Diego Pablo Simeone puso las cartas encima de la mesa en el inicio de la segunda fase de la pretemporada del Atlético de Madrid, en la que los rojiblancos enfilan su primer objetivo del año, la conquista de la Supercopa de España ante el Real Madrid. Antes de ello, los rojiblancos tienen este miércoles un compromiso amistoso ante el Galatasaray,subcampeón de la liga otomana, en la ciudad de Izmir.

El técnico rojiblanco no ocultó el que probablemente será su once inicial ante los hombres que dirige Cesare Prandelli. Con las ausencias de Oblak y Griezmann, que seguirán su puesta a punto particular en Madrid de cara a la temporada, y con las bajas de Manquillo, que negocia su cesión al Liverpool; de Cebolla Rodríguez, también negociando su salida; Guilavogui, que no cuenta para el argentino; y la de Alderweireld, en un caso parecido al del esloveno y el galo tras su participación en el Mundial de Brasil con Bélgica.

Así las cosas, Simeone probó con Moyá en la portería, que parece haberle cogido la delantera a Jan Oblak en estos primeros compases; la defensa de gala con cuatro hombres, con Juanfran y Siquiera a los laterales y Miranda y Godín comandando la línea como centrales. En el medio campo caben las probaturas, con un doble pivote formado por Mario y Tiago, Koke a la izquierda y Gabi, el capitán, a la derecha. Arda Turan sería el enganche y Mario Mandzukic el hombre de referencia de los rojiblancos.

Tras ganar por la mínima al Numancia con gol de Héctor, vencer en los penaltis al San José Earthquakes y perder, también desde los once metros, contra el América, el Atlético querrá mantener la buena cara ofrecida, en la que mantiene su solidez habitual y apenas concede ocasiones de gol. De hecho, no ha encajado ninguno en tres partidos. Pero se enfrenta a su escaso bagaje goleador, algo que con la actuación de Mandzukic debería comenzar a subsanarse.