Si bien las salidas de jugadores clave del campeón de Liga como Diego Costa, Filipe Luis o Courtois parecían mermar un proyecto que podría tocar fondo, las ilusiones se han renovado viniendo otras caras de un nivel similar e incluso más completo. Repasamos qué se espera de este nuevo Atlético de Madrid y hasta qué punto Simeone sacará provecho de una no tan renovada plantilla que seguirá teniendo hambre. 

1. Oblak: ¿garantía o promesa?

La baja de Courtois es, por encima de Diego Costa, la más sensible de todas. El belga fue decisivo en cada una de sus actuaciones y alcanzó el nivel de los mejores porteros del momento en toda Europa. Su gran envergadura, sumada a un buen desplazamiento, salida por alto, reflejos y un extraordinario uno contra uno aumentó la confianza también a la línea defensiva próxima. Ya en el Chelsea, el Atlético ha movido ficha rápido: Oblak y Moyá llegan para hacer olvidar, tarea difícil, al ya ex portero colchonero. 

Oblak y Moyá llegan para hacer olvidar a Courtois 

El esloveno fue titular durante la última mitad de temporada en un club importante como es el Benfica y Moyá ha sido siempre portero fiable en Getafe. Oblak reúne características similares a Courtois, y Simeone podrá seguir contando con un gran punto a favor en cada envío a área propia con un portero que domina el juego aéreo a la perfección. El techo, no obstante, es altísimo. Se trata probablemente de la posición que genera más dudas partiendo de los resultados de la última campaña.

2. La línea defensiva: manteniendo el bloque  

Del Filipe Luis, Godín, Miranda, Juanfran al Siqueira, Godín, Miranda, Juanfran. La baja de Filipe Luis es importante: el brasileño reunía en su perfil un lateral capaz de llegar a área rival, con muy buenas condiciones físicas y tácticamente excelente. Pocos laterales de perfil ofensivo saben escoger mejor cuándo pisar campo rival o no que Filipe. Su espalda nunca fue un tormento, y corregía siempre bien por velocidad. Su guante en la zurda para enviar al área rival fueron bazas ofensivas, creando constantemente situaciones de superioridad numérica ante el oponente directo del interior de su lado.  

Siqueira por Filipe: único cambio en el XI titular

Siqueira es un perfil similar pero con menos seguridad defensiva. Con excelente golpeo y dominio del juego a balón parado (atrás quedan sus funciones como lanzador de jugadas de este estilo en Granada, incluso penaltis), ofensivamente no tiene mucho que envidiar a Filipe Luis. Tácticamente el ya jugador del Chelsea sí es superior. Mejor toma de decisión para salir de zona de influencia y dominio de situaciones de 1x1.

Ansaldi es polivalente; la temporada, larga

Mientras que Juanfran es garantía en el costado derecho (y la llegada de Ansaldi como defensa polivante que puede ocupar dichas zonas de juego, también la del central), la gran noticia del bloque de Simeone es mantener una de la pareja de centrales más sólidas de todo el mundo: Godín y Miranda. Seguridad, dominio del juego aéreo, contundentes, un perfil más de ataque organizado y otro para jugar con metros y al corte y una experiencia que luce por completo. Son, probablemente, la pareja de centrales de mayor garantía de la pasada campaña liguera, añadiendo también buenos números ofensivos cuando se incorporan al ataque en acciones a balón parado. 

3. Gabi seguirá capitaneando con los mismos en el centro

El centro del campo no sufre cambios. El 4-4-2 clásico de Simeone con tres líneas muy marcadas seguirá siendo posible gracias a la permanencia de cuatro hombres clave más un par de variantes: Koke, Gabi, Tiago y Arda y la aportación de otros como Mario Suárez o Cebolla Rodríguez. Mientras que Tiago ha firmado a última hora tras haber estado cerca del Chelsea de Mourinho, Gabi ensalza un año más su figura como capitán en la línea de mayor recorrido y desgaste de los del Calderón. 

