Dicen que lo que funciona no se toca pero, ¿y lo que no funciona? ¿Qué se hace con ello? ¿Se deja hasta que cambie su desaventurado rumbo? ¿O se vuelve a probar con variantes en busca de dar con la tecla? Todo esto y mucho más es lo que se pasa por la cabeza de Santaelena cada vez que piensa en sus pupilos. El Atlético de Madrid B no carbura, no es esa máquina diseñada para cosechar puntos confortablemente como así se les esperaba, sino todo lo contrario. Cada punto es un mar de esfuerzo, cada partido, un tormento para superar a su oponente.

Y es que en lo que llevamos de temporada, que es nada más y nada menos que prácticamente un tercio de la competición, Alfredo Santaelena todavía no ha repetido un solo once inicial. Catorce partidos, catorce alineaciones distintas. Una inestabilidad, una falta de continuidad que no consigue ensamblar las piezas necesarias para la consistencia de un grupo. Analicemos esas piezas que quedan por acoplar.


Uno de los catorce onces distintos de la actual campaña ante el Tudelano.

La línea defensiva, el mal de males

Ni faltan refuerzos, ni sobran jugadores. El cupo de defensas que tiene este Atlético de Madrid B es más que competente, incluso se podría hablar de una mejoría respecto al de la temporada pasada que conformaban Manquillo o Kader, César Ortiz, Tiri y Elbis. Esta campaña, Alfredo cuenta con jugadores de calidad como los propios Tiri, Kader o Elbis, a los que se les sumaron nuevas y gratas incorporaciones como la de Raúl Gonzalez o Iván Pérez. También cuenta con Victor Mongil, Trigueros, Gallas y David Gómez.

Además, bajo palos se tiene a dos grandes porteros como Bonnou y David Gil, a los que les acompaña como tercer portero el ex del Betis B, Bernabé. Jugadores y calidad no faltan, pero no se termina de dar con la línea defensiva que aporte seguridad a la parte de atrás del filial colchonero.

Solo en 2 de 14 partidos se repitió la defensa La primera zaga, ante el Real Madrid C en la jornada 1, fue la conformada por Bonnou, Kader, Mongil, Tiri y Elbis. En ese encuentro, se atisbó su debilidad defensiva, ya que perdieron un igualado derbi por un error en las marcas en un saque de esquina. El primero de muchos. En la jornada siguiente, Mongil dio paso a Raúl González. El Atlético B realizó un gran partido en todas sus líneas y venció 0-4 en la Ciudad Deportiva del Getafe. Uno de los únicos días estables atrás, su primera y última victoria hasta el momento a domicilio y el único partido fuera de casa sin encajar goles. Siguiente partido, ante el Tudelano, un nuevo cambio atrás, salía Elbis -por su expulsión en Getafe- y entraba Iván Pérez. El Atlético B veía como los de Tudela les remontaban un 2-0 en los ocho minutos finales.

Y así nos podríamos tirar hasta la jornada 14, la actual. En ninguno de los partidos se repetió de una jornada a otra la parte defensiva del once, y solo en dos de ellos coincidieron los cinco jugadores que la formaban. Fue ante el Sariñena en la Jornada 6ª, y con el Real Unión, en la octava. Los protagonistas de dicha excepción fueron David Gil, Kader, Tiri, Trigueros y Elbis. En ninguno más de los otros 12 partidos se duplicó la defensa rojiblanca.

Los balones aéreos, un desmesurado aguero negro

En aspectos del juego, si hay algo que padezca la defensa colchonera son los balones aéreos. El balón parado, o cualquier balón que vuele hacia el área, son un problema para Santaelena y los suyos. Con centrales altos y que dominan el juego aéreo, esto debería de estar subsanado, pero es que precisamente de eso no le falta al Atlético B con hombres como Tiri, Raúl González o Mongil. La pasividad en las marcas, las malas decisiones en las salidas de los porteros, en especial en Bonnou, o simplemente y en muchas ocasiones, el mérito del rival, les ha llevado a perder muchos puntos en estas lides.

El merecer pero no recibir

Bien es cierto, que no todo son aspectos negativos en este equipo. El buen juego desplegado en muchos partidos, la velocidad y el desborde de sus puntales ofensivos y la calidad de todos y cada uno de sus jugadores, son varias de las virtudes de este equipo que no se pueden obviar. Pero hay algo que todo amante a este deporte es conocedor, y es que el fútbol no siempre es justo.

Por juego desplegado, se escaparon muchos puntos más que merecidos

Una injusticia poética podríamos decir. El buen hacer rojiblanco, no siempre es recompensado con puntos y de eso muchas veces se ha quejado su entrenador. Una propuesta futbolística a la que no renuncian, y por la que en multitud de veces han sido abasallados por el contudente juego de sus rivales, sin ir más lejos la pasada jornada ante el Laudio, un encuentro en el que fueron fusilados a pelotazos por parte de los locales.

Lo fácil sería la renuncia al fútbol preciosista que los talentosos Iván Sánchez, Omar, Aquino y demás destilan, pero eso es algo que Alfredo Santaelena no aprobará. No le queda otra al de Vicálvaro que confiar en sus pupilos, darle rienda suelta a su talento y dar la tecla con su once ideal de una vez por todas, antes de que sea tarde. Aquí solo hay una cosa clara, y es más que positiva, que la plantilla pondrá todo lo posible para revertir esta situación y que están más unidos que nunca para ayudar a ese técnico que tanto les necesita.