Hay días clave en la historia. Días que pueden cambiar el trascurso de todo. Esto ocurre en todos los ámbitos de la vida, incluido el deporte en cada ciudad. Aunque Cartagena aún no lo sabía, uno de los días más importantes en su historia fue cuando Javier Matía Martín (Santander, 1973) empezó a dejar a un lado su adorado balonmano y acercarse al fútbol sala. Y desde que llegó años después, ya no dejó de escribir con letras doradas momentos inolvidables en las páginas de la historia del Cartagena Fútbol Sala.

"Cartagena me lo ha dado todo. Me siento muy orgulloso de haber vestido esa camiseta". Javi Matía no ha ocultado nunca lo que siente por la ciudad que le vio llegar hace 16 años y que aún no le ha visto -ni le quiere ver- marcharse de manera definitiva. "La gente me acogió muy bien desde mi llegada, mis hijas son cartageneras… Siempre he estado a gusto en la ciudad y me he sentido muy querido por la afición, también quizás porque yo lo he dado todo por este club cuando he saltado a la cancha". Y efectivamente, así ha sido y lo sigue siendo, tal y como demuestran los números a continuación.

Aunque el '5' llegó a la disciplina de la entidad portuaria en la temporada 1999/00, fue a partir de la 2001/02 cuando el concepto de fútbol sala en Cartagena comenzó a cambiar. Fue el último año de GMI como patrocinador, y Centro Médico Virgen de la Caridad tuvo que coger las riendas después para que el club no se viese abocado a la desaparición. Además, en estas 99/00 y 00/01, el campeón de Liga fue precisamente Playas de Castellón, equipo al que había pertenecido Matía justo antes. Es por ello por lo que empezamos a contar números desde el curso 2001/02.

La lista de víctimas

Vistiendo la camiseta del Cartagena de fútbol sala, Javi Matía se ha enfrentado en temporada regular a un total de 42 equipos diferentes. Ha perforado las redes de 32 de esos conjuntos, y solo ha “perdonado” a diez hasta el momento. El primer puesto del podio de goles encajados por el capitán del cuadro portuario lo ocupa Carnicer Torrejón, con 17 goles recibidos. Después, aunque podría parecer sorprendente, está el equipo más laureado de España en este deporte: Movistar Inter, que ha recogido de su portería hasta nueve tantos de Matía. Los ocho de Santiago Futsal completan el tercer cajón.

Por detrás, Gestesa Guadalajara con siete; Zaragoza, Xota, Móstoles y Playas de Castellón con seis; Santa Coloma, O Parrulo y Segovia con cinco; Barcelona, Miró Martorell y Valencia con cuatro; UMA Antequera, Elche, ElPozo Murcia, Jaén, ElPozo Ciudad de Murcia, Lugo, Tenerife y Benicarló con tres; Jumilla, Palma Futsal, Brihuega, Salinas Villena y Boadilla con dos. Cierran la lista Levante, Barcelona B, Zamora, Hércules San Vicente y Pinto con uno.

La lista de diez equipos a los que sí se ha enfrentado como jugador cartagenero pero no les ha marcado se reduce a Peñíscola, Gran Canaria, Melilla, Andorra, Ourense, Barcel Euro Puebla, Albacete, GSI Bilbo, Leis Pontevedra y L’Hospitalet.

Aunque la campaña 2015/16 no valga para este recuento, cabe destacar que Cidade de Narón se sumó en la primera jornada a la enumeración de víctimas del cierre. Añadió su nombre a lo grande, puesto que un gol suyo a falta de minuto y medio para el final desde el punto de doble penalti sirvió para que Plásticos Romero Cartagena se llevase los tres primeros puntos en juego a su casillero, con un triunfo en tierras gallegas (2-3).

Un 15,5% de puntos gracias a sus goles

Echar un vistazo a la cantidad de puntos que se han conseguido gracias a goles de Matía también es clarificador: marcar dos goles que suponen la diferencia entre perder por uno y ganar por uno, marcar un gol que te permite empatar, o anotar cuatro goles que te permitan sacar un punto en lugar de caer por cuatro goles en casa. Este último caso se dio en la jornada 18 de la campaña 2003/04, cuando un póker (cuatro goles) suyo ayudó a los cartageneros a terminar empatando 5-5 ante Gestesa Guadalajara.

