En tres años en la ribera del Manzanares, Thibaut Courtois nunca ha dado una voz más alta que no fuera la de por y para el equipo. El belga trabaja y cumple como una hormiga. En silencio, enseñando su trabajo y dedicación como primera carta de presentación. Lo colectivo siempre por encima de lo individual. Con 21 años, ‘Tibu’ aguanta con firmeza y entereza bajo los palos del Atlético de Madrid, en una posición que en los últimos años muchos han sido devorados y pocos se han sabido mantener a un gran nivel.

Ha tardado tres años Thibaut Courtois para sacar pecho en una declaración después de un partido. “He hecho una parada clave”, decía el belga a los micrófonos de Canal Plus tras ganar en San Siro. Conciso, pero directo. Con una inocencia terrible, parecía sentirse hasta culpable por recordar aquella mano que sacaba a cabezazo de Andrea Poli para evitar el gol del AC Milan en el primer tiempo. Jamás, durante la estancia en la ribera del Manzanares, Courtois se había piropeado en público tras una parada.

‘Tibu’ ha tenido infinitas oportunidades para salir en público y vociferar que, a sus 21 años, es uno de los mejores porteros del mundo. Una por cada partido del Atlético de Madrid. La mano a Özil en la final de la Copa del Rey o el repertorio de movimientos contra el Athletic de Bilbao en los cuartos de final de la Copa del Rey son algunas de las imágenes que perdurarán de por vida en la retina del aficionado rojiblanco, los relatos que un día los abuelos contarán a sus nietos, y éstos a su vez a sus hijos, recordando la emoción que ponía su bisabuelo para relatar como un espigado belga de 198 centímetros de altura echaba el cerrojo a la portería del Atlético.

Como el busto que Jesús Gil dedicó a Milinko Pantic, la directiva del Atlético de Madrid debería levantar una estatua a Courtois que se vea desde la bajada de Pirámides hasta el Vicente Calderón. El belga invita al Atlético de Madrid a soñar allá hasta donde quiera. Eliminado de la Copa del Rey, sostiene al equipo en Liga y le invita a imaginar un futuro muy lejano en la Champions League. El Atlético, un grande del deporte español, conquistó San Siro con una gran victoria. Para que los rojiblancos puedan permitirse seguir compitiendo contra los mejores en Europa, Courtois debe ser fichado. Ya lo dijo Simeone: “Todo lo que se pague por Courtois es barato”. Palabra del ‘Cholo’.