Si hay alguien que siempre ha mantenido el discurso de que el Atlético de Madrid dependía, única y exclusivamente, de sí mismos para obtener éxitos, ese ha sido Diego Pablo Simeone. El argentino buscó el punto más alto y ambicioso de sus sueños y lo ha mantenido en pie hasta el final. Ni el más optimista ni el más creyente de las rayas rojas y blancas soñó con tanta fuerza como sí lo hizo ‘el Cholo’ con sus jugadores. Por los tiempos que corren resulta complicado creer en los milagros, pero no queda duda que lo que sí se puede es creer en las personas que son capaces de obrarlos.

 A su Atlético de Madrid lo condenaron a la caída desde el mes de agosto. Mientras, ganaba al Real Madrid en el Santiago Bernabéu, avanzaba rondas en Copa y Champions y mantenía el ritmo del Barça en la cabeza de la Liga. El coreado “ya caerá” se quedaba sin argumentos. La etapa como jugador de Simeone en la ribera del Manzanares sirvió para que entendiera que un atlético jamás se rinde.

Sacó un vital empate en la ida de los cuartos de final de la Champions League contra el FC Barcelona en el Camp Nou sin Arda Turan y Diego Costa. El destino siempre ha sido caprichoso y el Atlético de Madrid un equipo al que nunca le pone las cosas sencillas. Simeone se jugó contra el Barça el título de Liga, también, sin Arda Turan y Diego Costa en el terreno de juego, dos contratiempos que casi se saldan con un campeonato que pintaba en rojo y blanco.

Con la lesión de dos jugadores tan importantes como ellos, Alexis Sánchez sacó su fusil para, primero, callar a los más críticos y, segundo, para darle una posible Liga al FC Barcelona. El panorama no pintaba bien para el Atlético de Madrid, que se marchaba al túnel de vestuarios en el descanso con la derrota en el bolsillo y con un golpe moral demasiado grande.

A por la victoria

El Atlético de Madrid saltó al terreno de juego en la segunda mitad sin complejos y sin temores. En el primer minuto de la segunda parte David Villa estrelló un disparo contra la cepa del palo. El equipo subió su línea arriba y buscó con ansia un gol que lo metiera dentro del partido.  Era, sin duda, otra actitud. La charla motivadora de Diego Pablo Simeone en el descanso surtió efecto.

Pero…¿qué dijo ‘el Cholo’ a sus once guerreros para que salieran con esa inyección de optimismo? El técnico argentino aprendió de su etapa como jugador del equipo rojiblanco que un atlético nunca se rinde. Se armó de coraje y convenció a sus jugadores que la Liga aún era posible, que nada estaba perdido y que el Atlético volvería a Madrid con la Liga en sus vitrinas. “Nos transmitió su confianza en que íbamos a marcar un gol”, reconoció Godín en declaraciones a Canal Plus. Y el gol del uruguayo sí llegó.