Empate con sabor a derrota el cosechado por D-Link Zaragoza en el derbi del Ebro. Aspil-Vidal Ribera Navarra consiguió igualar el partido tras ir perdiendo 4-2 aupados por los 200 tudelanos que se desplazaron hasta la capital aragonesa. Los maños, que cuajaron un buen partido, no estuvieron finos de cara a portería en los minutos finales, donde Nano Modrego y Retamar fallaron sus repectivos lanzamientos desde 10 metros. Con uno menos en los dos últimos minutos debido a la expulsión de Hamza, los de "Pato" lograron mantener el empate.

Respeto entre los dos equipos en el inicio

El partido dio comienzo con los dos equipos guardando las distancias. En los siete primeros minutos apenas se contabilizaron un par de ocasiones sin peligro por cada equipo. Retamar y Roger eran los más incisivos en los primeros compases; precisamente gracias a ese empeño, Roger lograba adelantar al conjunto navarro a los nueve minutos tras una pérdida infantil de Víctor Tejel en su propia área. El catalán marcaba a placer el primero de los tres goles que marcaría a lo largo de la noche.

Este gol desató la reacción local, liderada por Retamar y Nano Modrego. El "10" de D-Link ponía la igualada con un potente disparo lejano ajustado a la cepa del poste izquierdo de Molina tras un saque de banda. La reacción local no acabó ahí, ya que acto seguido Nano Modrego ponía el 1-2 al culminar una contra conducida con precisión por Tejel.

Fueron los mejores minutos de los de Quique Soto, que a punto estuvieron de ampliar la ventaja de la mano de José Carlos y Ortego, pero primero Molina y después el poste evitaron que la ventaja se acentuara. Cuando mejor estaban los maños llegó el gol del empate. David ponía el 2-2 con un disparo lejano en el que Iván Bernad no puso las manos con suficiente firmeza.

De aquí al descanso, ambos conjuntos dispusieron de una ocasión clara para irse con ventaja al descanso. Ortego la volvió a enviar al palo tras una buena jugada personal y Roger probó una vaselina que detuvo Iván Bernad. Con el 2-2 y la grada entregada se llegaba al tiempo del bocata.

D-Link sale "conectado"

La segunda parte seguía con el guión escrito en el final de la primera: carrusel de ocasiones para ambos equipos, pero esta vez D-Link golpeaba primero, y por partida doble. El protagonista de este guión fue José Carlós, autor de un doblete que dejaría a los locales 4-2 a falta de 10 minutos. Pero como buena película, el actor principal iba acompañado de un actor secundario que nada tiene que envidiar: Carlos Retamar. El ala madrileño recorrió 30 metros con el balón pegado al pié y, tras un rechace, José Carlos la empujaba en el segundo palo para poner el 3-2 en el luminoso de un animoso Siglo XXI.

Esto hizo despertar al equipo ribereño, que de la mano de Lucho y Andresito estuvo a punto de hacer la igualada. Un buen pie de Bernad en el primero y un palo en el segundo evitaban el 3-3. Y de lo que pudo ser el 3-3 se pasó al 4-2. José Carlos, tras un certero pase de Ortego, fusilaba en la frontal del área para cerrar su doblete.

Cuando los de Quique Soto parecía tener el partido controlado, Iván Bernad apareció para darle más emoción si cabe al encuentro. El joven meta zaragozano erraba estrepitosamente a la hora de despejar un balón, que dejó en bandeja a Roger para recortar distancias.

Poco después, Pazos cometía la 6ª falta acumulativa de los naranjas, lo que conducñia irremediablemtne a los 10 metros. Nano Modrego, consumado especialista en esta especialidad, aparecía en escena, pero su disparo era atajado por el meta Molina. Tras esta ocasión, los de "Pato" armaron una rápida y eficaz contra que finalizó Roger para firmar así su hat-trick y empatar el partido. 4 minutos por delante y el encuentro empezaba de nuevo.

Cuando restaban 2:30 para el final, Hamza cometía la 7ª falta de los visitantes y veía la segunda amarilla. Las cosas se oscurecían para Aspil-Vidal, que se quedaba con uno menos y con otro doble penalti en contra. Retamar era el encargado de cobrar los 10 metros, pero no acertó; su disparo lo repelió el larguero.

Con uno más y portero-jugador en pista, D-Link fue incapaz de anotar. A falta de 20 segundos para el final, el dúo arbitral obvió una clamorosa falta sobre Retamar en la frontal del área que habría supuesto otro doble-penalti.

Con esta polémica se llegaba al final del encuentro, que dejaba un sabor amargo a los jugadores blanquillos, que merecieron más ante un rival directo por los 8 primeros puestos. Con este empate, Aspil-Vidal sigue invicto en liga, donde ocupa la 5ª posición, justo por encima de D-Link Zaragoza.

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Sobre el autor
Juan  Viladés Campos
Periodismo en la Universidad de Zaragoza. Escribo sobre fútbol sala, con especial atención al D-Link Zaragoza y el Real Zaragoza.