En la temporada 2001/02, los 14 goles de Javi Matía aportaron ocho puntos al equipo. En teoría puede no parecer mucho, pero sin esa cantidad, el Cartagena habría terminado la competición en decimotercer lugar en lugar del noveno, solo un punto por encima de la promoción de descenso en vez de a un punto de disputar el playoff por el título, y apenas dos puntos más de la cifra que marcó el descenso directo a la División de Plata. Esa bajada de categoría sí se habría producido una campaña después, la 2002/03, cuando sin los cinco puntos traídos por los de nuevo 14 goles del capitán, el primer año de Polaris World habría terminado en una penúltima posición y consiguiente descenso, y en cambio se acabó ese curso en promoción para acabar salvando los papeles en la eliminatoria por mantenerse.

(Foto: MARCA)

Pese a la llegada de un jugador de talla mundial como Manoel Tobías, la 2003/04 fue la campaña en la que los goles -25 en Liga regular y tres en playoffs- de Javi Matía supusieron una mayor cantidad de puntos desde que viste la camiseta de la trimilenaria: hasta 15 de los 47 (casi un tercio) que se lograron llevaron la firma de la participación del cántabro. Sin ellos, no habría habido playoffs por el título en la ciudad portuaria, y el quinto lugar no sería tal, sino el decimocuarto y su promoción de descenso. La diferencia es tremendamente significativa. Además, un tanto suyo en el último minuto dio el triunfo a los cartageneros ante Miró Martorell en el primer partido de los cuartos de final. Así, el cierre se convirtió en el complemento perfecto de Tobías, que anotó un total de 40 goles que supusieron 24 puntos.

Un año después llegó el despegue definitivo de Polaris World Cartagena. El curso 2004/05 supuso un antes y un después en la entidad. Jugadores como Cristian, Orol, Marcelo, Torras y Simi se juntaron con el objetivo de ganar la Liga, y los que en otra época eran pesos pesados del equipo fueron perdiendo protagonismo y minutos sobre la pista. Solo un punto se cosechó merced a los ocho goles de Matía, el cual no influyó en cuanto a la tabla clasificatoria. Lo mismo ocurrió en la 2005/06, con dos puntos venidos de cuatro goles (más otro en playoffs) que nada cambiaron, y en la cual se alcanzó el subcampeonato liguero.

Viendo que su participación estaba siendo reducida progresivamente, Javi Matía puso rumbo de vuelta al Playas de Castellón más de un lustro después, pero solo duró allí una temporada. Retornó a Cartagena en la campaña 2007/08, ya habiéndose marchado el patrocinio de Polaris World y viviendo la entidad una época bastante más austera. Y bajo el nombre de Tuco Muebles y el posterior de Peinsa, volvió el protagonismo del eterno capitán. Los siete puntos que aportaron sus 15 goles sirvieron para que el equipo quedase decimosegundo en lugar de decimoquinto y, por tanto, descendiendo a la segunda categoría. El guión se repitió con la temporada 2008/09, cuando Futsal Cartagena finalizó en décimo puesto, a dos puntos del playoff por el título. El acierto de Javi de cara a puerta (once tantos) significaron once puntos, y sin ellos se habría terminado en decimotercer lugar, solo uno por encima de la promoción de descenso.

Ya con la denominación de Reale Cartagena, finalizó la segunda etapa de Javi Matía en el club. Después de que sus tres goles significasen dos puntos que le dieron a los portuarios la decimosegunda posición en vez de una más abajo (2009/10), el ‘5’ volvió a Castellón para vestir la zamarra del Playas. Allí estuvo otra vez solo un curso -el 2010/11, en el que el cuadro castellonense descendió en la última jornada a manos precisamente de Cartagena-, y el siguiente cooperó con Vedruna La Unión.

Pero el corazón de Javier Matía Martín, aparte de llevar grabado a fuego a sus dos hijas, solo tiene un color, y es el de Cartagena. El club acababa de descender a la Segunda División, y no dudó en prestar sus servicios en la 2012/13 para ayudar a devolver al equipo a la categoría que se merece. Eran tiempos difíciles en la entidad, con más sombras que luces y el doble de derrotas que de victorias. Sus 16 goles ayudaron a conseguir nueve puntos más, la diferencia de salvarse con doce puntos sobre el descenso en lugar de con tres y no obligar a los de Fran Menchón a sufrir hasta el último encuentro.

Cuando Juan Carlos Guillamón aterrizó en el banquillo local del Wssell de Guimbarda de la mano de Plásticos Romero, el equipo dio un salto de calidad y la ilusión volvió a apoderarse de los aficionados al fútbol sala en Cartagena. En su primera temporada, la 2013/14, alcanzaron los playoffs, algo que habría sido imposible sin los seis puntos que aportaron los ocho goles de Javi Matía -del octavo al quinto puesto-. La 2014/15 es la más reciente, y aunque a que el cierre anotó nueve goles, ninguno fue decisivo en cuanto a la puntuación final, si bien es obvio que todos cambian los encuentros, sean del jugador que sean y del momento en que se marquen.

