El Deportivo Alavés sumó su segundo empate de la temporada ante el Sporting de Gijón, en un encuentro muy igualado, en el que ambos tuvieron oportunidades para llevarse la victoria.
El técnico argentino, Mauricio Pelegrino, introdujo varias novedades en el once, con la aparición de Theo en el lateral izquierdo, Llorente en la medular, y Deyverson en la punta del ataque.
Pelegrino optó por cambiar el sistema de juego, empleando 1-4-3-2-1 en vez del 1-4-2-3-1 utilizado en el Vicente Calderón ante el Atlético de Madrid. El sistema de juego estuvo formado por un marcador central y otro central actuando de líbero, con dos laterales actuando de carrileros. En la medular, Llorente formó el eje del centro del campo, con el capitán Manu García y Daniel Torres acompañándolo.
Los extremos actuaron abiertos en las bandas, aunque en ocasiones se colocaban en posiciones interiores para dejar las bandas a los carrileros, Theo Hernández y Kiko Femenía.
Llorente, protagonista con el balón
El debutante Marcos Llorente fue el mejor jugador del Deportivo Alavés, llevando el peso de la medular albiazul. Se colocó entre los centrales para iniciar el juego, aunque liberó esa tarea en manos del central Víctor Laguardia, jugador que se encargó de iniciar la salida desde atrás. Con el balón en posesión del central aragonés, Llorente y Torres se colocaron en cada lado, ofreciendo un apoyo para salir con el balón, aunque en ataque estático, ambos centrocampistas más Manu García, formaron una línea de tres en la que el dibujo iba cambiando constantemente.
Con el balón en sus pies, Llorente se encargó de iniciar los ataques, y de llevar el balón de un lado a otro. Realizó varias conducciones interesantes con el balón, además de innumerables robos del mismo, convirtiéndose en uno de los grandes protagonistas del encuentro en el equipo albiazul.
Positivo debut para Theo
Otro de los debutantes en el conjunto albiazul fue el francés Theo Hernández, que ha llegado en este mercado veraniego procedente del Atlético de Madrid. El lateral izquierdo completó una buena actuación, llegando prácticamente hasta la línea de fondo del ataque albiazul en más de una ocasión.
En la segunda parte limitó el número de subidas, dejando dicha tarea tanto a Ibai Gómez como a Espinoza, que se incorporó en la segunda parte precisamente en lugar del jugador de Santutxu. A pesar de ello, cumplió de forma excepcional su tarea en el lado izquierdo de la defensa.