Koke para imponer el ritmo de juego y Arda en zonas intermedias; claves

Koke y Arda jugarán por fuera manteniéndose fieles a un índice de trabajo defensivo alto. Orientar al rival a carril lateral y generar una vez allí situaciones de superioridad numérica y posicional parece ser otra de las bazas de este Atlético de Madrid en fase de defensa organizada, donde se consolidó como el mejor equipo del mundo con lección tras lección en cada actuación. Ambos tienen también un papel fundamental en ataque: Koke desplaza a la perfección a la última línea y espalda de defensa rival y Arda domina zonas intermedias y espalda de línea de resistencia más próxima a balón cuando éste se sitúa en el centro del campo. Uno como timón y líder del ritmo de juego y el otro como enlace, parecen fijos en el sistema del técnico argentino. 

Gabi, Tiago y Mario Suárez serán los encargados de jugar por dentro. Pivotes de perfil más defensivos, algo limitados técnicamente, pero con excelente lectura de juego e interpretación de situaciones de partido. Constantes en su zona y sin perder la marca, ofrecen siempre libertad a los más adelantados para arriesgar cuando los metros y espacios que el rival cede así lo indican. 

4. Una delantera más asociativa 

Si bien el Atlético de Madrid sufrió el año pasado ante equipos que le cedían iniciativa y les obligaban a llevar el peso del partido a base de ataques organizados y algo más estáticos, con menos metros y un Diego Costa más "encerrado", parece que Simeone ha apostado por mejorar esta faceta con la llegada de Mandzukic y Griezmann. 

La salida de Costa exige cierta reconversión en la última línea

Diego Costa fue el mayor símbolo del campeón de Liga, no cabe duda de ello. Con un excelente juego entre centrales, amplia gama de recursos para finalizar, disputas en su zona y enorme capacidad para ganar siempre y anticipar cada balón próximo a su terreno, sus goles fueron la vida en términos ofensivos para el equipo madrileño. David Villa, por su parte, aportó ese desgaste, experiencia y hambre de títulos a un nivel de consolidación mayor que el resto que ayudó siempre al resto. Con un enorme trabajo defensivo ante equipos que iniciaban mucho con pivote (pregunten a Busquets, por ejemplo), el asturiano realizó partidos de altísimo nivel al mando de Simeone, como la final de Champions ante el Real Madrid. 

Mandzukic es un perfil similar pero a la vez diferente a Diego Costa. Jugador de área, de buen remate y dominio en el juego aéreo, tiene mejores aptitudes técnicas que el hispano-brasileño y capacidad para asociarse. Si sus inicios fueron como extremo, algo más caído en el carril lateral, su apuesta generaría en principio mejores y mayor amplia de recursos cuando el rival exiga jugar más organizado y con menos espacios y metros en la transición ofensiva (o dicho de otra forma, contraataque). Mientras que Costa es un 9 más estático, entre centrales, para fijar y estirar el campo para llegadores (Koke y Arda lo agradecieron siempre), Mandzukic puede cumplir esa misma función con creces pero alternanto también el venir a recibir cuando las opciones pidan más hombres por dentro para superar. 

Griezmann ofrece garantías en ataque organizado, el gran déficit del último Atlético

Griezmann por su parte es algo muy diferente al segundo pinta que nos tenía acostumbrados Simeone en la pasada campaña. Lejos de Adrián o Villa, su perfil es más cercano a Diego Ribas. Tiene mejores condiciones en términos de recorrido y capacidad técnica. El enlace ideal, el gran reto de Simeone será inculcarle el trabajo defensivo al que uno debe sometere cuando llega a un sistema como el del argentino. Griezmann lee muy bien espacios y tiene condiciones tanto como llegador con metros como jugador para zonas intermedias cuando el rival no deja huecos. Su llegada es la más ilusionante de todas las firmadas. 

5. El sistema 

Conservador total o conservador con matices. A Simeone el 4-4-2 más clásico, reencarnando muchas veces al mítico Milan de Arrigo Sacchi, le dio enormes resultados. Aún así son muchos los que comentan pequeños matices en este nuevo año que entra, como podría ser el 4-1-4-1. Si existe un jugador diferencial para definir según su posición qué sistema utilizará el Atlético de Madrid en cada partido ese es Griezmann

Como enlace y segundo delantero o más caído a un lado centrando a Koke y retrasando a Gabi o Tiago. De dónde parta el francés veremos después la rigidez del sistema y movimientos del conjunto colchonero. Mientras las variantes estén intactas, veremos hasta qué punto Simeone es versátil en su discurso y prolongación de su figura en el terreno de juego.