aunque yo sabía dónde quería estar, sobre todo, porque tenía la espina clavada del año pasado al no poder jugar. Soy feliz en Jaén y esto es lo más importante".

Fotografías 1, 2, 3, 5 y 6: Jaén Paraíso Interior.
Fotografía 4: LNFS.