La cifra total es abrumadora. El club habría descendido tres veces en vez de una de no ser por los goles de su capitán. Además, de los 427 puntos que ha conseguido el equipo de Cartagena desde el año 2001 con Javi Matía formando parte de su plantilla, 66 se han cosechado gracias a goles del cántabro. Eso hace un porcentaje del 15,5%, algo bastante inusual es un jugador que desempeña la posición de cierre.

Balance desequilibrado en su ausencia

Otro dato que revela en gran medida la relevancia de Javi Matía durante este período, es el balance de victorias y derrotas cuando él no está sobre la pista. Se ha perdido un total de 40 partidos de Liga regular, y en esos encuentros, los resultados cosechados por el equipo han sido muy decantados hacia un lado.

Y es que la marca del Cartagena FS cuando él ha estado lesionado, sancionado, o fuera de la lista por decisión técnica -siempre perteneciendo a la plantilla- es de 16 victorias, ocho empates y 16 derrotas. A priori, puede parecer un récord bien equilibrado y no tan desigualado como se ha mencionado anteriormente. Sin embargo, de esas 16 derrotas, únicamente una fue durante la época álgida de Polaris (cuando se disputaron los playoffs por el título, entre la 2003/04 y la 2005/06), cuando estaban jugadores de mayor renombre para arreglar los partidos que se ponían cuesta arriba. Con el patrocinio de la empresa inmobiliaria, el registro quedó en ocho victorias, cuatro empates y esa solitaria derrota (5-3 como visitantes ante Miró Martorell en la jornada uno de la campaña 2005/06).

Ello quiere decir que cuando el dinero y la calidad no sobraban precisamente en la entidad cartagenera, la ausencia de Javi Matía se notó a raudales. Ocho victorias, cuatro empates y 15 derrotas en los partidos que se ha perdido el cántabro en el resto de temporadas, cuando los playoffs no se vieron en directo en la ciudad trimilenaria, dejando bien patente la importancia del capitán para el equipo. Especialmente remarcable fue el pasado curso, 2014/15, cuando los seis partidos que se perdió Matía se saldaron con un triunfo, un empate y cuatro derrotas.

Gol del capitán, sinónimo de bonanza

Entre Liga regular y playoffs de las temporadas comprendidas entre la 2001/02 y la 2014/15, ambas incluidas, Javi Matía disputó un total de 297 partidos, de los cuales vio puerta en 100, haciendo un total de 131 goles. Hay una tendencia evidentemente positiva en esos encuentros en los que el capitán consigue perforar las redes del rival, ya que Cartagena ha ganado 54 (54%), empatado 19 (19%) y perdido 27 (27%).

Por ejemplo, desde que la empresa Plásticos Romero es patrocinadora del club, el equipo ha cosechado nueve victorias, un empate y tres derrotas en choques en los que él suma su nombre a la lista de goleadores, ascendiendo el porcentaje triunfal hasta el 69%. En los partidos con sus goles de las once temporadas que se están contando en el presente artículo, en nueve se lograron más victorias que derrotas y en las dos restantes hubo el mismo número de unas que de otras. Eso significa que, durante ese período, no existió una campaña con más derrotas que victorias en encuentros en los que anotó Javi Matía.

En los previamente señalados 100 encuentros que han visto goles del capitán, 75 han contenido un gol suyo, 20 un doblete, cuatro un hat-trick y uno -el de Guadalajara de la 2003/04-, un póker. Como curiosidad, de esos cuatros tripletes, tres se los ha metido al mismo equipo: Carnicer Torrejón, su víctima favorita. El otro, al FC Barcelona en la 2001/02.

Idilio con 'La Bombonera'

La gran mayoría del público que acude a ‘La Bombonera’ jornada tras jornada es sabio. Es perfectamente consciente de lo que el cántabro ha significado desde su llegada, y lo importante que es reconocer su labor. Es un auténtico ídolo, y él les corresponde con goles. El idilio que tiene el cierre con el Wssell de Guimbarda es innegable: de sus 131 goles, 76 han sido en territorio cartagenero, lo que supone un 58%. Fuera de casa ocurrieron los otros 55 (42%).

Además, de las once temporadas, en ocho marcó más goles como local que como visitante; en una hubo igualdad -cuatro goles en casa y cuatro fuera en la 2004/05- y en las otras dos, sucedió lo contrario. Fueron la campaña 2005/06, cuando anotó dos en Cartagena y tres en otros recintos, y en la 2007/08, con siete goles ante su público y ocho fuera.