El Multiusos Fontes do Sar recibía, por primera vez en su historia, a UMA Antequera y Santiago Futsal estaba preparado para vivir un importante e inédito duelo ante el equipo malagueño, recién ascendido a la élite del fútbol sala nacional. La primera noticia del choque llegó antes de comenzar el mismo cuando, al parqué compostelano, saltó a calentar el gaditano Juanjo Catela que recibió el alta médica de última hora para debutar con el club santiagués.

El encuentro, que tuvo fases muy distintas, comenzó con un Santiago Futsal con hambre de victoria que le llevó a dominar los compases iniciales y a aprovechar esa superioridad para encaminar ese triunfo desde muy pronto. Los primeros diez minutos sirvieron para que los compostelanos se pusiesen con tres goles de ventaja en una muestra de efectividad que tenía destellos de clase en las botas de Diego Quintela, Álex Diz y el debutante Juanjo Catela que ofreció una primera rotación de magia a su parroquia.

Santiago Futsal encarrila la victoria

Antonio Diz fue el más madrugador pues, en el minuto dos y nueve, aprovechó dos buenas jugadas individuales de Hugo Sánchez por la izquierda y de su hermano Álex por la derecha para firmar un doblete castigando la meta malagueña. UMA Antequera ofreció tímida resistencia con una buena ocasión de Claudio Da Silva pero su vaselina golpeó en la madera y tiros lejanos de Miguel. En el ecuador del primer acto, Diego Quintela no falló a su cita semanal con el gol y batió a Juan Varela entre las piernas para hacer el 3-0.

Eran sin duda los mejores minutos de los gallegos que, sin embargo, se vieron truncados con una desafortunada acción en una falta de entendimiento entre Iker López e Iván Rumbo que acabó con gol en propia meta del segundo. Con el 3-1 y los dos equipos con 5 faltas en su casillero el ritmo bajó, ni los anfitriones ni los visitantes arriesgaban en exceso y todo indicaba que se guardarían sus opciones para la segunda mitad, con este contexto llegábamos al paso por vestuarios.

Antequera lo intenta pero no acierta

Tras el paso por vestuarios el partido dio un vuelco en su guión. Los de Santi Valladares dieron un paso atrás y comenzaron a especular peligrosamente con el resultado que poseían mientras que su rival le puso en serios aprietos subiendo la línea de presión y, guiados por Cecilio y Da Silva, creando acciones muy claras que no encontraban la definición que les permitiese recortar distancias y meterse de lleno en el choque. En el deporte quién perdona la suele pagar y esta máxima no sería una excepción en el Fontes do Sar.

La sexta falta universitaria permitió a Dani Chino sentenciar desde el doble penalti con el 4-1 que, a la postre, sería definitivo. Fue entonces cuando Moli decidió vestir a Tete con la camiseta de portero jugador pero el ataque de 5 para 4 no tuvo éxito al no generar peligro a la puerta de un Iker López que anteriormente había permitido a su equipo llegar con esta ventaja que, en los momentos finales, a punto estuvo de incrementar Diego Quintela con una acción que se pudo convertir en uno de los goles de la temporada.